El Gobierno cubano recibió este miércoles el apoyo del partido político FARC, creado a partir de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, tras la acusación al régimen de la Isla de injerencia en Colombia.
"Como signatario del Acuerdo Final de Paz y presidente del partido FARC, quiero expresar mi solidaridad con el pueblo y el Gobierno de Cuba ante los recientes hechos. Colombia siempre estará agradecida por sus gestiones en busca de la paz y la solución negociada al conflicto", dijo Rodrigo Londoño, alias Timochenko, presidente del partido Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común (FARC), en Twitter.
Timochenko estuvo acompañado por Raúl Castro y otros dirigentes internacionales en 2016, cuando el entonces grupo ilegal armado FARC firmó el acuerdo de paz con el Gobierno de Juan Manuel Santos. La Habana acogió durante cuatro años las negociaciones entre ambas partes para dar fin al conflicto armado colombiano.
La revista Semana publicó este sábado un informe oficial, según el cual el Gobierno de "Cuba ejecuta una estrategia de injerencia en Colombia a través de la orientación de cubanos con cobertura diplomática en organizaciones sociales solidarias, la infiltración de programas de cooperación con autoridades locales y su financiación por medio del ELN (Ejército de Liberación Nacional)".
Al respecto, el partido FARC tachó la publicación del informe como "una verdadera provocación contra el embajador de Cuba, José Luis Ponce, y otros funcionarios de dicha embajada".
La acusación de injerencia cubana en Colombia es parte de "la ofensiva contra Cuba" en el país, dijo el comunicado del partido.
"Con este artículo, basado en los inconsistentes informes del presidente (Iván) Duque, se pretende la expulsión de la delegación cubana en Colombia", agregó.
El gobernador del departamento de Magdalena, Carlos Caicedo, dijo en Twitter que es "una estrategia mediática de sectores de ultraderecha que busca escalar la confrontación entre pueblos hermanos, alienta la política belicosa de (Donald) Trump y amenaza a sectores de la oposición en Colombia".
Desde Cuba, Miguel Díaz-Canel solo hizo referencia a la polémica en Colombia en un tuit, con una noticia del periódico estatal Juventud Rebelde. "Repudia Movimiento Colombiano de Solidaridad con Cuba calumnias contra la Isla caribeña", dijo.
El citado medio estatal publicó la respuesta del Movimiento Colombiano de Solidaridad con Cuba, sin hacer mención a la presunta injerencia del Gobierno de la Isla en Colombia. Juventud Rebelde redujo el texto de Semana a "calumniosos señalamientos formulados, al parecer, por los organismos de inteligencia del Estado colombiano".
El informe dijo que "el Movimiento Colombiano de Solidaridad con Cuba es 'usado' por cubanos para desarrollar actividades de cabildeo. Ejemplo: la firma de acuerdos de cooperación con autoridades locales colombianas, labores de diseminación de campañas mediáticas a favor de la Isla y apoyo social a manifestaciones en contra de la estabilidad nacional".
El presidente de Colombia dijo que "no permitiremos que en nuestro país tengan presencia funcionarios que salgan de sus competencias reguladas por la Convención de Viena sobre las relaciones entre los Estados". Duque advirtió a los diplomáticos cubanos que podrían ser expulsados por injerencia.
¡Qué bueno! Eso le facilita a BIDEN dejar a Cuba en la lista negra de patrocinadores del terrorismo.