El vicepresidente del estatal Instituto Nacional de Deportes, Educación Física y Recreación (INDER), Ariel Sainz, y el presidente de la Federación Cubana de Boxeo y comisionado nacional, Alberto Puig de la Barca, anunciaron el lunes a la prensa la aprobación del boxeo femenino en Cuba, cuya práctica ha sido oficiosa desde la década pasada, pero que ahora se hará oficial.
"Vamos a recuperar lo perdido. Se hizo un estudio profundo. No nos dejamos presionar por el tiempo. Hoy es el día en que estamos convencidos, luego de todas las investigaciones realizadas. Es un paso seguro, es el momento y no correremos ningún riesgo", dijo Puig de la Barca, citado por el sitio oficial Cubadebate.
"El éxito dependerá de la comunicación que podamos tener con nuestras mujeres. Por eso, será necesario redoblar la publicidad, ver programas", agregó el funcionario, al pedir a los medios asistentes su apoyo.
Según Sainz, Cuba "es un referente del boxeo internacional. Sería contraproducente no incorporar a nuestras mujeres con los pasos que ha dado la Federación Internacional de Boxeo Amateur (IBA). De los 202 países afiliados, en 186 se practica el boxeo femenino".
El apunte del funcionario contrasta con los llamados en ese mismo sentido y apelando a los mismos argumentos realizados por personas vinculadas a la práctica del pugilismo en la Isla, como el entrenador Alcides Sagarra, quien en marzo de 2021 exigió acabar de hacer oficial la práctica de la disciplina en las mujeres.
"Nuestras mujeres también deberían ir a los Juegos de Tokio. El boxeo femenino se practica en el mundo entero, no sé por qué en Cuba aún no se oficializa", dijo Sagarra a Cubadebate, que recordó que la Isla tiene representación femenina en todos los deportes, incluso en la halterofilia y la lucha femeninas desde 2006, pero "no ha logrado superar este último bastión del machismo deportivo", indicó la publicación.
"Es hora de acabar de aprobarlo. La mujer va a la guerra, hace guardia, maneja; de igual forma, tiene derecho a boxear", dijo Sagarra.
Sagarra negó en esa ocasión un rumor de que las trabas partirían de la reprobación del boxeo femenino por Vilma Espín, fallecida esposa de Raúl Castro y expresidenta de la oficialista Federación de Mujeres Cubanas (FMC). Según dijo el entrenador, la funcionaria, fallecida en 2007, "pensaba que las mujeres tenían los mismos derechos que los hombres. Nunca las limitaría. Siempre quiso lo mejor para ellas".
Sin embargo, es conocida la intromisión de Espín en temas como la representación de las mujeres cubanas en los videoclips, lo que provocó la censura por parte de la Televisión Cubana de algunos audiovisuales considerados sexistas durante la década pasada.
En 2018, la estatal Prensa Latina habló con el cubano Juan Fontanils, entrenador asistente del equipo de boxeadoras de Tailandia, quien manifestó que en Cuba no se tiene "la cultura para el boxeo femenino" y que quizás "la Federación cubana necesita más pruebas de que el boxeo no perjudica" a las mujeres.
Asimismo, subrayó que el principal obstáculo es que en la Isla existe "una mentalidad de que el boxeo no es para las mujeres".
Como antecedente conocido está el caso de la boxeadora cubana Namibia Flores, quien emigró a EEUU para buscar cumplir su sueño de desarrollarse en la disciplina.
"Me dicen que no puedo boxear porque la fallecida esposa del presidente rechazó la petición de que se aprobara el boxeo femenino, aparentemente porque era muy violento, un deporte muy abrasivo para las mujeres", dijo Flores a la BBC en 2015.
En el propio reporte, la BBC citó al jefe del equipo cubano de boxeo, Pedro Roque, quien dijo a un medio deportivo que las mujeres cubanas "están hechas para la belleza y no para llevar golpes en la cabeza".
