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Política

Un convenio oscuro y suspicaz: diputados de Honduras cuestionan el acuerdo de cielos abiertos con Cuba

Un grupo político pide pedir cuentas al secretario de Planificación Estratégica del Gobierno de Xiomara Castro por firmar el convenio sin ser de su competencia.

Tegucigalpa
Sesión del Congreso Nacional de Honduras.
Sesión del Congreso Nacional de Honduras. Diario Paradigma

El Movimiento Todos por Honduras, del opositor Partido Liberal, pidió esta semana interpelar al titular de la Secretaría de Planificación Estratégica (SPE) del Gobierno de Xiomara Castro, Ricardo Salgado, por negociar y firmar con el régimen de Cuba el acuerdo de cielos abiertos entre Tegucigalpa y La Habana que está siendo sometido a un intenso escrutinio en el Congreso Nacional.

Según una declaración de la iniciativa, la SPE hondureña no tiene facultades para negociar y firmar el acuerdo, lo cual contraviene la Ley General de la Administración Pública.

"Dicha Secretaría no tiene bajo sus responsabilidades las de atender asuntos relativos a la Aeronáutica Civil, dado que de conformidad con el Artículo 6 de la Ley de Aeronáutica Civil, los entes reguladores en materia del subsector de Aviación Civil son la Secretaría de Infraestructura y Servicios Públicos y la Secretaría de Desarrollo Económico", afirma la declaración, citada por el medio hondureño TuNota.

Todos por Honduras advierte que Salgado merece la interpelación del Congreso Nacional por excederse en sus funciones.

Enfatiza el documento que el acuerdo entre Tegucigalpa y La Habana, por sus características, requiere además de la aprobación del Congreso, dado que implica la utilización del territorio nacional por otro Estado.

Recuerda el llamamiento que el régimen de la Isla está incluido en la lista de EEUU de Estados patrocinadores del terrorismo internacional, por lo que un acuerdo de esta naturaleza podría provocar inconvenientes para Honduras.

El acuerdo, identificado como 07-DGA-JTC2024 y firmado el 9 de noviembre de 2023 en La Habana, establece un marco para los servicios aéreos entre ambas naciones.

El acuerdo de cielos abiertos se encuentra en proceso de aprobación en el Congreso Nacional, donde ha provocado enfrentamientos entre la bancada oficialista y los partidos de la oposición.

El medio Proceso Digital reseñó el debate sobre el tema en el órgano legislativo, y calificó el documento como "oscuro y suspicaz", después que este pasara un primer y segundo debate en la Cámara. Según este reporte, "voces de todas las bancadas políticas se mostraron alarmadas por varios articulados del convenio". 

Los diputados que defienden el convenio son los del Partido Libre, de la presidenta Castro, y el único representante de la bancada de la Democracia Cristiana.

Así, el titular del Legislativo, Luis Redondo, comentó durante el debate que surgen muchas dudas sobre este tratado, como el hecho de que los migrantes cubanos comiencen a llegar a Honduras aunque, dijo, "yo espero que vengan a visitar las ruinas de Copán".

Matizó diciendo que este sería el primer tratado que permitiría que inversionistas nacionales o líneas aéreas hondureñas puedan realizar vuelos comerciales hacia Cuba y viceversa. 

"Ese interés es el que me mueve en lo personal, sobre todo por la ampliación y los proyectos que vienen para el aeropuerto de San Pedro Sula y para las inversiones que se están haciendo y que se planean hacer con algunos otros aeropuertos", precisó, citado por Proceso Digital.

Aseguró Redondo que Cuba "es atractiva por su turismo médico", del que hacen uso centenares de hondureños. Pero, añadió, la Isla se ha convertido en uno de los países más pobres de Latinoamérica en los últimos años y los vuelos de salida son de personas que abandonan el país para iniciar una nueva vida como migrantes en el extranjero, tal como sucede con los hondureños que migran dejando atrás la pobreza.

Jorge Corrales, subdirector la Agencia Hondureña de Aeronáutica Civil (AHAC), apuntó que el convenio permitirá a las aerolíneas con bandera cubana y hondureña hacer vuelos entre ambas naciones. Expuso que todos los países firmantes del Convenio de Chicago de 1944 están obligados a establecer convenios de cielos abiertos entre Estados que son parte del comité. 

