El opositor cubano enfermo de cáncer Ramón Arboláez, su esposa, Yaneisy Santana, y sus dos hijos menores de edad, Melany y Emanuel, ya están en Estados Unidos, pero recluidos en el centro de detención para inmigrantes de Yuma, Arizona.
Desesperados al ver que el cáncer de Arboláez continua avanzando, los miembros de la familia cruzaron la frontera hacia Estados Unidos de forma irregular el 6 de octubre. En el grupo iban también otra hija de Ramón, Alys Arboláez, con ocho meses de gestación, y su esposo, Yaidel Prada. Ambos fueron sin embargo entregados por las autoridades estadounidenses a oficiales del Instituto Nacional de Migración de México.
De Ramón Arboláez, su esposa y sus dos hijos menores no se supo durante 24 horas. La abogada Laura Jiménez logró localizarlos y presentar los documentos que la acreditan como apoderada.
Jiménez, del bufete del abogado Willy Allen, de Miami, precisó a DIARIO DE CUBA que "Ramón Arboláez y su familia cruzaron la frontera de Estados Unidos por Arizona, se entregaron a la patrulla fronteriza y están siendo procesados en el centro de Yuma, Arizona".
Según la periodista Maite Luna, Alys Arboláez relató que Ramón fue llevado a un hospital después suplicar ayuda durante horas en ese centro de detención migratoria.
Jiménez afirmó que este 7 de octubre el opositor tuvo "una entrevista sobre 'miedo creíble' para determinar si los regresan a México o si pueden esperar en Estados Unidos, pendientes de una liberación bajo Parole o un caso de asilo".
Jiménez lleva el caso de Arboláez desde principios de 2020.
Maite Luna, periodista de origen cubano, se ha dedicado a dar visibilidad a la situación de este opositor, que sufre un cáncer de lengua extendido ya a su garganta y su mandíbula.
"Estoy muy agradecida con todas las personas que han apoyado a Ramón Arboláez (…) con sus donaciones y su preocupación", dijo Luna.
"Mi agradecimiento es casi directamente proporcional a la decepción y la vergüenza que siento ante la indolencia de aquellos que se han quedado cruzados de brazos, conociendo muy de cerca la situación tan terrible que enfrenta. No obstante, a todos, sin distinción alguna, que Dios los bendiga, aportan claridad a mis percepciones de la verdad y la justicia", añadió.
Maite Luna ha tocado puerta de políticos y ONG internacionales y suplicando ayuda para el opositor cubano. También ha liderado la campaña Salvemos a Arboláez, que ha servido para ayudar a la alimentación de la familia y a adquirir los medicamentos que Ramón necesita.
Un caso real para visa humanitaria. ¿A qué esperan? ¿A que muera en un centro de detención? Un poco de humanidad, por favor.
Debe darles una visa aunque sea humanitaria.