Una campaña para recaudar fondos necesarios para el tratamiento del opositor cubano Ramón Arboláez en EEUU se mantiene activa en la plataforma Go Fundme, después de que en julio pasado Washington negara la entrada al emigrante, enfermo de un cáncer de lengua y varado en México con su familia.
Las autoridades de inmigración de EEUU exigen que se cumplan todos los requisitos para otorgar la visa humanitaria y que pueda recibir el tratamiento médico que salvará su vida.
Entre las exigencias de las autoridades está el denominado affidavit de apoyo económico, un requerimiento difícil de materializar en estos momentos, de ahí la recaudación a la que actualmente se han sumado 140 donantes y busca llegar a los 10.000 dólares.
De acuerdo con los promotores de la campaña, Arboláez debe asumir costos de quimioterapia, radioterapia, pruebas médicas y hospitalización.
Esta semana el senador cubanoamericano Marco Rubio se sumó a las gestiones para intentar conseguir el otorgamiento de la visa humanitaria para el opositor.
"La oficina del senador Marco Rubio ha estado en contacto con USCIS [Servicio de Ciudadanía e Inmigración de los Estados Unidos] en nombre del señor Arboláez para tratar de acelerar su solicitud de parole humanitario", indicó un mensaje del despacho del legislador.
De esta forma, el senador Rubio se unió a las iniciativas tomadas por su homólogo republicano Rick Scott y por el congresista Mario Díaz-Balart, junto al abogado Willy Allen, con el propósito de que Arboláez pueda conseguir la debida atención para su delicado estado de salud.
La esposa de Arboláez, Yaneisy Santana, aseguró a Diario Las Américas que ya a su compañero apenas se le entiende lo que habla "por el tumor que tiene en la boca".
La pareja, junto a sus dos hijos, se encuentra en el puente fronterizo que conecta a las ciudades de Reynosa, México, y McAllen, EEUU. "Aquí sobrevivimos gracias a la ayuda de nuestros hermanos en el exilio que saben de nuestra situación", dijo Santana.
La mujer aseguró que la salud de su esposo "sigue empeorando" mientras este no recibe atención médica, por lo que ya el cáncer "ha abarcado la mandíbula y parte de los ganglios".
Por ello, dijo, "no es un capricho nuestro ir a EEUU, es una necesidad urgente porque él lo necesita para salvar su vida y estar con nosotros".
DIARIO DE CUBA estuvo en contacto con Arboláez y su familia hace poco más de una semana. En esa ocasión, si bien la periodista Maite Luna y un grupo de abogados habían conseguido las vías para canalizar el pago de la atención especializada y los viáticos del cubano, con vistas a ser atendido en el hospital Jackson Memorial de Miami, las autoridades migratorias estadounidenses no respondieron a tiempo a la solicitud de visa humanitaria. De hecho, no han respondido aún.
Arboláez perteneció en Cuba a la Coalición Central Opositora y al Foro Antitotalitario Unido (FANTU). Tanto él como su familia sufrieron persecución, según ha relatado. Asegura que fue detenido decenas de veces por sus actividades opositoras. Acusa al régimen de haberlo despojado de su vivienda en Santa Clara y obligado a abandonar el país junto a su esposa y sus hijos Melany y Emanuel David.
Ramón Arboláez, su esposa e hijos salieron de Cuba rumbo a Trinidad y Tobago en noviembre de 2016. Formaron parte del grupo de cubanos que estuvieron más de un año varados en ese país. Allí sufrieron también detenciones, maltratos y hambre, a pesar de ser reconocidos como refugiados por la ACNUR.
El Gobierno trinitario nunca les devolvió los pasaportes.
El grupo atravesó Venezuela en enero de 2019 y, en abril del mismo año, cruzaron la peligrosa selva del Darién. Llegaron a México en agosto de 2019 y en octubre al opositor le fue diagnosticado un cáncer muy agresivo en la base de la lengua que ha ido extendiéndose.