El escritor y realizador audiovisual cubano Juan "Pin" Vilar, quien trabajó durante años vinculado a la trova cubana y fue el realizador más cercano al cantautor Pablo Milanés, sobre cuya figura llegó a realizar un documental, califica la oportunidad de trabajar con el músico recién fallecido en Madrid como "una de las experiencias más hermosas que he tenido en la vida".
"Ello, no solo por la figura que es, sino porque, además de ser esa figura, te daba toda la libertad para que fueras responsable de lo que ponías en pantalla. Un hombre que tenía muy claro lo que quería y que era muy flexible ante la crítica", dijo a DIARIO DE CUBA horas después de conocerse el deceso de Milanés.
"Una anécdota: en una última gira que hizo por Cuba fui invitado para escribir un texto para el diario español El Mundo, para el blog de Wendy Guerra. Así que lo acompañé por la parte oriental del país. Él acababa de declarar que no creía en nadie que tuviera más de 70 años, que fue una de sus primeras opiniones que causaron consternación en el poder", recuerda.
"Cuando estábamos en Holguín se le acercó un señor que empieza a decirle que parece mentira que tú, que cómo dices eso... Los músicos se fueron a levantar para encararlo, porque además Pablo acababa de dar su concierto. Pero él se vira y les dice: 'Él está dando su opinión, no me ha ofendido. Lo que quiero es que todos tengamos la oportunidad de decir las cosas de este modo'".
"Después del concierto, el banquete lo daba él. Porque el protocolo del Partido Comunista local siempre hace creer que los importantes son los dirigentes, y en provincia un secretario del Partido es más importante que Alicia Alonso. Pero Pablo en esos lugares recibía a los funcionarios con una cortesía y una amabilidad que iba desmontando esa estructura fría. Otros reaccionan distinto: o se pliegan a ese protocolo o aprovechan para atacarlo. Pablo sencillamente los desmontaba con una sonrisa, después de haber dicho días antes lo que dijo".
"Yo le preguntaba por qué teníamos que hacer las fiestas después de los conciertos. Él las hacía para romper el protocolo oficial, y mandaba a entrar a la gente de la calle y asaban un puerco. Le digo un día: 'Tú tienes 70 años, tienes que descansar'. Sabes, uno siempre pensando en la conversación inteligente, profunda, en aprovechar esos momentos. Y me dice: 'Es que así me entero cómo vive la gente. Los que tienen algo que contar son ellos'. Por eso tenía moral para decir lo que pensaba, para criticar, porque aunque no vivía en la cotidianidad de la gente, dejó un espacio para comprenderla".
En otra ocasión, Vilar asistió a una discusión entre Milanés y el entonces ministro de Cultura Armando Hart sobre el Festival de Varadero.
"Pablo estaba haciendo una gira que se llamó Amo esta Isla, y cada dos minutos lo venía a interrumpir el chofer de la guagua de los músicos de la gira para presentarle a personas de su familia. Yo quisiera que vieras la sonrisa y la suavidad con la que Pablo saludaba a esas personas, y además les decía: 'Déjame terminar de hablar con Armando'".
En otra situación de la que Vilar fue testigo, estuvo con Milanés en el Floridita, en un encuentro con Joan Manuel Serrat y Fito Páez, de paso por La Habana.
"El trío del lugar estaba tratando de empatizar, de preguntarle a Serrat si quería alguna canción en particular. Y les dice Joan Manuel:'¿No ves que estoy hablando?' La reacción de Pablo fue: 'Ellos te están haciendo el favor de cantar una canción tuya'. Pero con una suavidad de amigo".
"Él se agenció ser una persona extremadamente del detalle de lo humano. Por eso siempre estuvo del lado de lo sensible y de lo humano. Cuando creyó en la Revolución Cubana, le dio toda su alma. Y yo creo que él siguió creyendo en ella, pero fue el primero en darse cuenta del desastre, lo que se nota en las canciones que hizo en su época de desengaño", afirma.
"Era un hombre todo pasión, y con la pasión hacía todo: componer canciones de amor bellas, canciones políticas bellas, desencantarse del rumbo de la Revolución Cubana... 'Días de gloria' es una de las canciones más desgarradoras que puedes oír. Pero eso no cambió en Pablo el ser que nació en Bayamo".
