La organización PEN América, enfocada en la literatura y la defensa de los derechos humanos en el mundo, celebró la liberación del artista cubano Luis Manuel Otero Alcántara a través de un comunicado, pero afirmó que "su internamiento forzoso nunca debería haber ocurrido".
Julie Trébault, directora de la Conexión de Artistas en Riesgo (ARC) de la organización, denunció que la reclusión hospitalaria de Otero Alcántara "es una de las técnicas crueles y represivas que el gobierno cubano emplea para silenciar las voces de los artistas disidentes".
"El acoso constante del Gobierno contra Otero Alcántara y otros artistas cubanos debe cesar. A medida que aumentan las agresiones, ARC, así como nuestras organizaciones asociadas en materia de derechos humanos y las artes, seguirán trabajando para llamar la atención mundial sobre estas tácticas inhumanas e inaceptables", agregó Trébault.
"Hacemos un llamamiento enfático para que la campaña gubernamental de acoso en Cuba termine, y para que las autoridades cubanas detengan todos los intentos de amordazar la disidencia y criminalizar a los artistas, escritores y activistas independientes", finalizó.
PEN América calificó la detención de Otero Alcántara como "una señal más de la creciente represión del Gobierno cubano contra los artistas independientes, al igual que la desaparición del rapero disidente Maykel Castillo Pérez".
"Su detención y posterior liberación son las últimas de una larga serie de tácticas de acoso e intimidación a las que se ha enfrentado el artista como consecuencia de su activismo político y sus críticas al Gobierno de la Isla. Se calcula que Otero Alcántara ha sido objeto de 31 ataques por parte del Estado, incluidos arrestos domiciliarios y detenciones arbitrarias, y ha estado bajo vigilancia permanente", agregó el comunicado.
El informe "Arte bajo presión", publicado por la organización, denunció el efecto del Decreto 349, "una norma que otorga a las autoridades amplias facultades para limitar el sector cultural sobre los artistas y activistas en Cuba".
PEN América, fundada en 1992, lidera la Conexión de Artistas en Riesgo (ARC), un programa dedicado a asistir a los artistas en peligro y a fortalecer el campo de las organizaciones que los apoyan.
La organización, con sede en Nueva York, está conformada por una comunidad de más de 7.500 novelistas, periodistas, escritores de no ficción, editores, poetas, ensayistas, dramaturgos, editores, traductores, agentes y otros profesionales de la escritura, así como devotos lectores y simpatizantes.