Con la decepcionante actuación este sábado del triplista Lázaro Martínez, se hicieron humo las esperanzas de Cuba de alcanzar al menos una medalla en el Campeonato Mundial de Atletismo de Oregón 2022, lo que representa su peor actuación en la historia de estas lides desde su inicio en 1983.
Tres intentos fallidos firmó el antillano en la final de una prueba donde traía el mejor salto de la temporada y donde se había coronado como campeón mundial en pista cubierta este mismo año, currículo que lo colocaba como uno de los favoritos para subir al podio de premiaciones.
No podía ser de otra manera el epílogo de esta historia en un deporte que viene presentando grandes problemas desde que fue designada la campeona olímpica Yipsy Moreno como su comisionada nacional.
Durante su mandato se han producido varios escándalos, han aumentado las lesiones en competencias importantes, varios atletas han solicitado la baja de la selección nacional, y otros han corrido en estampida fuera de las fronteras a representar a otros países.
La gran mayoría de los 14 atletas de la mayor de las Antillas que asistieron a este evento, estuvieron por debajo de sus marcas personales, tal como sucedió en los pasados Juegos Olímpicos de Tokio 2020, donde a pesar de ser la tercera cita estival consecutiva donde no pudieron alcanzar una medalla de oro, lograron al menos una de plata y dos de bronce.
La discóbola Yaimé Pérez, campeona mundial en Doha 2019, fue una de las pocas figuras que pudo superar sus marcas de la temporada al enviar el implemento más allá de los 65 metros, pero esto ocurrió en la clasificatoria, y en la final quedó relegada a la séptima plaza.
El saltador largo y bronce olímpico Maykel Massó era otra de las esperanzas cubanas en esta reunión atlética, pero luego de lograr su boleto a la final "in extremis", concluyó en una cuarta posición que aunque digna, está por debajo de sus posibilidades reales.
Así ocurrió con Rosy Mary Almanza en los 800 metros, una corredora que en sus cinco campeonatos mundiales y en sus tres olimpiadas jamás ha podido mejorar sus tiempos del año, y con Roxana Gómez en la vuelta al óvalo, eliminada en semifinales con un crono por encima de lo logrado este año, en un heat donde falló la estrategia de carrera.
Solo la jovencita de 20 años Leyanis Pérez en el triple salto con un sorpresivo cuarto lugar, y el saltador de altura Luis Zayas con su sexto puesto, dejaron un buen sabor en los espectadores, aunque este último no pudo llegar tampoco a su mejor marca de la temporada.
En la pasada edición mundialista, Cuba se había ubicado en la posición 13 empatada con Baréin y Suecia al ganar una medalla de cada color y sumar treinta puntos, el doble de los que alcanzaron en esta oportunidad.
Antes de esta debacle, la peor actuación era la del Mundial de Londres 2017, cuando solo lograron un metal bronceado, al cuello de la pertiguista Yarisley Silva.
Desastre total. Cuando Rosy Mary terminó la carrera de los 800 m, los jueces ya se habían marchado.
Si hubiesen soltado un pollo como premio ya veriamos si hubiesemos conseguido el oro.
No importa en el proximo ganara Yusuan en el lanzamiento de la placenta.
Sin luuu no hay medalla ...