En 2017, el documental que Vilar dedicó a Pablo Milanés fue vetado por el Festival Internacional de Cine Latinoamericano de La Habana. En el filme, el trovador cubano habla de su paso por las Unidades Militares de Ayuda a la Producción (UMAP), uno de los episodios más oscuros de la historia de la represión en Cuba.
"Hay que ver la elegancia con la que Pablo habla de su paso por las UMAP, que explica su dolor. Un hombre al que la traición de un amigo lo puede desgarrar de un modo comparable con la traición de un amor. Pero ante eso era implacable, porque era incapaz de traicionar", subraya.
Y recuerda una de sus últimas colaboraciones con Pablo Milanés: "En medio de la pandemia, un hombre enfermo, un hombre que empezó a morirse hace mucho tiempo, le dije que quería poner su voz en la banda sonora del documental sobre Fito Páez. Y ese hombre se grabó en su casa y aceptó que le dijéramos 'repite esto'; con sus crisis de dolor, en medio del encierro, sacó tiempo para eso. Por ello el documental empieza con su voz cantando".
Cuanto nos falta para llegar a la reconciliacion del pueblo, no con la dictadura sino con los otros cubanos!!
¿Donde empieza "estar limpio?....¿Los que se fueron en el 59 porque habian apoyado la dictadura de Batista?¿Los que aplaudieron los primeros fusilamientos hasta que quitaron a Urrutia como presidente?¿Los que se fueron en el 60 o el 61 despues de haber apoyado a Castro en la Sierra ,en las primeras intervenciones y cuando el juicio a Hubert Matos?¿Los que combatieron en Giron, no Bahia de Cochinos, derribando aviones de la Brigada como hicieron Prendes y Del Pino? ¿Los periodistas de Hoy, Revolución, Prensa Latina, Carlos Franqui, Pardo Llada , Perez Roura y otros muchos?¿ Los escritores que alabaron el régimen en los primeros años y después lo criticaron, como Padilla, Garcia Infante y otros muchos?¿El compositor, ya saben quién, del Himno al Festival Mundial de la Juventud?¿O el de la Marcha del Pueblo cuando la Embajada del Perú y el éxodo del Mariel? ¿Sigo?
Luis: Lamento ver su sesgo en la limpieza. No todos los que se fueron en el 59 apoyaban la dictadura de Batista, muchos se fueron porque lucharon contra Batista y se sintieron traicionados. Muchos se fueron para no aplaudir los primeros fusilamientos y lamentaron que quitaran a Urrutia de presidente. Muchos se fueron en el 60 o el 61 después de haber apoyado a Castro en la Sierra (¡de muchas maneras distintas!) y cuando el juicio a Hubert Matos se sintieron traicionados, Muchos combatieron en Bahia de Cochinos, derribando aviones de la Brigada como hicieron Prendes y Del Pino para después ser traicionados por Kernnedy y su gobierno. Los periodistas de Hoy, Revolución, Prensa Latina, Carlos Franqui, Pardo Llada , Perez Roura y otros muchos que tratando de cumplir con su misión social fueron amenazados y obligados a marcharse. Todos están limpios, porque se dieron cuenta de su error y cambiaron el rumbo. Rectificar es de sabios.
Ojalá existiera una divinidad suprema, sea Dios, Jehová, Budha o Mahoma, una, que pudiera decidir quién merece el paraíso, el cielo, el infierno o el nirvana. Para que Pablo Milanés (o cualquier otro cubano que vivió entre el 59 y nuestros días) se libere de los efectos del karma, de haber enfrentado o apoyado el régimen político cubano. Porque lo que es nosotros, pobres mortales, nunca nos vamos a poner de acuerdo sobre cuándo uno de nosotros (haya estado a favor o en contra ) no merece redención, cuándo se arrepiente, si ese arrepentimiento es genuino, cuándo se distancia, o a diferencia de la naturaleza humana permanece inamovible. A ver si, como dicen los creyentes, el alma de cada uno de los cubanos llega a descansar en paz al menos después de la muerte.
