De diez a 12 fallecidos que recibían a inicios de julio los cementerios de Guantánamo, la cifra aumentó hasta nueve veces en las últimas semanas. Esta situación obligó a extender las capacidades de sepulturas en tierra de la necrópolis de Santa Juana, en Manuel Tames, pero autoridades cubanas negaron que se tratara de fosas comunes. Sí admitieron la excavación en hectáreas específicas para fallecidos por enfermedades infectocontagiosas, publicó el portal oficial Cubadebate.
Iosbanys Fernández Fernández, director de Servicios Comunales en el territorio, dijo que en el caso del municipio de Guantánamo, antes del pico de contagios por Covid-19 fallecían de seis a ocho personas diariamente en todo el municipio.
A partir del 3 de julio, la provincia comenzó a tener elevadas cifras de casos positivos, "hubo un incremento de los fallecidos no solo con síntomas respiratorios, positivos, sospechosos y contactos de casos confirmados, sino de defunciones por otras causas", dijo.
El cementerio Santa Juana, mejor conocido como el cementerio de Manuel Tames, se encuentra a 14km de la ciudad cabecera. "Este cementerio fue escogido para los enterramientos, porque su homólogo en el municipio de Guantánamo se encuentra enclavado en el centro−oeste de la ciudad. A su alrededor hay una serie de asentamientos y viviendas que no permiten incrementar las capacidades. Además, buena parte de las bóvedas son privadas", dijo Fernández. Así, justificó que los pacientes fallecidos por Covid−19 fueran trasladados a ese otro municipio, pero negó el colapso de cementerios.
"El colapso fue en el tema de la transportación. La provincia cuenta con 29 carros fúnebres, de ellos solo se encuentran disponibles para el uso 17, debido a problemas con los neumáticos, baterías y reparación del motor. En este tercer rebrote del Covid−19 en la provincia, como ha ocurrido en otras, se movilizaron medios de transporte de empresas como Correos de Cuba, ETECSA y otros organismos estatales del territorio para el traslado de cadáveres.
"Esto ha sido una candela guapa", dijo Emilio, uno de los enterradores. Es uno de los veteranos con 11 años en el oficio. "Esto le duele a uno, yo nunca había visto algo así, tantos enterramientos en tan poco tiempo", dijo.
"Se tenía prevista una hectárea para enfermedades infectocontagiosas, pero como hubo pico de fallecidos, tuvimos que tomar tres hectáreas más para convertirlo en lugar de enterramiento", añadió. Por esta razón se pidió una retroexcavadora para facilitar el trabajo. La llegada de este equipo hizo surgir los rumores sobre fosas comunes.
Según el director de Comunales, "nunca ha sido intención del Gobierno de utilizar fosas comunes".
"El cementerio Santa Juana está enclavado en un terreno rocoso, donde la dureza del suelo hace muy difícil una excavación manual. Hubo que utilizar una retroexcavadora para cavar el espacio donde se inhumaron los fallecidos, pero cada uno está enterrado en una tumba personal en tierra", añadió.
"Los entierros se están realizando en fosas personales y cada cuerpo tiene una numeración que queda establecida por el Libro de Registro, donde se guardan los datos, nombre y apellidos, tomo, folio, número de la fosa y la hilera entre otros datos", dijo la administradora del Santa Juana, Marisel Terry Sierra.
"Se están realizando movimientos de tierra, la construcción del muro de la cerca perimetral, labores de jardinería, la confección y colocación de los monolitos de piedra elaborados por el Combinado de Materiales de la Construcción", agregó.
Los familiares de muertos por Covid-19 no pueden enterrarlos ni visitarlos. "De conjunto con el Cementerio de Guantánamo y la funeraria se les están entregando a los familiares el lugar de enterramiento de los fallecidos, así como el documentos que entrega el Registro Civil con el tomo y folio", señaló el reporte de Cubadebate.
Según el funcionario de Comunales, fuerzas constructoras están trabajando también en el Cementerio Nuevo de Guantánamo, ubicado a la salida para Santiago de Cuba.
"Esta inversión fue aprobada hace un año, pero ahora estamos agilizando la obra con el sistema Forza para la construcción de bóvedas y también se ha preparado un área para enterrar a los fallecidos por enfermedades infectocontagiosas, lo cual nos permite tener un área para defunciones por otras causas y por Covid−19", concluyó.
La ampliación de cementerios cubanos, muchos de los cuales sufren de abandono y precariedad desde hace décadas, se han visto obligados a realizar reformas y ampliación de capacidades para enterrar a los muertos por la pandemia, que pasa en estos momentos por su peor momento desde que se desencadenó.
Necrópolis en Madruga, Ciego de Ávila, Santa Clara y Cienfuegos, estas últimas muy afectadas por el coronavirus, también han extendido los enterramientos en tierra.
HDLGP ... en Cuba los bienes raíces de los cementerios murieron en 1959 ... la única manera que tienen los cubanos de tener panteones privados es comprándolos a antiguos propietarios, a familias largadas del país ... y no nos hagan hablar de todo el mercado negro de sepulturas en Cuba ...
Hay videos en la Internet de familiares explicando lo de las fosas comunes .... no tapen el sol con un dedo ...