"Voy a ser implacable con ustedes", aseguró el represor que se hace llamar mayor Alejandro de la Seguridad del Estado cubana, tras arrestar a los activistas del Comité Ciudadanos por la Integración Racial (CIR) Marthadela Tamayo y Osvaldo Navarro durante la tarde del jueves en La Habana.
Los activistas fueron arrestados en la panadería de su barrio, cuando bajaron a comprar alimentos para unos obreros de la construcción que están trabajado en su vivienda, denunció a DIARIO DE CUBA el coordinador nacional del CIR Juan Antonio Madrazo Luna.
En esa ubicación, Alejandro, el agente de la policía política que normalmente los hostiga, los abordó y les pidió que lo acompañaran. "Ellos le dijeron que si no tenía orden ninguna no tenían por qué acompañarlo. Entonces mandó a los policías a arrestarlos. Puso a Marthadela en una patrulla, a Osvaldo en otra y él en su moto", precisó.
Ambos estuvieron detenidos algunas horas en la Cuarta Unidad de la Policía del Cerro, reportaron a la salida desde un teléfono prestado, dado que los suyos se quedaron en su domicilio.
No obstante, el agente los amenazó durante la detención: "Les vamos a pasar la cuenta", dijo, y les impuso multas de 30 pesos a cada uno con el argumento de que hace dos meses ambos se negaron a asistir a una citación a una unidad de Policía.
En el momento de la detención, el propio represor que dirigió el operativo amenazó a la madre de Marthadela, Adela González, con arrebatarle el teléfono cuando ella intentó hacerle fotos.
También en la mañana del jueves el propio agente Alejandro había visitado a Jacqueline Madrazo, de la Red de Mujeres por la Igualdad del CIR, para pedirle conversar con ella mientras la activista estaba trabajando en el mercado donde labora como cuentapropista.
Cuando la también hermana del líder del CIR le indicó que estaba atendiendo a clientes y no podía conversar con él, el represor le comentó en forma violenta: "Pues yo te voy a citar. Vengo en son de conversar, porque la única que puede salvar a tu hermano eres tú. Ya con él ni con Marthadela ni con Osvaldo se puede conversar. Con ellos lo que viene es un proceso. Tengo las pruebas para procesarlos, porque reciben financiamiento y la actividad de oposición de ellos se les acabó ya".
"Hoy para el CIR ha sido un día de tensiones y amenazas", resumió Madrazo Luna.
La policía política ha hostigado durante mucho tiempo a los activistas del CIR, a quienes ha sometido a arrestos arbitrarios, a retención obligatoria en sus hogares, a quienes prohíbe reunirse e impide viajar al extranjero.
Por esa razón, en febrero pasado la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) otorgó medidas cautelares a favor de Nancy Alfaya, Jorge Olivera y María Elena Mir Marrero, todos activistas de la organización y víctimas de esas y otras acciones represivas.
La CIDH tomó la decisión tras considerar que los tres "se encuentran en una situación de gravedad y urgencia de riesgo de daño irreparable a sus derechos".