Es terrible. En 1980, a los 16 años, acepté para mi mismo que iba a ser gay para toda mi vida porque me enamoré — como media beca — de otro muchacho. Me dije que nunca iba a tener ninguna relación con alguien de mi sexo pero si me di la licencia de amarlo todo lo que me diera la gana. Fuimos muy buenos amigos. Bueno, yo de él porque él no podía saber quien yo era.
Pues bien, ese mismo año, después de mi epifanía, fui a todas las marchas del “pueblo combatiente” a gritar, entre otras lindezas “que se vayan los homosexuales”. No, no, no; no era hipocresía, lo hacía con sinceridad.
Mi responsabilidad, claro. Pero entendamos que la capacidad para la maldad y el amor está en todos nosotros. Entender esto me ha ayudado luego en mi vida a ser más compasivo con las debilidades de los demás y también a cuestionarme frecuentemente si lo que estoy pensando hacer es una hijo-de-putada.
La historia del comunismo, lo que hizo con la gente necesita ser estudiada por cada generación.
Es terrible. En 1980, a los 16 años, acepté para mi mismo que iba a ser gay para toda mi vida porque me enamoré — como media beca — de otro muchacho. Me dije que nunca iba a tener ninguna relación con alguien de mi sexo pero si me di la licencia de amarlo todo lo que me diera la gana. Fuimos muy buenos amigos. Bueno, yo de él porque él no podía saber quien yo era.
Pues bien, ese mismo año, después de mi epifanía, fui a todas las marchas del “pueblo combatiente” a gritar, entre otras lindezas “que se vayan los homosexuales”. No, no, no; no era hipocresía, lo hacía con sinceridad.
Mi responsabilidad, claro. Pero entendamos que la capacidad para la maldad y el amor está en todos nosotros. Entender esto me ha ayudado luego en mi vida a ser más compasivo con las debilidades de los demás y también a cuestionarme frecuentemente si lo que estoy pensando hacer es una hijo-de-putada.
La historia del comunismo, lo que hizo con la gente necesita ser estudiada por cada generación.
Y siguen las viudas de Pablo j.... en la red,no se acuerdan acaso de la entrevista donde admiraba los testículo del " Cenizas".Dijo algo en público en la Ciudad Deportiva en favor de los detenidos o el pueblo.Al menos Pedro Luis Ferrer se atrevía a enarbolar canciones "precensuradas" en interpretaciones públicas suspendidas luego.No estoy negando su talento,sino mostrando su oportunismo.Rompio por "arribita" cuando le intervinieron la PM fundación ya semidefalcada por la mafia afrocubana que se adueñó de ella,pues el racismo a la inversa funcionaba en esa institución de " promoción de talentos".Sólo vean sus fotos de la "luna de miel" con el innombrable junto a su examigo Silvio.En fin ,fue un instrumento para crear ideología en las masas y a pesar de haber sufrido en la UMAP besó y lustró la bota que lo pateó.En se fue de este mundo en paz en un lujoso hospital, no en un antro como sus humildes compatriotas que no pueden pagar avión u obtener visado español...
Gracias Carlos Loveira: demasiados plañideros por la muerte de uno mas de los juglares de la dictadura, otro embajador cultural del mal."Sera mejor hundirnos en el mar" decía...
Después tuvo "el aquello" de decir más pero en sentido contrario, aunque ciertamente quedó debiéndonos esa canción. Finalmente se quedó "con todas esas cosas, pequeñas, silenciosas" pero en Madrid. ¿Traicionó Pablo la [supuesta] gloria que según él se había vivido? ...o reconoció su posición equivocada y supo pronunciarlo en alta voz antes de partir?
Exacto, pareciera como si solo lo inspirara la dictadura, no la causa de la libertad.
Pues yo no lo veo asi.Discrepar: esa es la gran ventaja de la democracia que no existe en Cuba.
¿Fue el primero en darse cuenta del desastre? ¿Qué? Supongo que Reyes no quiso decir lo que parece que dijo, lo cual suena bastante peor que absurdo, pero debe medir mejor sus palabras.
No, no fue el primero. Ni sera el ultimo.