Con más de cuatro años de retraso los buques de mayor tamaño podrán finalmente entrar a la Terminal de Contenedores, situada en la Zona Especial de Desarrollo del Mariel (ZEDM). El gerente general de la Terminal en 2018, Charles Baker, aseguró que el proyecto de dragado finalizaría en el 2019 pero no es hasta hoy que se anuncia ese objetivo como cumplido.
Este enclave, ubicado en la provincia de Artemisa, es considerado por las autoridades cubanas como "el principal" para la captación y el desarrollo de proyectos de inversión extranjera.
Gracias a la profundización realizada en el canal de acceso, la terminal del puerto podrá recibir ahora buques Neo Panamax de hasta 366 metros de eslora, 52 de manga y 15 de calado, "al cumplir con las condiciones de dragado y balizamiento requeridas", informó el diario local El Artemiseño.
El director general de esa Terminal, Martín José Spini, dijo que gracias a la infraestructura, la ubicación geográfica privilegiada en las rutas Norte-Sur y Este-Oeste, "una mano de obra confiable y altos niveles de seguridad", la Terminal de Contenedores de Mariel "está bien posicionada" para seguir creciendo.
Autoridades de la Terminal aseguran en su página web que esta nueva posibilidad "disminuye los costos de transporte y sienta las bases para pasar a ser un puerto de trasbordo, cuando se den las condiciones".
Explicaron además que para la ejecución de sus operaciones actuales disponen de una infraestructura y equipamiento instalado que comprende 702 metros de longitud de atraque, con 17,5 metros de profundidad; cuatro grúas de muelle Superpostpanamax; un área de patio de contenedores de 27,7 hectáreas, con capacidad para 800.000 TEUs (unidad de medida equivalente a un contenedor de 20 pies) anuales; 12 grúas pórtico sobre neumáticos, y dos grúas pórtico sobre raíles.
La modernización del Puerto de Mariel estuvo a cargo de la empresa brasileña Odebrecht, protagonista de un escandaloso caso de corrupción. Para esta inversión, la compañía fue beneficiada por el Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES) de Brasil con 68.000.000 de dólares en descuentos, en concepto de intereses, derivados de préstamos.
Según una investigación de la plataforma periodística Connectas, los más de 800 millones de dólares invertidos en el proyecto de la ZEDM hasta 2019 no habían sido suficientes para que llegara a buen puerto el que fue anunciado como el "nuevo motor de la economía" nacional, a causa de los problemas de calado y la insignificante economía cubana.
