Una delegación de al menos 30 líderes empresariales brasileños viajará el lunes a La Habana en busca de oportunidades para impulsar el comercio con Cuba, el más reciente paso del presidente Luiz Inácio Lula da Silva para reparar las relaciones entre ambos gobiernos.
La misión de cuatro días tendrá lugar antes del viaje de Lula a la Isla el 15 y 16 de septiembre, donde se reunirá con Miguel Díaz-Canel y participará en las reuniones del Grupo de los 77, una cumbre económica de las Naciones Unidas para los países en desarrollo que La Habana preside, reportó Bloomberg.
Los lazos de Brasil con Cuba se deterioraron durante el Gobierno del expresidente Jair Bolsonaro, aunque nunca se cortaron por completo.
Desde que asumió el cargo en enero, Lula ha buscado reconstruir las relaciones tanto con La Habana como con Venezuela, y se reunió previamente este año con Díaz-Canel al margen de una cumbre financiera global realizada en París.
Eso ha creado una oportunidad para los líderes de la industria deseosos de fortalecer las relaciones comerciales, según dijo Jorge Viana, director de la Agencia Brasileña de Promoción de Exportaciones e Inversiones, o Apex, que encabeza el viaje.
"Esa es una oportunidad para retomar nuestras relaciones comerciales, luego de que el anterior Gobierno brasileño dejara de lado a Cuba", dijo Viana en un comunicado citado por Bloomberg.
"No tiene sentido que Brasil dé la espalda a los países de Centroamérica y el Caribe, incluido Cuba, como lo hemos hecho durante los últimos cuatro años", agregó.
Brasil es el cuarto mayor proveedor de bienes a Cuba, sólo detrás de España, China y Estados Unidos, según Apex. Pero el volumen de sus exportaciones en 2022 fue poco más de la mitad de lo que envió a la Isla diez años antes.
El viaje incluirá a líderes empresariales de las industrias del transporte aéreo, agricultura, energía y salud. No se revelaron los nombres de quienes se unieron a la delegación.
Alimentos, maquinaria industrial, equipos de transporte y productos químicos son las áreas con mayores oportunidades exportadoras en Cuba, según Apex. La agencia también espera la creación de una ruta aérea comercial que conecte São Paulo y La Habana, indicó el comunicado.
Ninguna de las declaraciones indicó si en la agenda del viaje está la deuda de La Habana con Brasil, que se remonta a las primeras administraciones de Lula. El régimen cubano debe al Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES) de ese país 597 millones de dólares, según cifras de 2018, a pagar en un plazo de 25 años.
Tras regresar a la Presidencia, Lula dijo a inicios de 2023 que confía en que La Habana saldará sus deudas con el banco de fomento brasileño y responsabilizó a Bolsonaro del atraso de los pagos.
Según los últimos datos oficiales de septiembre de 2022, las deudas vencidas en financiamientos del BNDES destinados para proyectos de bienes y servicios en en Cuba llegaban a los 227 millones de dólares.
Lo único que ayudaría algo al pueblo sería la dolarización, pero la Mafia teme que el pueblo se empodere, porque ya no lo podría controlar como hasta ahora. Un pueblo, mientras más pobre sea, más fácil es de controlarlo, por eso la pobreza que hoy padece Cuba es planificada. No olvidemos que el HP en jefe nada más agarrar el poder cambió la moneda fuerte en moneda fiduciaria o "chavitos" como los del juego Monopolio para enriquecerse él y empobrecer al pueblo para mayor control. Raúl Castro ha dicho sin tapujos: no queremos ricos.
¿A esto se le llama "impuesto revolucionario"?
Que te "aconsejen" invertir en una "empresa" que sabes que no te va a pagar es una forma un tanto rebuscada de "fiscalidad".
Desde 1959, Acuerdos, asambleas, reuniones, congresos, cumbres, blablablá, blablablá y nada se resuelve. Bueno, con algo hay que entretenerse. Recomponer la economía cubana es tan imposible como recomponer un vaso que se cae y se hace pedazos.