Cubanos de la Isla y el exilio, junto a representantes de gobiernos e instituciones democráticas del mundo, ratificarán el próximo viernes en la Torre de la Libertad de Miami el "Acuerdo por la Democracia en Cuba", en el que denuncian la ilegitimidad del nuevo Gobierno designado este octubre.
"Proponemos pasos concretos por el cambio de sistema en Cuba ante el agravamiento de la crisis en la Isla y las consecuencias dramáticas de la injerencia del régimen cubano en el Hemisferio", sostiene el Comité Organizador de la Oposición Cubana, la Resistencia y el Exilio.
El pacto, que suscriben organizaciones como la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU) y CubaDecide, entre otras, presenta a la nación cubana como "una sola en el territorio nacional y en la diáspora".
Entienden que "el presente régimen se ha mostrado incapaz de asegurar la libertad y la justicia y de promover el bienestar general y la solidaridad humana en nuestra patria", por lo cual establecen "mediante un gran consenso nacional y como una clara alternativa a la opresión actual" el mencionado "Acuerdo por la Democracia en Cuba".
"Reconocemos como principio fundamental de la Nueva República que Cuba es una e independiente, cuya soberanía reside en el pueblo y funciona mediante el ejercicio efectivo de la democracia representativa pluripartidista, que es el gobierno de la mayoría con respeto absoluto a la minoría", dice el documento.
Señala que "(…) al fin del régimen tiránico actual, el gobierno provisional o de transición tendrá la obligación de devolverle la soberanía al pueblo mediante garantías de su "participación en las decisiones de la nación, a través del ejercicio del sufragio universal directo y secreto para elegir a sus representantes y el derecho a postularse para cargos públicos".
Demanda "promulgar de inmediato una amnistía general para la liberación de todos los presos políticos, incluyendo a aquellos condenados por falsos delitos comunes, y cancelar las causas políticas pendientes contra los cubanos exiliados, para facilitar su regreso a la patria y su reincorporación a la vida nacional".
Asimismo, se propone "organizar un poder judicial independiente, imparcial y profesional; reconocer y proteger la libertad de expresión, de prensa, de asociación, de reunión, de manifestación pacífica, de profesión y religión, y legalizar de inmediato a todos los partidos políticos y demás organizaciones y actividades de la sociedad civil".
Por otra parte, plantea el amparo "a los cubanos contra todo tipo de desalojo arbitrario de sus viviendas, así como contra toda detención, registro, allanamiento, confiscación o agresión arbitraria, y contra la violación de su correspondencia, documentos y otras comunicaciones y defender el derecho de todos a la intimidad y el honor".
También, "convocar a elecciones libres con la supervisión de organismos internacionales en un plazo no mayor de un año, para un Congreso Constituyente que establezca una Constitución y que durante su existencia pueda legislar y fiscalizar al Ejecutivo. Lograda así la legitimidad democrática, convocará a elecciones generales según establezca la Constitución".
Al acuerdo también busca "reconocer y proteger la libertad de gestión económica; el derecho a la propiedad privada; la libertad sindical; el derecho al convenio colectivo y a la huelga; el derecho a la participación real del pueblo cubano en el desarrollo económico; y el acceso a la salud y la educación públicas e iniciar el restablecimiento de los valores cívicos en la misma".
Por último, pretende "tomar con urgencia medidas para proteger la seguridad medioambiental y proteger y rescatar el patrimonio nacional, así como propiciar y garantizar la profesionalidad, dignidad y neutralidad política de las Fuerzas Armadas y crear cuerpos de orden público cuyas normas de conducta se ajusten a los principios" del Acuerdo.
La ceremonia de Ratificación del Acuerdo por la Democracia del próximo 25 de octubre a las 6:00PM será presidida por Lincoln Díaz-Balart y miembros del Comité Organizador de la Oposición Cubana, la Resistencia y el Exilio.
Asimismo, Luis Almagro, Secretario General de la Organización de Estados Americanos (OEA), y Carlos Trujillo, Embajador de los EEUU ante este organismo, y representante del Departamento de Estado, ofrecerán una conferencia magistral.