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Cine

INSTAR inaugura un ciclo de homenaje a los cineastas independientes cubanos

Artistas descartan que las nuevas regulaciones a la creación cinematográfica en Cuba sea una Ley de Cine.

La Habana

El proyecto cívico Instituto de Artivismo Hanna Arendt (INSTAR) desea rescatar y documentar el cine independiente cubano. Es por ello que durante los días 28, 29 y 30 de junio inauguró un primer ciclo de exhibición y debate con uno de los realizadores independientes más representativos de la Cuba actual: Miguel Coyula.

En la muestra se exhibieron sus tres filmes: Cucarachas rojas (2003), Memorias del Desarrollo (2010) y se estrenó Corazón Beta, el primer capítulo de la serie Corazón Azul, que aún continúa editándose. Esta primera versión de la producción le ha tomado a Coyula siete años de trabajo.

Al término de la proyección de cada filme los espectadores tuvieron la posibilidad de hacerle preguntas al director sobre la realización del audiovisual y este narró sus experiencias de cómo es hacer cine independiente tanto en Cuba como fuera de ella. En el caso de Coyula, su opera prima fue filmada íntegramente en Nueva York.

En varias de sus intervenciones el realizador explicó que el cine independiente intenta rescatar el cine como manifestación artística y se aleja del fenómeno como industria comercial. De ahí que su presupuesto siempre sea bajo, debido a lo difícil de encontrar un patrocinador que se ajuste a lo que el creador le interesa expresar.

Otra de las características es que filma todas sus locaciones sin autorización, por lo costoso y burocrático de esos permisos.

El primer filme de Coyula fue celebrado por la revista Variety como "un triunfo de la tecnología en manos de un visionario" y otras revistas estadounidenses especializadas como Cinema Without Borders y Senses of Cinema han elogiado la obra del cubano, caracterizada por la mezcla de géneros cinematográficos y en la que predomina la experimentación.

Ninguna de las obras de Coyula ha tenido estreno oficial en la Isla. Salvo la exhibición de sus dos filmes iniciales, el primero en la Muestra Joven ICAIC y el segundo en el Festival de Cine Latinoamericano, fuera de competencia, ambos en una sola ocasión, la obra de este cineasta ha sido silenciada por los circuitos oficiales, todos bajo control estatal.

Su documental Nadie, sobre la vida del poeta Rafael Alcides, fue impedido de ser exhibido por la Seguridad del Estado. El material se presentaría en la galería independiente El Círculo. En varios festivales internacionales los filmes de Coyula han sido retirados por presiones hacia los organizadores de esos eventos.

En el ciclo de INSTAR no faltó el debate sobre las nuevas regulaciones aprobadas para la producción cinematográfica en Cuba. Al respecto la coorganizadora del ciclo, la actriz Lynn Cruz, consideró que el Decreto Ley 373 "no es una Ley de Cine".

"En verdad lo que pretende es abolir el cine independiente al absorber a todas las productoras ofreciéndoles un carnet del creador (…) Sigue sin reconocerse tanto a los cineastas independientes como a los realizadores del exilio como Fausto Canel, Fernando Villaverde y Eduardo Manet", criticó la artista.

INSTAR se propone además crear una bibliomedia donde se guarden y se puedan consultar las creaciones de los cineastas independientes, la mayoría dispersas y ausentes del catálogo del ICAIC.

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