El Gobierno de Cuba espera dar un impulso a la expansión de la televisión digital con norma china mediante la producción este año de 318.000 cajas decodificadoras, en el contexto de la pandemia del nuevo coronavirus y en medio de la crisis económica que padece la Isla.
En los talleres de la Empresa Industria Electrónica Comandante Camilo Cienfuegos, a las afueras de La Habana, operarios y técnicos han entregado unos 90.000 receptores digitales, que serán comercializados a través de cadenas de tiendas de Cuba.
El director de la Unidad Empresarial de Base de Producciones Electrodomésticas, Lázaro Campos, dijo a la agencia oficial china Xinhua que la mayoría de los componentes y piezas utilizados en el proceso de ensamblaje provienen de China, segundo socio comercial y principal proveedor de asistencia técnica a su aliado en el Caribe.
Campos, quien ha recibido capacitación por parte de especialistas chinos, supervisa la manufactura de las cajas decodificadoras y confía en que las familias puedan contar con el equipamiento necesario para recibir la señal digital cuando Cuba diga finalmente adiós a la televisión analógica.
El país lleva años intentando dejar atrás una tecnología ya obsoleta en la mayor parte del mundo. Sin embargo, los cubanos se quejan de la falta de estos dispositivos en la red de tiendas en la Isla. Una caja decodificadora alcanza los 4.000 pesos en el mercado negro cubano.
El reporte de Xinhua no precisa el costo de los nuevos equipos en producción, tampoco si se destinarán a la venta en dólares, como está haciendo el Gobierno cubano con una gran parte de los productos y servicios que comercializa, a la caza de divisas.
"Hay un intercambio de experiencias entre los especialistas chinos y cubanos. Nuestro objetivo es que la población pueda acceder a la señal digital terrestre DTMB que se transmite actualmente en nuestro país", añadió a Xinhua.
Como respaldo a este salto tecnológico, para finales de año se contempla terminar más de 32.000 televisores, entre ellos una parte se utilizará en el programa de teleclases en los centros escolares y el sector hotelero cubano. El medio no precisó la proporción que dedicará a las instalaciones turísticas.
A su vez, Nayta Pérez, quien se desempeña como gestora de calidad, revisa con control remoto en mano los parámetros de audio e imagen de los televisores de 32 y 43 pulgadas, poco antes del empaque para su posterior distribución.
"Revisamos la estética, el funcionamiento de las teclas, y se garantiza que el producto salga a la calle perfectamente. Es un trabajo de mucha importancia. Requiere de tiempo y concentración", precisó.
En tanto, el especialista Camilo Varona, de 48 años y quien lleva más de la mitad de su vida en dicho centro, expresó que este se ha beneficiado además con un laboratorio tecnológico donado por China, el cual permite el desarrollo de la investigación y la innovación en torno a la televisión digital.
"El intercambio con China ha sido muy productivo. Ya habíamos acometido diversas producciones en lo referente a la señal analógica, pero ahora esto se ha renovado", agregó.
La transición de la televisión analógica a la digital en Cuba inició en 2013, cuando alrededor de 45.000 hogares en La Habana recibieron cajas decodificadoras donadas por el Gobierno chino, en el contexto de la primera prueba realizada en la capital del país.
En la actualidad, unos 40 canales de alcance nacional, provincial y municipal emiten señales analógicas y digitales en Cuba, de acuerdo con datos del Instituto Cubano de Radio y Televisión.
Según medios oficiales, las señales de televisión digital y de alta definición cubren el 76% y el 45%, respectivamente, de la Isla.
Autoridades del sector de las telecomunicaciones en Cuba anunciaron a inicios de año que la televisión digital prevé alcanzar en 2021 zonas de silencio de la geografía cubana a partir de la instalación de nuevos transmisores.
La única/principal razón por la que el gobierno de Cuba optó por la norma china para su televisión digital terrestre en vez de la norma correspondiente de acuerdo a su localización (los dos países de La Española usan la misma norma que USA, Canadá y México) es que así se evitaría que alguien sintonizara televisoras de países vecinos. Así de sencillo. El daño que esa gente le sigue haciendo a nuestro país es "vigueta", por eso es que Canelo dice "somos continuidad".