La "Tarea Ordenamiento", que es el nombre que le ha dado el Gobierno cubano al proceso de unificación monetaria y cambiaria, "destrabará una parte importante de los problemas de la economía", dijo Miguel Díaz-Canel en la Mesa Redonda del jueves, pero la escasa información genera dudas entre economistas.
"Vamos a hacerlo", insistió Díaz-Canel, y también dijo que "vamos a suprimir parcialmente subsidios indebidos" en un proceso que incluirá una reforma salarial, de pensiones y de precios.
Para el economista cubano Pedro Monreal, el énfasis en la llamada Tarea Ordenamiento "parece reflejar una preferencia de opciones para reformar una economía centralmente planificada en condiciones de desbalances macroeconómicos".
"La situación cubana parece reproducir el usual atolladero al que se han enfrentado todas las reformas de economía planificada", consideró Monreal en una reflexión en su cuenta en Twitter en la que se preguntó si "¿debe hacerse primero una reforma de precios o una reforma de la empresa estatal?"
En opinión del analista, "la información parcial de la Mesa Redonda parece indicar que se apuesta a utilizar una modificación de precios relativos (combinando devaluación, fin de subsidios, y aumento de salarios, pensiones y precios) para 'ajustar' la economía".
A Monreal le parece "que se posterga, en lo inmediato, una reforma integral porque habría que ajustar primero para luego poder desregular precios, que sería el componente clave de una transición desde el control administrativo hacia una regulación descentralizada mediante el mercado".
"No quedarían claros dos importantes aspectos de la secuencia: la reforma sustantiva de la empresa estatal (no meramente cambios menores) y el establecimiento de un sector empresarial privado y cooperativo que facilite la reforma de la empresa estatal", sostuvo.
Por su parte, el economista Elías Amor, consideró que las autoridades cubanas "van por libre en política económica" y "se olvidan de lo más importante, el marco jurídico de derechos de propiedad, la acumulación de riqueza, la generación y reparto de beneficios. Eso es esencial para cualquier 'ordenamiento'. Nadie trabaja gratis".
"No hacen caso de recomendaciones de organismos internacionales y se dedican a elaborar lineamientos que luego incumplen. Los cubanos pagan esa pésima gestión e irresponsable", añadió.
"Miedo da cuando todo lo que quieren hacer en materia monetaria lo refieren a una 'tarea de ordenamiento'", dijo Amor en un análisis en su blog Cuba Economía de las informaciones compartidas en la Mesa Redonda del jueves.
Por otra parte, señaló que "ese aviso de que 'nadie tiene que tener preocupación con sus cuentas, sean en MN, CUC, MLC, incluidos nuestros colaboradores' indica que existe temor en amplios sectores de la población por la pérdida de los activos".
"No conviene olvidar que, en Cuba, bajo el mismo régimen político actual, se desarrolló el primer 'corralito' financiero de América Latina, ejecutado por el Che Guevara y nada indica que no se vuelva a producir otra confiscación de depósitos bancarios en Cuba. Hacen bien los cubanos en desconfiar de su Gobierno y los bancos", añadió.
En opinión del economista "los espectadores (de la Mesa Redonda) se quedaron igual que al principio, o incluso, peor con estas explicaciones" de la unificación monetaria y política cambiaria.
Díaz-Canel cerró el tema diciendo que "en próximos días, se dará la información completa de este complejo proceso de alcance estratégico".
Con respecto a la promesa del gobernante de que "si alguien queda en situación de vulnerabilidad con las nuevas medidas se le ayudará", Elías Amor sostuvo: "Que diga cómo va a ayudar a los cubanos sin dólares para comprar en tiendas en MLC".