No obstante, en 2021 Yarisel Ramírez fue la primera cubana que boxeó en unos Juegos Olímpicos, pero como representante del Team USA.
Al hacer el anuncio, el vicepresidente del INDER recordó que antes de 1959 en Cuba se practicó el boxeo femenino y "luego se prohibió". Mencionó los casos de Namibia Flores, extaekwondoca, y de Felicia Mesa, a quienes calificó como "predecesoras" de la disciplina, sin mencionar el destino que corrieron.
"Contamos con grandes especialistas en la Comisión Nacional de Boxeo que han estudiado la modalidad durante años. Estos antecedentes y el último campeonato mundial de Turquía nos dieron elementos referentes a riesgos, ventajas y desventajas", afirmó.
Asimismo, dijo que a las pugilistas se les exige certificado de feminidad y de embarazo.
"Se debe cambiar la concepción de la práctica. Hay gente que lo hace por atracción, por preparación física y no como actividad competitiva organizada. Hay que hacer la transición", comentó.
Otro argumento de Sainz fue que "sin querer comparar, hay deportes de combate oficiales en el país que son más traumáticos que el boxeo", aunque no los mencionó.
El INDER planea preparar un equipo para asistir a los Juegos Centroamericanos y del Caribe de San Salvador, en 2023, convocando un torneo el 16 y 17 de diciembre próximos, en el que participarán 42 pugilistas para elegir 12, de las que seis irán al torneo regional.
Las 12 elegidas serán a razón de dos por cada una de las divisiones olímpicas: 50, 54, 57, 60, 66 y 75 kilogramos. Para este grupo se va a priorizar a atletas de otros deportes de combate. Según el INDER, ya hay siete pugilistas entrenando con ese propósito. La institución no descarta presentar boxeadoras en el mundial de Uzbekistán, en mayo de 2023.
"Este plan acelerado para potenciar el medallero internacional requiere la capacitación de entrenadores", afirmó Puig de la Barca
Sobre el programa de entrenamiento, dijo que no hay diferencias en las reglas respecto a los hombres, aunque los medios de protección son otros. "Los tenemos garantizados. Ya llegaron los medios necesarios para las 12 mujeres, incluidos protectores de senos y genitales. Con las cabeceras y guantes ya contábamos", aseguró.
A partir de enero de 2023 estará abierta la convocatoria a las interesadas en la práctica del boxeo en todos los combinados deportivos del país, mientras que en las Escuelas de Iniciación Deportiva (EIDE) de cada provincia lo hará para el curso 2023-2024 en la categoría 15-16 años, anunciaron los funcionarios.
En 2023 se realizará el primer campeonato nacional de boxeo femenino, mientras que en los Juegos Escolares de 2024 habrá simultáneas con el evento masculino.
Sainz agregó que la decisión de oficializar la práctica se tomó "en correspondencia con los artículos 40, 41, 42, 43 y 76 de la Constitución de la República", el Programa para el Adelanto de las Mujeres y el recientemente aprobado Código de las Familias.
Curiosamente, esa misma política de Gobierno eludió la mayoría de los reclamos de la sociedad civil independiente en torno a la urgencia de legislar sobre los feminicidios y la violencia política contra las activistas de la Isla por parte de las autoridades, formas de violencia mucho más graves que las que implica la práctica deportiva ahora aprobada.
La oficialización del boxeo femenino en Cuba se produce precisamente mientras el INDER extiende la práctica del boxeo profesional de sus pugilistas hombres, algo criticado hasta la saciedad por Fidel Castro, pero que estaría reportando dividendos al Gobierno. No obstante, los directivos no mencionaron si también sus boxeadoras entrarían en los circuitos del deporte rentado en el futuro.
No hay quien le gane a una morena entrenada en las colas del pollo.
Lo mejor de esta noticia es que acaban de abrir una nueva puerta para que "las Yosimisleisys y Yosimisleidys" puedan salir y quedarse fuera de Cuba en algún que otro torneo.