Luego del cruce de informaciones en torno a la disponibilidad de combustible JET-A1 en los aeropuertos cubanos, toda vez que la Empresa Cubana de Aviación S.A. (ECASA) emitió alertas sobre la escasez del producto para el repostaje de los aviones y luego las retiró, este lunes comenzó la descarga en La Habana de un buque con dicho combustible, según informó el periodista oficialista Lázaro Manuel Alonso en su perfil de Facebook.
De esta forma, e imbuidos en el secretismo habitual, el controlador aéreo cubano reconoce que sí existió tal escasez y, aunque Alonso afirmó que el producto "está garantizado para todo el mes de diciembre y principios de enero", el caótico contexto cubano de gestión de los combustibles hace saltar las alarmas.
En tal sentido, el director adjunto de la Unión Cuba Petróleo (CUPET), Irenaldo Pérez, dijo al estatal Canal Caribe: "Tenemos conversaciones con los proveedores y estamos fijando las próximas entregas, en aras de poder garantizar la continuidad y que no haya ningún tipo de desempate. Al parecer todo está bien ajustado".
La crisis comenzó cuando, la semana pasada, el director de Operaciones de ECASA, José Ramón Hernández Agüero, informó en una carta dirigida al Instituto de Aeronáutica Civil de Cuba, de "la no disponibilidad de combustible JET-A1 en los aeropuertos de la red ECASA a partir del domingo 1 de diciembre".
Sin embargo, poco después, la agencia estatal Prensa Latina informó de la cancelación de los avisos Notam (advertencia que se realiza a través de telecomunicaciones a las autoridades de aviación) emitidos en tal sentido.
Ante esta situación, agencia del transporte aéreo de Rusia, Rosaviatsia, ya había tomado la decisión de que los aviones rusos que cubren las rutas con La Habana y Varadero hicieran una escala técnica en Caracas para repostar, algo que aumentaría la duración de los vuelos entre Moscú y Cuba en unas cinco horas en cada dirección, en plena temporada alta de llegada de turistas de dicho país. Con la llegada de este buque, esta estrategia queda suspendida, pero nada descarta que, en un futuro no muy lejano, las ineficiencias de régimen hagan que sea necesario volver a ella.
En febrero de este año un incidente similar, de falta de combustible en el aeropuerto de Cayo Coco, retrasó la salida de un vuelo de la aerolínea rusa Nordwind Airlines y provocó una protesta de los pasajeros.
En ese momento, Koreniako escribió en su canal de Telegram que el vuelo se retrasó "debido a la avería de un buque cisterna que transportaba combustible al aeropuerto cubano el día de la salida del vuelo N4 552 Cayo Coco - Moscú". El servicio de prensa de Nordwind Airlines dijo, asimismo, que la razón de la demora fue que "no había suficiente combustible en el aeropuerto cubano para reabastecer de combustible a la aeronave".
Además de en el desarrollo normal de los viajes desde y hacia la Isla, la inconstancia en el abastecimiento de combustible a los aeropuertos pudiera tener un impacto en la ya mermada industria turística cubana.
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