El avión de la empresa rusa Nordwind Airlines que operaba el domingo 23 de febrero el vuelo N4-551 de Moscú a cayo Coco, en Cuba, se vio obligado a retornar a Rusia mientras volaba sobre el mar de Noruega y a realizar un aterrizaje de emergencia, luego de que uno de sus motores se averiara.
De acuerdo con una declaración de la aerolínea, citada por el sitio oficial de la Asociación de Turoperadores de Rusia, "debido a la sospecha de un mal funcionamiento técnico, la tripulación decidió regresar al aeródromo alternativo de Pulkovo (San Petersburgo) para garantizar la seguridad del vuelo".
Según reportaron numerosos medios rusos, sobre las 2:38 PM, hora de Moscú, el avión aterrizó de manera segura y los pasajeros fueron trasladados a la terminal del aeropuerto, donde debieron esperar por la preparación de otro avión para recomenzar el trayecto.
Los pasajeros explicaron que uno de los motores del avión Boeing 777-200, con número de matrícula RA-73341 y que está operativo desde 2004, falló en pleno vuelo y el aparato se mantuvo en el aire durante más de cinco horas con el restante.
El avión de Nordwind había despegado del aeropuerto de Sheremetyevo, en Moscú, a las 7:54 AM, aunque según el horario debía partir a las 7:15 AM. El motivo del retraso habría sido la sospecha de un desperfecto técnico. Pese a ello, el aparato despegó.
En total, 434 pasajeros quedaron varados en San Petersburgo, 25 de ellos niños. Testigos presenciales informaron que durante el despegue de Moscú escucharon un sonido sospechosamente fuerte en una turbina.
Nordwind Airlines anunció que llevaría a los pasajeros a cayo Coco en un avión de reserva, en un vuelo programado para las 9:45 PM del domingo. Sin embargo, no hay información sobre este vuelo en el sitio web del aeropuerto de Pulkovo.
Hace poco más de un mes, 328 turistas de Rusia quedaron varados por más de 28 horas en Cuba luego de que un vuelo de La Habana a Moscú de la aerolínea Rossiya se viera impedido de despegar debido a "razones técnicas". Posteriormente, el personal del aeropuerto abrió la turbina del aparato y trabajó en esa zona durante aproximadamente una hora.
RIA Novosti citó a la aerolínea, que habría comunicado preliminarmente que el motivo del retraso era una avería de la turbina del avión Boeing 777-31H.
La crisis de los vuelos de larga distancia de las aerolíneas de Rusia se ha agravado en el último año. La escasez de aviones está frenando la demanda de viajes, mientras se reportan frecuentes desperfectos en los aparatos en servicio. Lo anterior, pese a que la mayor parte del espacio aéreo europeo está cerrado a las aerolíneas rusas, por lo que casi todo el tráfico se ha trasladado a las rutas nacionales, según datos del organismo nacional de control de la aviación civil, Rosaviatsia.
El 80% de la flota aérea de Rusia es de fabricación extranjera, con Airbus y Boeing representando dos tercios de los 865 aviones del país. Tras la imposición de las sanciones occidentales a Moscú por la invasión de Ucrania, en 2022, la adquisición de repuestos se interrumpió, lo que paralizó un número cada vez mayor de aparatos.
En el año anterior a la invasión de Ucrania, Rusia añadió 54 nuevos aviones comerciales a su flota: 27 de Airbus, tres de Boeing y 24 Sukhoi Superjets, estos últimos de fabricación rusa, todos para empresas como la aerolínea bandera Aeroflot, Red Wings, Rossiya y Ural.
En los casi cuatro años transcurridos desde entonces, ha añadido solo 11 nuevos aviones, todos ellos Superjets de fabricación nacional. Mientras, la producción del nuevo avión comercial ruso MS-21 se pospuso de 2024 a 2025-2026.
Eñ comunismo es destructor. Ya Aeroflot no tiene aviones disponibles.
Culpa de Otaola y Posada Carriles