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Desabastecimiento

'Hay gente en Cuba que por lo único que no ha muerto literalmente de hambre es por el pan'

Cubanos advierten de las consecuencias de los problemas con el suministro de harina.

La Habana
Un negocio priva.do en La Habana
Un negocio priva.do en La Habana Diario de Cuba

La vida de Fidelina Ponce, jubilada de 76 años de edad, sufrió un sobresalto cuando el periódico oficial capitalino Tribuna de La Habana anunció severas afectaciones en la venta de pan liberado. Para su dieta alimenticia el pan es esencial, porque su condición de salud la obliga a consumir seis raciones diarias de alimentos y, la cuota racionada, un pan de 80 gramos por consumidor, no alcanza para balancear su despensa en medio de la grave escasez de alimentos en la Isla.

"Se dice desde antaño que el pan es el único alimento común en la mesa del rico y del pobre, pero cuando le falta al pobre, este se muere de hambre", se quejó Ponce, vecina de la barriada de San Leopoldo, quien solo cuenta con su jubilación para vivir.

"Todos los días tengo que comprar cuatro panes más, pues de lo contrario no me alcanzarían los mandados una semana, y ya sabemos que en las tiendas no hay ni telarañas. Con esos panes me hago cuatro meriendas, más el almuercito y la comidita que suman mis seis raciones diarias. Ahora qué me hago si no habrá pan liberado en largo rato, y no tengo tampoco salud para estar cuatro o cinco horas en una cola sin garantías de que alcance para todos", añadió.

Según declaraciones de Julio Martínez Roque, coordinador de Objetivos y Programas del Gobierno habanero, la oferta diaria de pan liberado se reducirá aproximadamente un 30% a consecuencia de las afectaciones en la disponibilidad de harina de trigo. También disminuirá en un 50% la entrega de pan a la red gastronómica y a los organismos estatales. Este mismo funcionario precisó que las afectaciones podrían extenderé hasta julio.

"En conclusión, que habrá poco pan y mucho circo: una realidad que los cubanos de a pie conocemos bien", ironizó Yoan Peñalver Matos, padre de tres menores de edad que ejerce como vendedor ambulante de galletas y panes en Centro Habana.

"La otra cuestión, más allá de que la gente tendrá que abrirle otro hueco al cinto, es cómo vamos a sobrevivir y mantener a nuestras familias los que trabajamos como cuentapropistas con productos relacionados con harina. Cuando este Gobierno toma esas medidas de la noche a la mañana, y te las aplica con esa tranquilidad y descaro, te das cuenta que no les importamos ni un pepino. ¿De qué carajo vamos a vivir los pizzeros, los elaboradores de cake, o los que trabajamos de manera ambulante vendiendo panes?", fustigó Peñalver Matos.

Los habaneros entrevistados coincidieron en que, además del fastidio por otro alimento que se suma a la lista de la escasez, las justificaciones ofrecidas por las autoridades gubernamentales son "otra burla al pueblo".

Además de admitir que "el escenario económico" por el que atraviesa la Isla limita la cuota diaria de harina de trigo asignada a La Habana, el Gobierno capitalino culpó al "recrudecimiento del bloqueo comercial y financiero de los Estados Unidos" como principal obstáculo al "tremendo esfuerzo que realizan las autoridades del país para garantizar la alimentación del pueblo".

Una justificación que habaneras como Yoanka Milanés Buenaventura, licenciada en Historia, cuestionando ripostando que es la precariedad en la gestión de Gobierno la que "impide que un alimento tan básico como el pan" esté presente en la mesa de los trabajadores cubanos.

"Tendremos un circo a secas, y esa es la cuestión fundamental, porque Cuba, después del 59, siempre lleva acompañada la penuria con la consigna y con el cinismo de inventarse enemigos por todas partes. El pan es un símbolo para todos aquellos cubanos que recordamos cómo un mes después de desaparecer la harina de trigo Fidel Castro anunció que estábamos en 'Período Especial en Tiempos de Paz'. Escuchar que no hay pan es aterrador para los cubanos que dependemos de salarios estatales y no somos beneficiados por remesas familiares", añadió Milanés Buenaventura.

En el hogar de Evelio Iznaga y Dailin Arencibia, un matrimonio con dos hijos menores de edad y una adolescente, la noticia sobre una agudización del racionamiento del pan liberado fue una alerta roja. Evelio trabaja como elaborador de pizzas en el Cerro, y Dailin se encuentra interrupta desde hace dos meses tras un foco de Covid-19 en su centro de trabajo.

"El administrador de la pizzería ya nos advirtió que, si el asunto de la harina de trigo se pone peor, se verá obligado a prescindir de los dos elaboradores. Es decir, que me quedaré desempleado, con tres hijos que alimentar, confinados por la pandemia y sin saber cuánto durará esta situación. Los cubanos, si Díaz-Canel no se nivela, nos volveremos opositores por hambre".

Para Dailin no solo se trata de que su esposo quede desempleado, sino de que, además, el pan adquiere una dimensión más importante en familias que perciben bajos ingresos económicos.

"El almuerzo de muchos ancianos es un pan con lo que aparezca, y eso nadie me lo cuenta, lo veo todos los días. Gente que por el pan es por lo único que no se han muerto literalmente hambre. Familias como la nuestra, con menores y adolescentes que puedes mantener, entre almuerzo y comida, con una meriendita de pan con invento… En fin, que la base de todo para los cubanos jodidos no es la limonada (como dijo Díaz-Canel), es el pan", concluyó.

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3 comentarios

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Profile picture for user Peña Tico

No se pueden quejar, comerse un pan será como comerse un tamal

Desde que empezó a desparecer la comida, el pueblo resolvía con las croquetas Apollo y el pan con intriga. Ahora será pan de hierba y tajadas de aire.

¡¿N i v e l a r s e ...?! ¡¡TIENE QUE DESAPARECER!! ¡¡CUBA entera será OPOSITORA POR HAMBRE!!
De eso, no hay dudas. La HAMBRUNA será como un manto negro que caerá sobre el pueblo de Cuba... a corto plazo.