Con 10.973 casos en los primeros ocho días de enero, Cuba experimenta un supersónico repunte de la epidemia de Covid-19, después de haber reducido el número de contagios entre la segunda mitad de octubre y mediados de diciembre, de manera sostenida, publica la agencia IPS.
La llamada cuarta ola se asocia al aumento de los viajes desde el exterior, a partir del 15 de noviembre, y a la flexibilización de medidas internas: el levantamiento de restricciones de circulación el horario nocturno; la apertura, con capacidad controlada, de servicios de bares y restaurantes; y el restablecimiento de los viajes interprovinciales, entre otras.
Según informó el doctor Francisco Durán, director de Epidemiología del Ministerio de Salud Pública (MINSAP), el acumulado entre el 1 y el 8 de enero representa un promedio de 1.367 casos diarios, lo que habla de la elevada transmisión, fundamentalmente a partir de diagnosticados autóctonos.
La alta cifra representa un retroceso en los parámetros alcanzados a partir de octubre del pasado año, admitió Durán, quien informó que en la primera semana de enero se diagnosticaron 9.193 casos más que en la semana anterior (1.744), con aumento tanto de autóctonos: 10.100, como de importados: 837.
El especialista señaló que a partir de la semana 42 del pasado año, cuando se diagnosticaron 1.541 personas como promedio diario, se produjo un descenso sostenido hasta alcanzar la menor cifra del año en la semana 50, con 67 casos. Sin embargo, el repunte comenzó en las semanas 51 y 52, con un promedio por día de 90 y 91, respectivamente.
Si el 1 de enero en Cuba se registraron 469 casos, el aumento fue exponencial hasta superar la cota de los 1.000 el día 5 (1.429) y llegar a 2.174, solo dos días después.
Situación por provincias
Las provincias que presentan la situación más desfavorable en cuanto a cantidad de casos de Covid-19 son Pinar del Río, Camagüey y Matanzas, que superan los 1.000, seguidas de Cienfuegos, Las Tunas y La Habana, con más de 700.
Los reportes del MINSAP indican que las más altas tasas de incidencia por cada 100.000 habitantes se registran en Pinar del Río, Cienfuegos, Camagüey, Matanzas, Mayabeque y el Municipio Especial Isla de la Juventud, que presenta hoy su mayor pico pandémico.
El director de Epidemiología subrayó la disminución del número de fallecidos, de 124 en la semana 42, a menos de 10, incluidos los cinco de los primeros días de enero. La cifra se considera relativamente en proporción con con el incremento de los casos positivos.
Hasta el momento se reportan 129 casos infectados con la variante Ómicron, aunque Durán admitió que pueden existir otros sin estudiar.
Explicó que de esos 129 confirmados con Ómicron, variante de mayor contagiosidad, pero menor virulencia, 95 son de nacionalidad cubana, pero no especificó cuántos contagios eran autóctonos o importados.
Ante la presencia de dicha variante del coronavirus en la Isla, a inicios de año el médico Daniel García Rivera, director del Laboratorio de Síntesis Química y Biomolecular y uno de los científicos vinculados a las vacunas cubanas Soberana 01 y 02, alertó en Facebook sobre el riesgo de mal gestionar la tregua dada por el SARS-CoV-2.
"Los datos muestran que una vez que se riegue vamos a tener cientos de miles de casos de Ómicron. Debe ser mucho más leve que con la Delta, eso es seguro, gracias a las vacunas y a la inmunidad de los convalecientes vacunados, pero va a ser fuerte de nuevo", presagió.
En otro comentario, advirtió que los nasobucos usados en la nación caribeña, si se está en un lugar cerrado y cerca de una persona infectada, no lograrán detener "un proyectil de precisión como es Ómicron".