La escuela del Royal Ballet de Londres nombró al bailarín, coreógrafo y director Carlos Acosta como nuevo miembro de su Junta de Directores.
Christopher Rodrigues, presidente de la Royal Ballet School, del Reino Unido, dio la bienvenida a Acosta con un mensaje en el que destacó la valía del bailarín.
"Estoy encantado de dar la bienvenida a Carlos Acosta a la Junta de Directores de la Royal Ballet School, y sé que traerá a la escuela una pasión por el baile y una visión clara de su futuro. Su perspectiva como nuevo director del Birmingham Royal Ballet será invaluable para ayudar a la Escuela a mantener su relación crucial con la compañía".
Christopher Powney, director artístico de la Royal Ballet School, también manifestó estar "encantado de que Carlos Acosta traiga su energía y compromiso para bailar a la Royal Ballet School".
"Su nombramiento es una celebración de los lazos de larga data entre la Escuela y el Ballet Real de Birmingham, una compañía en la que muchos de nuestros talentosos estudiantes han establecido su hogar. Espero con interés trabajar con Carlos como director de una de nuestras grandes compañías y también recibir su apoyo como gobernador. Seguirá siendo una inspiración para nuestros jóvenes bailarines y desempeñará un papel clave para ayudarnos a dirigir con éxito el futuro de la Escuela", consideró.
Acosta espera aportar "una perspectiva más amplia a la dirección y a los planes futuros de la escuela".
"La presencia e influencia del Birmingham Royal Ballet en la Junta brinda una oportunidad de oro para celebrar nuestra relación histórica con The Royal Ballet School", evaluó el cubano.
Nacido en 1973, Acosta creció en uno de los barrios más pobres de La Habana y, ante la insistencia de su padre, fue enviado a entrenar en la Escuela Nacional de Ballet de Cuba. En 1990 ganó la codiciada Medalla de Oro en el Prix De Lausanne, donde captó la atención del mundo internacional de la danza y catapultó su carrera.
Desde entonces, Acosta ha bailado profesionalmente con algunas de las compañías más prestigiosas del mundo, incluyendo el English National Ballet, el Ballet Nacional de Cuba, el American Ballet Theatre y el Houston Ballet.
Estableció su hogar en The Royal Ballet en 1998, donde estuvo hasta 2015. Ha bailado papeles principales en la mayoría de los principales ballets clásicos, y ha actuado como artista invitado en prácticamente todos los rincones del mundo.
En los National Dance Awards 2015, Carlos Acosta recibió el Premio De Valois por su trayectoria.
Además de su trabajo con The Royal Ballet, también coreografió su espectáculo semiautobiográfico, Tocororo, que se estrenó en La Habana en 2003 y fue nominado para un Premio Olivier. Continuó desarrollando sus propios espectáculos muy populares y galardonados en Londres y en toda Europa, incluido el repertorio clásico y contemporáneo.
Acosta se retiró del escenario The Royal Ballet en 2015 con su propia versión de Carmen.
El bailarín continúa realizando danza contemporánea y formó su propia compañía, Acosta Danza, con gran éxito de crítica. Desde la Fundación Internacional que lleva su nombre brinda oportunidades a jóvenes bailarines y coreógrafos cuyos talentos de otra manera no se verían ni se escucharían.
La Academia Acosta Danza abrió sus puertas en La Habana en septiembre de 2017 a su primer ingreso de aspirantes y talentosos jóvenes estudiantes cubanos.
En 2018, la película Yuli, que cuenta la historia de sus humildes comienzos y su carrera en el ballet, atrajo la atención pública y crítica. Se convirtió en director del Ballet Real de Birmingham en enero de este año.