En medio del sostenido descalabro del turismo en Cuba, el turoperador español Soltour anunció este lunes un refuerzo en su conexión con el Caribe, con una nueva operativa que conectará Madrid con La Habana en cuatro frecuencias semanales, informó la revista Forbes.
La compañía, que ofrece paquetes turísticos en La Habana, Varadero y la cayería norte, pretende incentivar a los viajeros con descuentos especiales 'de última hora' y con vuelos disponibles fuera de la habitual temporada alta, sobre todo durante el otoño.
"El objetivo es facilitar a los viajeros la posibilidad de descubrir destinos únicos en cualquier época del año, sin limitaciones de temporada alta. Con esta operativa ampliada y las nuevas promociones especiales, queremos contribuir a un turismo más equilibrado, que beneficie tanto a los viajeros como a la comunidad local y los propios destinos", afirmó Ricardo Cobo, director comercial de Soltour.
En opinión de medios especializados, con este movimiento "Soltour apuesta por la desestacionalización, ofreciendo distintas alternativas que impulsan la diversificación del turismo y promueven un flujo continuo de visitantes en el Caribe". Sin embargo, al ofrecer también paquetes turísticos en Cancún y la Rivera Maya, y teniendo en cuenta el descrecimiento del destino Cuba a la par que crecen los visitantes para los competidores, el movimiento de Soltour pudiera jugarle en contra al mercado cubano.
El turoperador vende el destino Cuba con estas palabras publicitarias: "Viajar a Cuba es mucho más que conocer un destino paradisíaco, es una oportunidad para contribuir al desarrollo de su economía local, apoyar a los pequeños negocios y vivir una experiencia auténtica. Soltour, comprometido con un turismo consciente, recomienda dedicar al menos una semana a explorar la Isla.
Recuperar el mercado español es uno de los principales intereses de las autoridades turísticas del régimen, toda vez que varias de las compañías hoteleras y turoperadores presentes en la Isla son del país ibérico. En tal sentido, durante la Feria Internacional de Turismo, desarrollada en enero en Madrid, el ministro cubano del sector, Juan Carlos García Granda, se refirió a "planes estratégicos para potenciar el sector" y afirmó que, en dicho evento, "se pudo comprobar el interés que mantienen los socios y la red de ventas en promoverla como destino".
Sin embargo, los hechos demuestran lo contrario y varios turoperadores pidieron a las autoridades turísticas cubanas acelerar las estrategias para frenar el descalabro del sector. En el evento, García Granda y otros funcionarios ofrecieron "proyectos muy amplios, ambiciosos, asociados a parques temáticos, a las marinas, la actividad de astilleros, campos de golf y un grupo importante de iniciativas vinculadas al desarrollo inmobiliario".
En un artículo reciente sobre el tema publicado en DIARIO DE CUBA, el economista Emilio Morales, detalló: "El régimen cubano ha comenzado el año con una muy mala noticia: su industria turística se ha desplomado un 24,56% al cerrar el mes de enero, con el arribo de 196.004 turistas, muy por debajo de la cifra alcanzada en el mismo mes de 2024, cuando recibieron 240.027 viajeros. Si lo comparamos con el 2019, año previo a la pandemia, la caída es de un descomunal 59,96%. Todo indica que el pronóstico del régimen cubano de alcanzar 2,6 millones de turistas en el 2025 es otra quimera inalcanzable".