Un incendio de gran magnitud está afectando la meseta de Pinares de Mayarí, en la Sierra de Nipe, Holguín, desde el pasado sábado 18 de febrero. El fuego, que se inició en la antigua Vaquería número 15 de un extinto plan lechero, se viene propagando desde entonces de manera descontrolada. "Ya abarca un área de cerca de 1.000 hectáreas, según se estima, y se extiende por alrededor de 15km de bosques y matorrales", dijo a DIARIO DE CUBA Yoandris, un vecino del lugar.
La información coincide con los reportes del periodista de la emisora local Radio Mayarí, Emilio Rodríguez Pupo, que ya cifraban en más de 900 las hectáreas afectadas. Al auge de la propagación contribuyen los vientos incesantes que alcanzan los 35km/h, y la intensa sequía del último semestre (principalmente de los últimos dos meses, sin precipitaciones en la mayor parte del territorio).
El fuego está siendo combatido por fuerzas combinadas de varios municipios: Bomberos, Guardabosques, las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR) y la Defensa Civil; además de los obreros forestales y voluntarios del lugar. No obstante, no han conseguido detener su propagación y se reporta como 'fuera de control'. Al observar las imágenes llama la atención la falta de recursos para enfrentar un evento de esta magnitud.
Según Ricardo, un obrero forestal que estuvo en el lugar cooperando con las labores, "ese incendio no lo apaga nadie, al menos no con lo que se está haciendo. Lo único que estamos logrando es evitar que se propague en determinados objetivos donde es posible tomar medidas preventivas, pero el fuego devora todo. Es como si lo intentáramos apagar con saliva. Está fuera de control. Solo una lluvia fuerte podría apagarlo. Esos bosques están como pólvora, de tanta sequía, listos para arder".
Un reporte del periodista oficialista Emilio Rodríguez Pupo informó también que, como parte de las medidas de protección, "el orquidiario está a salvo", una de las mayores colecciones de estas plantas. Las mismas están en el Centro de Investigación para la Montaña, institución que tiene trocha reforzada y bomberos para no ser alcanzada por las llamas, ya muy cercanas.
También son motivo de preocupación las numerosas especies de la flora y la fauna que están siendo ahora mismo devorados o desplazados por el siniestro, ya afectando el Parque Nacional 'La Mensura'. Especialmente la 'flor de Holguín', título que merece la flor de una planta autóctona de esta meseta, que solo crece en su microclima especial y a esta altitud. Se llamada jazmín del Pinar (Euphorbia podocarpiloria).
"Solo la lluvia podría salvar a Pinares (de Mayarí). Este fuego no lo apaga nadie mientras no llueva y mientras esté soplando este viento", opina Noel, un exguardabosques con experiencia en combatir incendios forestales.
"Las trochas hay que hacerlas bien anchas porque el pino tiene bellotas que estallan y dispersan el fuego. No hay técnica para hacer eso (equipos forestales pesados diseñados para las montañas), porque el incendio está avanzando en una zona irregular, de muy difícil acceso. Si no lo frenaron en la meseta y la lluvia no cae antes de que llegue a Pinalito (zona de riscos y laderas), va a arder todo", agrega Noel.
El valle de Mayarí, donde reside el 40% de los habitantes del municipio y se ubica la ciudad cabecera homónima, no está siendo afectado por el humo ya que el viento sopla desde el norte y la Sierra de Nipe se ubica al sur-suroeste del valle.
El impacto económico del incendio también es significativo. Arrasa con los pocos plantíos de café que han sobrevivido a la destrucción de ese renglón (antes muy significativo en el territorio), y con bosques comerciales explotados por la empresa local MADEMA.
Al menos media docena de incendios forestales han afectado el territorio de Mayarí en el último mes. Apenas diez días atrás se sofocó uno de gran magnitud en la zona de El Prado en la limítrofe Sierra Cristal, que afectó más de 600 hectáreas y terminó por un aguacero ocasional.
Al menos dos más se han logrado apagar en la misma sierra recientemente y uno en el Consejo Popular de Guayabo. Aunque este se propagó por varias fincas y amenazó con alcanzar viviendas de los campesinos, fue sofocado por la propia población movilizada espontáneamente. El carro de bomberos lo enviaron cinco horas después de la llamada, y se averió un kilómetro antes de llegar al sitio.
Rodríguez Pupo dijo en Facebook sobre el actual fuego que los dos puntos de enfrentamiento fundamentales están en la Vegueta de Diego Pupo, camino a Pinarito, y en la zona de Casimba. "Más de 400 efectivos de las fuerzas armadas Revolucionarias están en camino ahora para reforzar el combate", agregó.