El cubano Carlos Andrades, residente en Canadá, viajó a Cuba el 21 de marzo pasado para visitar a su madre, de 95 años. Lo acompañaron sus hijas y su nieto, todos canadienses de nacimiento. A Andrades, por su oposición pública contra el régimen cubano, se le había impedido ingresar a Cuba en otras ocasiones. Pero esta vez pudo entrar a la Isla y salir del Aeropuerto José Martí sin mayores obstáculos.
Sin embargo los problemas llegaron después. Según declaraciones de Andrades a la cadena canadiense CBC, al poco rato de llegar recibió la visita en el hotel de una mujer con uniforme militar que le entregó una citación para presentarse a "una entrevista" en un centro de detención operado por el Ministerio del Interior. Allí lo interrogó el coronel Luis Morales, mientras filmaba todo con una cámara de video.
Andrades explicó que los interrogadores le mostraron pruebas de que había participado en manifestaciones contra el régimen y sus comentarios críticos en redes sociales. "Te muestran la foto y has hecho esto, y has hecho esto. Así que estás contra la pared porque no estás en Canadá", dijo. "Canadá no puede protegerte de ninguna manera".
Agregó que los oficiales sugirieron además que estaba involucrado en el tráfico de drogas, con el objetivo de financiar a youtubers antigubernamentales.
El hombre niega todas estas acusaciones, que afectan también a otros 12 ciudadanos cubanocanadienses, todos muy activos manifestándose en Montreal, Canadá, contra la dictadura. Los 13 son blanco de una campaña de hostigamiento lanzada por el oficialismo para evitar que protesten contra el régimen en la localidad donde viven.
La campaña ha sido lanzada por el youtuber anónimo Guerrero Cubano, vocero oficioso de la Seguridad del Estado, que acusa a estos activistas, sin mostrar pruebas, de traficar cocaína de Colombia a Canadá para usar estos recursos contra el Gobierno cubano.
En los videos del interrogatorio de Andrades, difundidos por este canal, Guerrero Cubano señala que estas 13 personas se sirven de un negocio de importación de alimentos, propiedad de uno de los hombres, para el contrabando de cocaína que le compran a una red familiar de Colombia, llamada los Solazar. Los videos afirman que lo recaudado es para realizar ataques terroristas contra Cuba.
En su artículo, CBC explica que uno de los nombrados en los materiales fue, en algún momento anterior, narcotraficante. Se trata de Máximo Morales, quien fue arrestado en el año 1990 cuando la Policía de Montreal realizara la mayor incautación de cocaína en esa ciudad. Morales fue acusado de ingresar 1.500 kg de cocaína en tan solo un año, una droga que compraba al cártel de Medellín. Por esa razón recibió una sentencia de diez años.
El dinero que hizo traficando estaba destinado a financiar las operaciones de la oposición anticastrista, reconoció Morales a la CBC. "Fue una guerra (…). Fue ojo por ojo, diente por diente. Y la guerra necesita dinero. Fui arrestado, recibí una sentencia de diez años. Cumplí mi tiempo y después de eso me reintegré a la comunidad", agregó. Aunque el hombre admitió que "no es un ángel", dijo que obtuvo un indulto y que nunca más ha tenido problemas con la ley.
Pero este es solamente el caso de Máximo Morales, las otras 12 personas mencionadas no tienen vínculos con él, ni antecedentes penales, salvo los señalamientos de participar en los encuentros que se dieron durante las protestas o diversas reuniones de los exiliados cubanos en Canadá.
Tito Cardenas, dueño del estudio de baile Titisalsabor, cree que lo incluyeron en la lista después de hacer comentarios antigubernamentales en un artículo de Radio-Canada que se compartió ampliamente. "Creo que la gente debería ser consciente de que este es un método que usan todas las dictaduras. Cuando eres un opositor de una dictadura, lo primero que van a hacer es atacar tu reputación de cualquier forma que puedan", opinó.
Otro de los mencionados en el video, el asesor financiero Félix Blanco, está preocupado ante la posibilidad de que le tiendan una trampa: "Fui a la Policía y le dije, 'tengo miedo de que me metan algo en mi casa, que me metan algo en mi carro'".
"Ese tipo de regímenes no se quedan dentro de sus propias fronteras. Sale de sus fronteras para perseguir a las personas que hablan de ellos", advirtió otro de los entrevistados por CBC.
Canadá está infectado de testaferros de la dictadura cubana procedentes de todos los países del mundo y especialmente,canadienses.Desde gente muy ingenua hasta pederastas consumados que se aseguran ventaja en sus viajes a la isla.Los llamados Amigos de Cuba,que viajan en temporada alta y se mueven gratis por el país,a costa del pueblo.La ingenuidad del gobierno canadiense ha sido muy bien aprovechada por la malicia de la dictadura cubana.
El cubano es ingenuo por naturaleza o se hacen los estúpidos. En 64 años de dictadura se sabe que si mueve un dedo contra la dictadura te van a marcar como un güey. Y si decide entrar en la jaula de los mafiosos y criminales te van a desguazar. Esa excusa de la madre y familia que deje en Cuba es carnada para que entre en la jaula. Paren las estupideces.
Intentando crear otro a-la Alan Gross. Alejandro Castro, ustedes no aguantan ya. Y menos con una campaña en los pre-universitarios de Canadá 🇨🇦 . Con fotos de familia y todo.
Tremendo alarde; No! Pregúntale a Dun & Bradstreet 👉 , que ya desde cuando ella estaba en Cuba y tiene el contacto para la “subscription”
La familia pesa más que el tráfico de cocaina que ya pagó por la ley. Una campaña con fotos de la familia en Canada-High School acaba con toda la credibilidad de la dictadura en Canadá.
Hay muchos buenos canadienses que no saben ni pío de lo que sucede realmente en Cuba, son personas que defienden al régimen cubano, o son colaboradores y mantienen estrechos vínculos con la embajada en Ottawa. Algunos de ellos pueden ser funcionarios estatales. Además de que el PM Trudeau tiene un vínculo sentimental con la isla, su hermano escribió una de las crónicas más lacrimosas cuando Fidel Castro murió, y su madre es fan de Fidel Castro. Con ese background, ir a Cuba con pasaporte cubano como exige el régimen, es quedar sin protección de la embajada de Canadá, aun en el caso de que se le pidiera ayuda, y bajo el dominio de lo que se le ocurra al régimen. Como dice Andrade, "quedas contra la pared". Craso error esa visita, craso error. Por suerte para Andrade, Evan Dyer, el periodista de CBS que lo entrevistó, es uno de los pocos que lleva años al tanto de la situación cubana, de la represión del régimen y regularmente lo denuncia. Valga por la libertad de prensa y por Dyer.