Back to top
Música

¿Qué es la Academia de Grabación que recibe a otro cubano?

DJ Jigüe celebraba hace unos días, desde Centro Habana, su inclusión en la academia que otorga los Latin Grammy.

La Habana
DJ Jigüe.
DJ Jigüe. Magazine AMPM

"Hoy amanecí como miembro de la Academia de los Latin Grammy. Este viaje es una locura y los sueños se cumplen si luchas por ellos", se ufanaba en Instagram DJ Jigüe, desde Centro Habana, este septiembre. Unos años atrás, la rapera Telmary exhibía también su título de miembro votante de la Academia, esta vez en la cubana, en el programa de Edith Massola. 

¿Es tan difícil entrar en la Academia?

La Academia de las Artes y Ciencias de la Grabación, o simplemente Academia de Grabación, agrupa profesionales de la industria de la música y su principal objetivo es el otorgamiento de los famosos Premios Grammys de Norteamérica e Iberoamérica. Desde hace 25 años, la rama iberoamericana se separó de la anglófona y entonces surgieron los conocidos Grammys Latinos, para obras en español o portugués.

Actualmente, según las estadísticas de 2023, la Academia cuenta con 14.000 miembros (11.000 votantes y  3.000 profesionales) y sus ejecutivos están enfrascados en favorecer el equilibrio entre las identidades culturales de los integrantes. En 2023, se felicitaban por haber recibido unos 2.400 nuevos miembros, de los cuales la mitad eran negros y 32% mujeres.

Desde que se implementó un nuevo modelo de membresía "impulsado por la comunidad y revisado por pares" se ha favorecido la diversidad, según las estadísticas. "Comunidad", de hecho, es una palabra que le viene mejor a la "Academia", que carga una connotación elitista que esta sociedad no tiene. 

La idea es reunir a las personas vinculadas activamente al mercado de la música, ya sea en calidad de creadores o ejecutivos. Para ello, hay dos tipos de membresía que los dividen en "miembros votantes" o "miembros asociados", según los roles, creativos o no, que cumplan en la industria -. 

Los requisitos para pertenecer a ambas categorías no son, en verdad, difíciles. El aspirante a "miembro votante" (personal creativo o técnicos involucrados en la grabación) debe presentar de seis a 12 créditos (obras) en las que haya participado en la categoría a la que aspira (arreglista, intérprete, etc.). El contenido hispano o portugués de esas obras debe ser mayor al 51%, y las mismas deben haber estado  a la venta en alguna plataforma digital o en físico en los últimos cinco años. Desde luego, hay que presentar una documentación creíble de esta actividad aducida. 

Ambas membresías cuestan 85 dólares para EEUU y Canadá y 50 para Iberoamérica. Una vez revisada toda la documentación y aceptado el candidato, este tiene el derecho, entre otras cosas, de inscribir una obra para que sea considerada en el concurso. Todo el proceso ocurre online. En la primera ronda, un comité de selección elige las obras sobre las que los miembros votantes darán su veredicto. De ahí salen los nominados. Luego se procede a una segunda ronda de votación para elegir al ganador en cada categoría. 

Las ventajas de pertenecer a la Academia son sobre todo curriculares y de networking. También hay ventajas comerciales más indirectas. Por eso en algunos países, como Argentina, se estimula a los creadores a que se inscriban y favorezcan a los nacionales. En estos momentos, la azotea de DJ Jigüe en Centro Habana, debe tener un sofá donde esperarían por su oportunidad los aspirantes al Grammy.  

Archivado en
Más información

Sin comentarios

Necesita crear una cuenta de usuario o iniciar sesión para comentar.