La Habana ya tiene su dosis de apagones programados para arrancar agosto, según publicó la Empresa Eléctrica de la capital, una medida que las autoridades calificaron como de "solidaridad" con los cubanos que residen en provincias, en medio de la difusión en redes sociales de nuevas protestas en Artemisa, Matanzas y Camagüey, y la salida de otra unidad de una termoeléctrica recién incorporada a la generación.
"Estimados clientes, esta es la programación de afectaciones por déficit de generación en los días del 1 al 8 de agosto. Horario de las afectaciones: 10:00AM a 2:00PM. Ante cualquier duda pueden llamar al 18888", publicó la entidad estatal en su perfil oficial de Facebook.
El plan de apagones para los municipios capitalinos afecta, en primer lugar, a las localidades de Diez de Octubre, Arroyo Naranjo, Boyeros, Centro Habana, Cerro, Cotorro, Guanabacoa, Regla, Habana del Este, La Lisa, Marianao, Playa, San Miguel del Padrón y Plaza.
La Habana Vieja solo tiene afectaciones planificadas para el miércoles 3 y el domingo 7, específicamente en los barrios de Talla Piedra, Atarés y Los Sitios.
En la publicación de la entidad estatal capitalina cubanos residentes en provincias afectadas por los continuos y prolongados apagones siguieron expresando su malestar.
Luis Alberto Zurita ejemplificó su situación: "Aquí en Pinar del Río, en el circuito P-90, la apagaron desde las 9:20 de la noche del domingo 31 hasta las 5:00 del lunes 1 de agosto, 7 horas y 40 minutos de forma continua. Y ya la habían apagado cuatro horas al mediodía".
Para Gabriela Falcón, "es una falta de respeto con el resto del país que afronta apagones diarios de entre 10 a 14 horas incluyendo las madrugadas".
"Nosotros en las provincias a jodernos con 12 horas, gracias por tan buena gestión, este país es un insulto a la vida", declaró Carlos Rafael García Soroña.
Mientras, vecinos de los municipios de Bauta, Jagüey Grande y Nuevitas, en las provincias de Artemisa, Matanzas y Camagüey, protestaron el fin de semana contra los apagones a ritmo de cacerolazos y comparsa.
Sonando cazuelas y a gritos de "¡pongan la corriente, pinga!", un número de personas que no se puede estimar por la oscuridad de la grabación salió a las calles del barrio La Minina, en Bauta.
"30 de julio. Bauta, La Minina. Pongan la corriente. Se calentó", se escucha decir a una de las personas participantes en el cacerolazo, en uno de los videos compartidos por el usuario de Facebook identificado como Natanael Opositor. El mismo video se replicó en Twitter.
La protesta de Jagüey Grande se generó en el consejo popular Australia, donde también los pobladores salieron a las calles cazuela en mano y gritando consignas y reclamos similares a los de La Minina.
El activista Magdiel Jorge Castro compartió en su cuenta en Twitter otra protesta que habría ocurrido en Nuevitas, donde se repitió el grito de "pongan la corriente, pinga". Una usuaria que comentó el video dijo que sucedió también el sábado.
"Estaban de fiesta en la disco, quitaron la corriente, empezaron con la conga de la corriente, pusieron rápido una planta y la gente volvió a su fiesta normal como si nada, vergüenza es lo que damos", escribió.
El domingo, el periodista oficialista Lázaro Manuel Alonso informó sobre la salida de una unidad recién incorporada en Camagüey a la generación eléctrica nacional.
"Confirman desde Camagüey, la salida del sistema eléctrico nacional del bloque 5 de Nuevitas. Esa unidad sincronizó ayer (sábado) en la noche. Ante esa situación, se incrementa el déficit de generación de electricidad en el país esta noche. Investigan las causas de lo sucedido", escribió en su perfil de Facebook.
El propio Alonso informó en un reporte del estatal Canal Caribe que el Gobierno comercializa para clientes residenciales o estatales paneles solares importados, pero sin baterías de respaldo.
Según un funcionario de la empresa de servicios ingenieros COPEXTEL, ya hay 45 sistemas fotovoltaicos instalados en la capital cubana, 30 de ellos en el sector residencial, diseñados para inyectar energía a la red, pero sin baterías de respaldo, por lo que solo funcionan cuando hay sol.
Los sistemas de energía solar, que vende empresa a 55.000 pesos cubanos (cuatro paneles), se desconectan cuando se producen cortes de electricidad y no entregan energía a la red nacional.
Una familia entrevistada dijo que decidió instalar este sistema porque son altos consumidores. Querían compensar los gastos, pero la realidad es que siguen pagando más de 2.000 pesos mensuales por el servicio eléctrico, a pesar de que generan más electricidad con estos paneles que la que consumen.
A finales de marzo, el Gobierno anunció estar buscando financiamiento internacional para impulsar un cambio de matriz energética en el país, en medio de la profunda crisis que atraviesa debido a lo obsoleto de sus instalaciones. El ministro de Energía y Minas, Liván Arronte Cruz, anunció entonces que la Agencia Internacional de las Energías Renovables (IRENA, sus siglas en inglés) daría apoyo financiero para la construcción de 15 megawatts en parques fotovoltaicos en Cuba.
En octubre de 2021 las autoridades reconocieron que las inversiones en el sector llevaban un 40% de atraso.
En agosto del pasado año, Arronte Cruz dijo que entre las medidas implementadas para potenciar las fuentes renovables de energía en el sector residencial se encontraba la venta por comercio electrónico de sistemas fotovoltaicos, así como en las tiendas especializadas de CIMEX, como Colorama, pero en Moneda Libremente Convertible (MLC), a la que la mayoría de los cubanos no tiene acceso.
Hace más de tres meses, el gobierno de Cuba también implementó el cobro en MLC de la contratación de energía solar al sector no residencial, es decir, Mipymes, cooperativas e industrias estatales. Para ello, la UNE firmó un contrato de energía fotovoltaica en el sector no residencial, que se extenderá por un quinquenio y cuyos pagos se harán en divisas.