"Yo veo en este convenio nada más la oportunidad para Honduras de establecer un comercio firme con Cuba y que permita abaratar costos para los pasajeros que pretendan viajar de Honduras hacia Cuba y viceversa", comentó.

Mencionó que actualmente los viajeros que van a Cuba desde Honduras deben ir a Colombia o Panamá para luego proceder hacia La Habana, y aseguró que la mayoría de los hondureños que viajan a Cuba lo hacen con fines educativos o a buscar algún tratamiento médico.

Leonardo Soto, del departamento legal de la AHAC, aseguró que los diálogos entre funcionarios para este acuerdo se remontan a 2016 y apuntó que en el Congreso Nacional hay convenios similares pendientes de ratificación con países como España, EEUU, Emiratos Árabes, Canadá, Belice y República Dominicana, mientras se negocian acuerdos similares con México, Colombia, Catar, Islandia y Macedonia.

Pero el congresista nacionalista Antonio César Rivera Callejas recordó que el acuerdo en cuestión se firma con un régimen represivo: "¿Queremos una Honduras llena de cubanos? Creería que no, y me hago la siguiente pregunta: ¿van a venir divisas de Cuba hacia Honduras o de Honduras a Cuba; van a venir más cubanos a Honduras u hondureños a Cuba? No comparto eso de que van a venir los cubanos a ver las ruinas de Copán o a Roatán, no creo que tengan la capacidad económica".

Rivera Callejas advirtió que La Habana podría querer usar a Honduras como puente para el tráfico de drogas, de personas o de trata, y enfatizó que "la izquierda radical decía que no quería que Honduras fuera patio trasero del imperio, pero parece que esa misma izquierda sí quiere que Honduras sea patio trasero de Cuba, Venezuela, Irán o China".

En riposta, el diputado oficialista Sergio Castellanos aseguró que "los únicos cubanos que conozco en este país son aquellos que vinieron cuando el (huracán) Mitch, en brigadas de solidaridad, a ayudar a nuestros hermanos; a los únicos que conozco es a los que nos han ayudado a declarar 176 municipios libres de analfabetismo. Nunca he conocido un cubano que ha venido a entrenar a militares o a hondureños para que asesinen a sus compatriotas", dijo, en referencia a los profesionales exportados por La Habana a Honduras.

"¿Cuál es el pecado de Cuba, Nicaragua, Venezuela o el nuestro? Que sí tenemos dignidad, que queremos construir nuestra propia patria", afirmó, para luego calificar como "golpista, traidor, vende patria y pitiyanqui" al congresista Rivera Callejas.  

Fátima Mena, del Partido Salvador de Honduras, mostró su preocupación porque el acuerdo de cielos abiertos "involucra a un régimen dictatorial", y cuestionó que en uno de los apartados de la ley se establece que es con fines comerciales, pero en otro articulado reza que se tiene el derecho de hacer escalas con fines no comerciales.

Advirtió que tampoco se sabe quiénes son los dueños de las empresas que viajarán desde la Isla hacia Honduras: "Entiendo que la economía cubana es muy diferente a la nuestra, por lo tanto es urgente saber cómo operan estas empresas, si son consorcios y es estatal. (...) El convenio también habla de servicios terrestres y no está muy bien especificado", cuestionó.

El legislador independiente José Manuel Matheu reprochó que el convenio fue firmado en noviembre de 2023, pero por la parte cubana lo avaló el ministro de Transporte, no así por su contraparte hondureña.

"¿Qué tiene que andar firmando un secretario de Planificación Estratégica un convenio que es de transporte aéreo? Esa cosa no me cuadra", dijo.

"¿Quiénes están detrás de la línea hondureña que quiere volar a Cuba y por qué lo firmó el ministro de Planificación?", cuestionó.

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Todos sabemos quiénes son los verdaderos culpables de la existencia del castrochavismo, y que lo siguen manteniendo a escondidas, lo demás es mantener nuestras esperanzas con el cuento de la buen pipa...