dejé que me creciera la barba
teniendo en cuenta que:
el presupuesto del estado, realizaría
una bonificación del cincuenta por ciento
a los precios vigentes de los materiales.
dejé que me creciera la panza
al saber que estos materiales
se iban a vender a las familias con destrucción
parcial o total de sus viviendas.
dejé que me crecieran
porque las familias solo pagarían,
la mitad del precio de esos productos.
hoy,
a cinco años después,
presento un estilo
lapidario:
la barba, la panza y los cojones
me han crecido
gracias a una decisión
del gobierno revolucionario.
Oscar Cruz nació en Santiago de Cuba, en 1979. Sus últimos libros de poemas publicados son Las posesiones (Letras Cubanas, La Habana, 2010), Balada del buen muñeco (SurEditores, Madrid, 2012) y La Maestranza (Unión, La Habana, 2013). Ha traducido a Georges Bataille: El pequeño (Editorial Santiago, Santiago de Cuba, 2010). Coedita la revista literaria La Noria.