Activistas cubanos recaudan ayuda para los damnificados por las lluvias en La Habana

Tras las intensas lluvias que provocaron inundaciones en La Habana este fin de semana, activistas cubanos se movilizan en redes sociales para recaudar ayuda para personas que hayan resultado damnificadas.

"El equipo HUELLAS comienza la recogida de donaciones para los damnificados de la capital cubana", anunció este domingo en Facebook la activista Johana Jolá Álvarez.

La activista recordó que las lluvias dan lugar a inundaciones en zonas bajas y derrumbes, que hacen que muchas familias pierdan lo poco que tienen, aunque no ha transcendido aún información oficial sobre las pérdidas materiales que dejan las fuertes precipitaciones.

El equipo está reuniendo productos de aseo, alimentos enlatados o envasados, ropas y calzado, material escolar, juguetes y juegos de mesa, ropa de cama y medicamentos. Los interesados en ayudar pueden llamar al +53 55057111.

Este sábado, zonas bajas de varios municipios habaneros quedaron inundados por las fuertes lluvias. Imágenes, publicadas principalmente en las redes sociales, mostraban las calles desbordadas y algunas personas con el agua por la cintura y vehículos con las llantas cubiertas por el agua.

El Centro de Pronósticos del Instituto de Meteorología (INSMET) reportó en la red social X que este sábado se registraron 56 milímetros de lluvias en la estación de Casa Blanca, de La Habana, solo entre las 2:00 y las 5:00 de la tarde.

De acuerdo con la estatal Agencia Cubana de Noticias, entre los municipios en los que se registraron inundaciones en zonas bajas se encuentran Diez de Octubre, La Habana Vieja, Centro Habana, Plaza de la Revolución y Boyeros.

Las precipitaciones también provocaron una nueva suspensión de la transportación marítima entre La Habana Vieja y los municipios de Regla y Casa Blanca, en la lanchita de Regla. Esto obliga a los residentes o trabajadores de esos municipios, una vez más, a buscar alternativas para trasladarse. 

Hacía menos de un mes que ese medio de transporte había comenzado a brindar servicio, después de la rotura de la única lancha que navegaba. A inicios de junio, por primera vez desde 2022, los habaneros volvieron a contar con dos lanchas.

Pero debido a las lluvias y a la basura que arrastra la marea, la Empresa de Transporte de La Habana decidió interrumpir la navegación de las embarcaciones.

"Se suspende el servicio de transportación marítima de la lanchita de Regla, debido a debido a las condiciones climatológicas y a exposición a posibles afectaciones a las embarcaciones, por la gran cantidad de desechos sólidos que arrastra la marea", informó la empresa estatal en Facebook este domingo.

La activista Johana Jolá Álvarez alertó de posibles derrumbes en La Habana cuando cesen las lluvias y salga el sol.

"Lo peor está por venir", advirtió en otra publicación en Facebook.

El alto grado de deterioro que acumulan las viviendas en Cuba hacen que el temor de la activista sea más que fundado.

En Matanzas, las lluvias ya provocaron dos derrumbes parciales entre viernes y sábado. Ninguno de los dos hechos se saldó con personas fallecidas o lesionadas. Con estos, son seis los derrumbes ocurridos en Cuba en una semana.

Los otros cuatro se reportaron en La Habana y uno de ellos dejó un fallecido y dos heridos. Justo esta semana, el Gobierno de Cuba informó que en los cinco primeros meses de 2024 solo ha construido 3.579 viviendas, lo que representa apenas el 0,8% de las necesarias para eliminar un déficit que, según cifras oficiales, es de 800.000 viviendas.

Mientras los problemas de vivienda se acumulan, empeoran y generan protestas, fundamentalmente de madres a las que las autoridades han respondido con amenazas, el Gobierno prioriza el sector turístico. Y las cifras oficiales lo demuestran.

A la construcción de hoteles e instalaciones turísticas, el Gobierno cubano destinó un cuarto de los 41.616.003 millones de la inversión estatal en la primera mitad de 2023, de acuerdo con una publicación de la estatal Oficina Nacional de Estadísticas e Información (ONEI).

Ese sector acaparó 10.406 millones de pesos en el primer semestre del año, pese a que siete de cada diez habitaciones de hoteles estuvieron desocupadas en el mismo periodo.