Los vecinos de Prípiat, la ciudad nuclear próxima a la planta nuclear de Chernóbil, en Ucrania, han plantado y decorado un árbol navideño por vez primera desde 1986 en esa población abandonada tras la explosión del reactor de la central atómica.
Algunos juguetes y viejas fotografías de una lejana infancia decoran solitarios el árbol de Navidad, colocado por antiguos habitantes de la ciudad, que dista solo tres kilómetros de la central nuclear de Chernóbil.
Los pobladores han vuelto a su ciudad tras la mayor catástrofe en una instalación nuclear de la historia. El árbol es el primero que luce en el sitio desde 1986, informó la prensa local, y fue plantado frente al Palacio de Cultura Energuetik, precisó la cadena ZIK.
La ciudad está dentro del círculo central de la zona de exclusión de Chernóbil, que marca el área de mayor actividad radioactiva.
Prípiat fue fundada en 1970 como un "atomogrado", una ciudad para albergar a los ingenieros, físicos y técnicos que debían construir la planta atómica de Chernóbil. Con cerca de 50.000 habitantes, fue evacuada a partir del 27 de abril de 1986, al día siguiente del accidente.
Aunque Prípiat es una urbe fantasma, últimamente frecuentada por turistas y curiosos que se arriesgan a la zona, la ciudad que dio nombre a la planta, Chernóbil, ubicada a 12 kilómetros de la central, ya es apta para la vida humana, según las autoridades.
De acuerdo con varios cálculos oficiales, la explosión ocurrida en la madrugada del 26 de abril de 1986 esparció hasta 200 toneladas de material con una radiactividad de 50 millones de curios, equivalente a 500 bombas atómicas como la lanzada en Hiroshima en 1945.
La radiación continúa afectando a miles de habitantes de Bielorrusia, Ucrania y Rusia, país donde se halla el 70% de los casi 200.000 kilómetros cuadrados de terrenos contaminados tras la explosión del reactor.