Cándido Fabré, 'dolido' por el rechazo de un proyecto suyo que 'promueve la música popular cubana'

Al músico oficialista Cándido Fabré no le han servido mucho las declaraciones de amor incondicional al régimen cubano y los ataques a críticos. Esta semana se quejó de que la estatal Empresa de Grabaciones y Ediciones Musicales (EGREM) desechó un proyecto suyo para promover la música popular cubana.

Fabré expuso sus cuestionamientos en Facebook, a modo de improvisación, como suele hacer en sus interpretaciones musicales.

"Escuchando detenidamente una gran propuesta musical que puse hace más de un año en manos de la EGREM, lamento no hayan sabido valorar mis buenas intenciones para con Cuba, para que nuestra música popular sea promovida desde aquí", escribió el cantante.

En palabras del cantante, no busca "un premio en Cubadisco", sino que trata de "mostrar verdadera música de pueblo para el pueblo". 

"Duele que un jurado con poca visión oculte lo que mueve a esta Isla. Tengo como pocos el mayor y mejor premio para quien se entrega al público", añadió. 

Fabré dijo que es "patrimonio popular, orgullo de los amantes de la alegría, los carnavales, las fiestas" y afirmó que seguirá "compitiendo contra la maldad, haciendo lo que gusta, música para bailar, reír, llorar, amar, luchar, reflexionar, triunfar".

Cándido Fabré salió en defensa del régimen cubano a finales de febrero de 2021 tras el impacto de "Patria y Vida". "La Revolución no tiene culpa de nada. La Revolución a lo mejor está atravesando por algunos momentos difíciles, pero los hombres son los culpables, los que no han sabido valorar que la Revolución es una de las grandes obras de la humanidad", dijo entonces. 

Un mes después estrenó un tema en respuesta a la canción contestataria. "Yo soy de Patria o Muerte" se tituló el nuevo intento del régimen de La Habana para mostrar el apoyo de sus artistas afines. 

"Yo soy de Patria o Muerte. Yo soy un guerrero que tiren pacá. Métele coco. Métele mente. Esa guerra no sirve ni aquí ni allá", dice el estribillo de la canción de más de cinco minutos.

Más recientemente, en un concierto en un área pública del reparto Montercarlo de la ciudad de Camagüey, Fabré fue grabado mientras arengaba al público a repetir una rima que decía: "¡Otaola, qué pinga e'!", contra el influencer que se ha convertido en la obsesión del régimen de la Isla, y que decenas de personas repitieron.

El excantante de la popular Original de Manzanillo, una figura oficialista que ha reconocido su admiración por Fidel Castro, dijo a los presentes que "quieren tumbar a la revolución" que " aquí no se rinde nadie, cojones".

Fabré se sumó así a la campaña de propaganda gubernamental que buscó exaltar al equipo de béisbol al Clásico Mundial recién concluido en Miami y culpabilizar al exilio que se manifestó en el estadio de esa ciudad durante el partido entre esa novena y la de EEUU.