Unas 1.200 viviendas fueron afectadas en Pinar del Río por el huracán Michael, según una información, aún preliminar, ofrecida en una reunión del Gobierno en Pinar del Río, recogió el periódico oficial Guerrillero.
Las lluvias asociadas al fenómeno inundaron zonas como El Vizcaíno, en la carretera a San Juan y Martínez, la comunidad Briones Montoto, Las Ovas, Las Canas y en La Coloma, donde se registraron penetraciones del mar.
Todavía el martes más del 80% del territorio estaba sin energía eléctrica y algunos municipios como Sandino, San Juan, San Luis y Viñales, solo tienen activados grupos electrógenos para mantener servicios básicos de salud, la elaboración de alimentos y bombeo de agua.
La capital provincial y el municipio Los Palacios presentaban la situación más favorable, los que enfrentan la situación más grave son San Juan, San Luis y Viñales. En ese último tampoco había suministro de agua a la población, porque la subida del nivel en la fuente de abasto impedía la activación del sistema.
Desde otras provincias se han tenido que trasladar pipas para reforzar la distribución con estos medios en los territorios de Minas de Matahambre y Mantua.
Guane, en la zona de Isabel Rubio, permanecía incomunicada en la tarde del martes, por la crecida del río Cuyaguateje, razón por la cual fueron evacuadas 779 personas hacia casas de familiares y amigos.
Según los vecinos de este lugar, ni cuando el ciclón Alberto la cota de las aguas había alcanzado los 8,72 metros, ni tampoco se había presenciado tanta rapidez en el aumento de su volumen.
En el sector de la pesca los daños de mayor envergadura se concentran en los muelles de La Coloma, Boca de Galafre y Cortés, aunque todavía no se ha llegado hasta los centros de acopio, por lo cual es presumible que estos tengan serias afectaciones.
Por otra parte, el Combinado Lácteo requiere de más de 3.000 metros de manto para techos y los vientos levantaron 200 fibras de sus instalaciones.