Alphabet, la compañía madre de la empresa tecnológica Google, dio a conocer la expansión de su servicio Google Pay, que a través de la asociación con bancos y minoristas, podrá ofrecer a los consumidores nuevas cuentas bancarias, tarjetas y descuentos.
La actualización del sistema de pago, que estará disponible inicialmente en Estados Unidos, representa la incursión más profunda del gigante tecnológico en el sistema financiero, justo cuando la pandemia del nuevo coronavirus acelera la transición del dinero en efectivo al digital.
No obstante, en vez de desafiar directamente a la industria, Google Pay ayudará a los usuarios a abrir cuentas en bancos asociados.
"Estamos trabajando muy de cerca con la industria financiera", aseguró Caesar Sengupta, vicepresidente del negocio de pagos de Google, en declaraciones al servicio noticioso de Bloomberg.
"Queremos asegurarnos de que estamos cumpliendo con todos los estándares que los reguladores y otros han establecido", agregó.
El anuncio es el último intento de un gigante de Silicon Valley de incursionar en el mundo de las transacciones financieras y los valiosos datos generados por el comercio diario. Pero también subraya la voluntad de los actores financieros arraigados de asociarse en nuevas empresas para evitar quedar excluidos de la evolución tecnológica.
Desde su debut en 2015, Google Pay ha acumulado 150 millones de usuarios en 30 países. Las personas usan principalmente el servicio para enviar dinero a amigos o para realizar compras en línea. La pregunta es si puede convertirse en su principal medio de comercio.
Hasta ahora, esa meta ha resultado difícil de alcanzar para rivales como Apple, que implementó un sistema de pagos y una tarjeta de crédito, y Facebook., que propuso una moneda digital.
Los usuarios de Google Pay podrán utilizar la aplicación para solicitar cuentas corrientes y de ahorro Plex de 11 bancos distintos. Los consumidores también pueden vincular muchas de sus cuentas bancarias y tarjetas de crédito existentes. Cuando salgan a comprar o cenar, gracias al servicio podrán buscar descuentos en tiendas y restaurantes.
Los bancos han temido durante mucho tiempo que las gigantes tecnológicas de Estados Unidos busquen emular los sistemas de pago digital en Asia, donde las aplicaciones han comenzado a suplantar el efectivo y las tarjetas de crédito. Cuando la intención de Google de ofrecer algún tipo de cuenta corriente con Citigroup surgió hace más de un año, ello generó ruido en la industria financiera. Ahora los bancos pueden dar un suspiro de alivio.
"Esta colaboración nos brinda una plataforma para impulsar una escala significativa en nuestro banco minorista", dijo Jane Fraser, jefa de banca de consumo de Citigroup, en un comunicado.
Con Google, dijo, "podemos profundizar nuestras relaciones existentes y servir a una nueva generación de clientes exponencialmente más grande".
"No es realmente un mercado nuevo para nosotros", dice Sengupta. "Creemos que si podemos ayudar a los usuarios a ahorrar un poco de dinero u obtener un poco de control sobre su vida financiera, esto agregará valor".