Amnistía Internacional (AI) expuso el caso del líder opositor cubano José Daniel Ferrer en un foro online por el Día Internacional de las Víctimas de las Desapariciones Forzadas con el que ejemplificó la situación en América Latina y particularmente en Cuba, y con el que condenó la actuación del régimen de la Isla tras las protestas ciudadanas del 11 de julio.
El líder de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU) "se encuentra en detención sin que se conozca su paradero, sin que se haya dado información a su familia, representantes legales u organizaciones sobre su estado de salud, condiciones o el lugar de su detención", dijo Erika Guevara-Rosas, representante de AI para el continente americano en el evento titulado "¿Dónde están?".
"Esto constituye una desaparición forzada que claramente tiene la intención de persuadir a las personas que quieren seguirse manifestando en Cuba, como un ejemplo del castigo que podrán recibir si ejercen sus derechos humanos", denunció Guevara-Rosas.
La abogada de derechos humanos recordó que el 11 de julio en Cuba se vivieron protestas históricas en donde miles de personas en más de 50 ciudades y pueblos del país tomaron las calles, "demandando el ejercicio fundamental de sus derechos, la rendición de cuentas y libertad".
"Cientos de personas fueron detenidas arbitrariamente solo por participar en las protestas. Entre estas personas detenidas se encuentra José Daniel Ferrer García", condenó Guevara-Rosas.
Dijo que Ferrer, declarado prisionero de conciencia por Amnistía Internacional, fue arrestado en su intento por llegar a una de las manifestaciones. "Fue detenido con su hijo de forma arbitraria. Fueron llevados a un centro de detención. Su hijo es la última persona que lo vio cuando estuvieron detenidos juntos", recordó.
Guevara-Rosas, quien también se refirió a la situación de desaparecidos en México, Colombia, Honduras, Perú, Argentina, Nicaragua, ha denunciado reiteradamente la actuación de las autoridades cubanas con la represión desatada tras las protestas del 11J.
Los detenidos en Cuba tras las protestas ciudadanas del 11 de julio ascienden a 874 personas, según datos de la asesoría legal Cubalex publicados el sábado en su perfil de Facebook. Unas 316 han sido liberadas y continúan detenidas 401.
Nelva Ismaray Ortega Tamayo, esposa de Ferrer García, publicó el lunes en su perfil de Facebook que pese a haber recibido una presunta nota manuscrita del líder opositor, ella y el resto de la familia lo siguen dando como "secuestrado y desparecido de forma forzada" al cumplirse ya "50 días de injusto, arbitrario e ilegal encierro".
Según el escrito de Ferrer, "estaría en estos momentos en la prisión de Mar Verde y habría pasado hasta el día 12 de agosto en el Centro de Operaciones, Investigaciones e Instrucción Penal de Santiago de Cuba, más conocido como el centro de torturas Versalles, donde además del injusto y arbitrario encierro enfrentó hambre, calor y mosquitos todo el tiempo".
La nota señala, además, que desde la tarde-noche del día 12, en la prisión de Mar Verde, "permanece confinado en celda de aislamiento semidesnudo (porque le niegan ropa que no sea la de preso común, algo que los presos de conciencia se niegan a portar), en condiciones crueles, inhumanas y degradantes".
"Hasta que no lo vea frente a frente me mantendré diciendo y denunciando que mi esposo aún sigue secuestrado y desaparecido, ya que no hemos tenido contacto físico o verbal con él, y no hemos podido verificar si el escrito es o no suyo, aunque queremos darle crédito y tranquilizar aunque sea en mínima medida a quienes puedan estar, como nosotros, sufriendo su marcha y desaparición", dijo Ortega Tamayo.
La activista, médico de profesión, también dijo que, por informaciones recibidas, no corroboradas, Ferrer García estaría en huelga de hambre desde el pasado 28 de agosto exigiendo ver a su familia.
En in país que no produce nada y vive de la impovisación y las donaciones, es comprensible que mantengan un aparato represivo que se permite montarle a una simple e inofensiva mujer una guardia policial frente a su casa las 24 horas del día. Por algo así aquí el ministro del interior lo hubieran crucificado.
¡Qué clase de bola! Todo el mundo sabía que estaba en calabozo del órgano de instrucción hasta que le espantaron la revocación de la libertad condicional para llevárselo a la pocilga carcelaria de Mar Verde. Y no tiene gracia estar tupiendo a Amnistía Internacional sin haber dado el paso elemental de nombrarle abogado defensor para saber, al menos semanalmente, en vivo y en directo, dónde y cómo está. Como dijo no sé quién, en Cuba no te desaparecen: te aplastan como una cucaracha.