La joven opositora cubana Lisset Naranjo Girón, de 36 años de edad, murió el viernes pasado en La Habana tras sufrir una insuficiencia renal que la mantenía sometida a tratamiento de diálisis tres veces a la semana, informaron varios activistas.
"Tristeza en nuestros corazones. Ahora (viernes 9 de abril) recibimos la triste noticia que había fallecido nuestra hermana, amiga, patriota, delegada del Movimiento Democracia, del Movimiento Opositores por una Nueva República (MONR) y de la Resistencia Cubana", escribió José Díaz Silva en su perfil de Facebook.
"Madre, abuela, buena hija, buena madre, buena amiga, Lisset Naranjo Girón, una patriota joven con 36 años, se nos va. Siempre estuvo al frente en nuestra lucha, hasta que enfermó de los riñones. Tres veces a la semana tenía que ir al hospital IPK para hacerse las diálisis", añadió Díaz Silva.
"Hoy estaba en eso y me dicen que le dio un paro y no lo pudo rebasar. Hoy nuestros movimientos lloran a esta patriota que se nos va para el cielo, donde está nuestro señor todo poderoso Jehová. Nuestras condolencias a sus padres, hija, nieta y familia, siempre estará presente en nuestros corazones. En paz descanse", concluyó.
Manuel Cuesta Morúa describió a Naranjo como "joven activa, animada y responsable de mucho de lo que ha logrado la sociedad civil en territorios de género y en los lugares más humildes".
"Cuba En Plural le debe mucho. A ella estamos obligados: a su risa, su memoria y su buen ánimo, a pesar de saberse mortalmente enferma. Apoyo cerrado a su familia. Que en paz descanse", dijo también en Facebook.
La opositora Ailer González Mena denunció en esa misma red social que la activista de derechos humanos falleció "en el abandono y la precariedad" y compartió una imagen de "las condiciones en que vivía".
"Deja una hija de 18 años y una nietecita", dijo.
"Son los opositores anónimos y los presos políticos sin reflectores, ni mediáticos los que llevan la peor parte en el enfrentamiento a la tiranía. Todo es una gran hipocresía. Para Lisset ya es tarde, no le tocó la solidaridad desbordada y selectiva, ni portadas, ni campañas. En paz descanse, guerrera", escribió.
En Paz Descanse. Que el Altísimo, Señor Jesucristo, Dios Bendito, la acoja en su seno, que en este momento esté en la gloria, disfrutando de las maravillas que nos tiene preparado el Dios Viviente.