Las autoridades cubanas informaron que el incendio forestal desatado hace tres días en la localidad de San Juan y Martínez, provincia de Pinar del Río, está bajo el control del Cuerpo de Guardabosques de Cuba, según un reporte de Prensa Latina.
Especialistas del Cuerpo de Guardabosques todavía combaten las llamas junto con trabajadores del Ministerio de la Agricultura para sofocar totalmente el fuego que comenzó el pasado domingo en una apartada región conocida como San Simón de las Cuchillas, del municipio San Juan y Martínez.
Dos senderos abiertos por los caminos que conducen al río San Juan y al Arroyo del Infierno facilitan el avance de los agentes para rodear el incendio, explicó el segundo jefe de los Guardabosques en Pinar del Río, Andy Luis Valle, a Prensa Latina.
De acuerdo con el directivo, unas 200 hectáreas de pino de la especie Caribbean, además del bosque natural, están siendo afectadas por el fuego, que se avivó por la presencia de vientos del sur, que superan los 25 kilómetros por hora.
También indicó que la intensa sequía registrada en la zona proporciona abundante material combustible para incrementar las llamas del incendio, cuyas causas son investigadas por especialistas del Ministerio del Interior (MININT).
Pinar del Río, la segunda provincia más reforestada de Cuba, reportó el pasado año 51 incendios forestales que ocasionaron la pérdida de 214 hectáreas y daños al medio ambiente, informó la agencia EFE.
En Cuba, el período crítico de ocurrencia de incendios forestales es del 1 de enero al 31 de mayo, coincidente con la época de mayor sequía. Eso representa una amenaza para la biodiversidad del país, con más de cuatro millones de hectáreas de bosques.
Entre enero y abril de 2021 se registraron al menos 186 incendios forestales en la Isla, en parte por la combinación del evento El Niño-Oscilación del Sur (ENOS), la sequía y la abundante carga de material combustible existente en las áreas de más riesgo.
Las mayores afectaciones ocurrieron en la provincia oriental de Guantánamo, donde dos incendios —uno en Alto del Zorzal y otro en el Parque Nacional Alejandro de Humboldt— devastaron 2.123 hectáreas de bosques.
La mayor responsabilidad por los incendios forestales es atribuida a la acción humana. Según los últimos datos disponibles (2019) el 93,66% son causados por el hombre.
