Esta semana iniciamos nuestro recorrido por redes con un llamado de atención hecho por cubanos dentro y fuera de la Isla. Se trata del tuittazo #RespondePorAriel, convocado en solidaridad con el científico cubano Ariel Ruiz Urquiola, quien recientemente acusó al régimen cubano de infectarlo con VIH mientras estuvo encarcelado.
A la acción, dirigida a Díaz-Canel, se sumaron muchos tuiteros. El biólogo Oscar Casanella escribió: "#RespondePorAriel Responde por el crimen cometido contra Ariel Ruiz Urquiola. Miguel Diaz Canel @DiazCanelB responde y procesa legalmente a los responsables de inocularle VIH a mi amigo. No más eliminación física de ciudadanos críticos a la dictadura".
"No hay gran diferencia entre un asesinato y el hecho de inocularle el virus del sida a una persona por vía intravenosa", señala Casanella en un vídeo en Facebook.
"¿Quién #RespondePorAriel? La dignidad se respeta, no se infesta", escribe en Twitter el opositor Manuel Cuesta Mórua.
Según tuitea la periodista independiente Iliana Hernández, con datos proporcionados por la activista Liu Santiesteban, en la convocatoria participaron alrededor de 500 tuiteros, Díaz-Canel recibió casi 3.000 menciones y el alcance del tuittazo fue de 4,6 millones de personas aproximadamente.
De película
El Festival de Cine de La Habana se acabó, pero los memes se quedaron. Algunos de ellos ironizan sobre política y los debates entre artistas en las redes. Uno de ellos es un "cartel" que anuncia el supuesto filme El silencio de los corderos, donde el "cordero protagónico" es el cantante Alexander Delgado, de Gente de Zona, y el "cordero secundario", el también músico Descemer Bueno.
"La conmovedora historia de los guapos que no hablan de política", reza el subtítulo de Producciones Villa Marista.
El meme fue posteado en Facebook Yosbel Ramos Suárez. "Yo sí hablo de política, porque soy cubano, por que mi pueblo sufre, aunque no proteste, porque soy libre, o al menos así me siento y lo creo, porque me da la gana y es mi derecho", escribió junto a la imagen.
El dilema de la comida
Queremos cerrar este recorrido con el tema candente de la alimentación. ¿De dónde vienen los productos que se venden en las tiendas en divisas? Un usuario diserta sobre el tema en Twitter.
"Para los idiotas que repiten que Cuba no puede comprar en el mercado mundial: Algunos productos importados que se ven (si no están en falta) en las tiendas de Cuba. Papas fritas, de China. Leche condensada, de Lituania. Esparadrapo, de España. Galletas Saladix, de Argentina", dice @Cemi_Holding en un hilo en Twitter donde acompaña su comentario con fotos de los productos.
"Los precios de estos productos, importados por el Gobierno cubano, son inalcanzables para los salarios miserables que paga el Estado a los trabajadores. El sistema de economía socialista no funciona, excepto en los libros y en la mente de algunos ilusos y crédulos", acota.
"La miseria de #Cuba es por culpa de la dictadura, no por el 'bloqueo'. El Estado cubano puede importar de todo: Lámparas Ike Lite, diseñadas y producidas en los EEUU. Juguetes chinos. Queso Pecorino Romano Dop, de Italia. Spaguetti Noglut, de la compañía Santiveri, de España", señala el tuitero y pone ejemplos gráficos.
En los tuits aparecen numerosas marcas de diversos países. Según el tuitero "el Gobierno cubano hace negocios con unas 3.000 compañías de todo el mundo", muchas de ellas mencionadas en su hilo.
Sumado a esto, esta semana ha circulado un vídeo que dejó estupefactos a los internautas cubanos. Se trata de un vídeo amateur captado en una tienda en divisas de Matanzas donde los ratones corren por encima de la mercancía a la venta.
"Quizás los ratones son agentes de la CIA o del FBI jejejeje. Pues esa es la excusa que usan siempre", bromea un comentarista en Facebook.
Lamentablemente muchos comentan que es algo habitual en las tiendas cubanas.
