Zoila Rosa Hernández García, una cubana de 89 años, está desaparecida en La Habana después que fuera trasladada desde el Hogar de Ancianos donde se encontraba a un hospital por sospechas de Covid-19 y de allí enviada, sin contar con su familia, a un centro de cuarentena.
De acuerdo con el nieto de la anciana, Jorge Félix Díaz, quien pidió ayuda para localizarla a través de su muro de Facebook, Hernández García fue llevada en ambulancia el jueves 23 de abril "desde el Hogar de Ancianos Hermanas Giralt de Marianao con destino al Hospital Militar Finlay como un posible caso de Covid-19."
"En este hospital fue atendida y remitida para otro hospital, según el doctor que la atendió, sin un diagnóstico certero. Sin el consentimiento de sus familiares ni haber contactado a los mismos, ni tampoco haber reportado al Hogar de Ancianos, la madrugada del 24 fue trasladada por una ambulancia del sistema SIUM a uno de los hospitales dedicados a la cuarentena de pacientes con Covid-19, sin saber si era positivo" a la enfermedad, narró.
"Desde entonces no se ha sabido nada más de ella. Está perdida y ninguna institución responde ante su pérdida. Nadie sabe dónde se encuentra, ni el puesto de mando del Covid-19, ni el puesto de mando del Gobierno, ni el puesto de mando de Salud Pública", denunció.
De acuerdo con el familiar de la anciana, han llamado a todos los hospitales de la Habana, pero "nadie la localiza, se han realizado tres reportes a la Policía Nacional Revolucionaria y no hacen nada. Las autoridades están ignorando el caso."
DIARIO DE CUBA conversó con Yamilé Gómez, hija de la señora desaparecida, y esta explicó que se encontraba haciendo una nueva denuncia en una estación policial para reclamar respuesta a este caso.
La denuncia generó una ola de solidaridad en redes sociales, donde las familiares compartieron fotos y una imagen del carnet de identidad de Zoila Rosa.
El dramaturgo Yunior García Aguilera apoyó el reclamo: "Acabo de escribir en Twitter al MINSAP y al ministro. Espero que respondan", escribió.
Pobre señora. Solita en un hogar de ancianos y ahora, perdida.