Una sesión extraordinaria del Consejo de Ministros presentó el miércoles el Plan de medidas que se implementará en Cuba en las tres fases que tendrá la primera etapa de la recuperación de la pandemia, según replicaron medios oficiales, que solo dieron un resumen, sin fechas establecidas para cada una.
El primer ministro, Manuel Marrero Cruz, presentó el plan como una estrategia para "regresar a la normalidad en la vida del país, de manera gradual y asimétrica; evitar un rebrote (del nuevo coronavirus) y desarrollar las capacidades para enfrentarlo; además de reducir las vulnerabilidades como consecuencia de la enfermedad".
Las medidas diseñadas abarcan varios ámbitos, entre ellos los relativos a salud, turismo, cuestiones laborales y tributarias, comercio exterior e interior, transporte, educación, deporte y cultura. Además, han previsto las actividades durante el verano.
Marrero Cruz dijo que "no va a haber una apertura brusca en la primera fase, aunque reinician ya varias actividades". De manera gradual se irán ampliando y flexibilizando servicios en cada uno de los momentos que se han trazado.
Entre las medidas sanitarias, que este jueves la Mesa Redonda será la encargada de detallar, mencionó garantizar el distanciamiento físico y el uso obligatorio del nasobuco en todas las actividades de la primera fase. A partir de la segunda, solo deberá utilizarse en los lugares públicos donde exista concentración de personas.
Mientras, permanecerá en todo momento la prohibición de entrada a los centros laborales de trabajadores con síntomas respiratorios; la protección a los que se exponen al contagio en áreas de riesgo, y la desinfección de manos y superficies.
Explicó que, con el reinicio del turismo internacional, se aplicará una prueba PCR a cada visitante y se le tomará la temperatura. En tanto, en los hoteles se establecerá una vigilancia clínico-epidemiológica, por un equipo de especialistas.
Precisamente, respecto a este sector, detalló que en la primera fase se abrirá solo con el turismo local. En una segunda se iniciará el internacional, de forma gradual y en función de la demanda, únicamente en la cayería norte y sur del archipiélago.
En esas instalaciones, precisó, se limitará la ocupación y también la capacidad en los servicios gastronómicos y recreativos. La renta de autos y excursiones, en un primer momento, estará limitada al interior de los cayos.
Funcionarios del ministerio de Turismo explicaron que, "por su complejidad epidemiológica, La Habana no está contemplada entre los territorios que darán inicio a la reapertura de la actividad turística en el país", según publicó el portal oficial CubaSí.
A la par, los Campismos Populares abrirán para el verano, con un protocolo de medidas sanitarias propias.
En la reunión con sus ministros, Miguel Díaz-Canel celebró que los indicadores "van apuntando al control de la epidemia en Cuba".
"Volvemos al momento en que se suceden menos ingresos que altas en el sistema de Salud, disminuyen los eventos activos y también los casos positivos por día. Casi todos los municipios y provincias llevan prácticamente un mes sin incidencias y, por lo tanto, están en condiciones de retornar a la normalidad", dijo.
Para el gobernante, "las medidas de desescalamiento han sido bien pensadas y tienen indicadores planteados por los expertos de Salud, que nos permiten evaluar el comportamiento de la enfermedad y sus tasas de incidencia".
Obvio. Turismo excluyente a favor de los EXTRANJEROS. Un pretexto para CERRAR AUN MÁS LAS INSTALACIONES TURÍSTICAS DE IMPORTANCIA al cubano. VARADERO no será la excepción porque en su entrada tiene un puente que desde hace muchos años es un IMPORTANTE PUNTO DE CONTROL DE LA POLICÍA.