El preso político cubano Virgilio Mantilla, aislado en la cárcel de Cerámica Roja, Camagüey, podría ser condenado a tres años de privación de libertad, dijo la activista Cristina Isis Alfonso a Radio Martí.
Según Alfonso, otra petición fiscal incluye una sanción "por poner en 2020 carteles con el Manifiesto del 10 de Octubre de 1868, que marcó el inicio de la Guerra de los Diez años contra España".
Además, le fue impuesta otra sanción por protestar pacíficamente durante el levantamiento anticomunista del pasado 11 de julio en la Isla. Ambos hechos tuvieron lugar en la localidad de Céspedes.
"A Virgilio Mantilla le están pidiendo una pena de tres años de prisión por lo de las protestas y siete meses por lo de los carteles", dijo la opositora.
"En Cuba no hay justicia. Entonces lo que quieren es tenerlo en prisión a él como a muchos activistas de derechos humanos en Cuba", declaró Enrique Galindo, activista de la Unidad Camagüeyana por los Derechos Humanos, de la que Mantilla es fundador.
Como es habitual con los opositores, la Fiscalía argumenta delitos comunes para evitar la connotación política. En el caso de Mantilla dice que la sanción de siete meses es por un delito de "acaparamiento".
Por otra parte, Alfonso dijo que "lo único que hizo Mantilla durante las protestas del 11J fue salir a la calle con un megáfono pidiendo libertad y respeto a los derechos humanos en Cuba y, claramente, eso no es un delito".
Alfonso denunció que desde que fue llevado a prisión, Mantilla se encuentra en celda de castigo y aislamiento, y que ello es muestra de ensañamiento con el activista. El opositor se ha contagiado con Covid-19 dos veces en la cárcel.
Esta semana el Centro para una Cuba Libre, con sede en Washington, hizo un llamado a las organizaciones internacionales de derechos humanos para que se solidaricen con Mantilla por lo que definió como un "juicio de carácter punitivo contra un defensor de los derechos humanos".
Mantilla Arango, quien fue liberado el pasado 4 de julio tras cumplir una condena de ocho meses por manifestarse en apoyo al Movimiento San Isidro, fue juzgado nuevamente por su participación en las protestas del 11 de julio. Ya fue sancionado por el Tribunal Municipal de Florida el 23 de julio, a nueve meses de privación de libertad por un delito de "desacato".
