Pasajeros de un vuelo chárter La Habana-Miami de la compañía Easter estuvieron tres horas retenidos en el Aeropuerto Internacional José Martí el pasado sábado después de que denunciaran un presunto robo de trabajadores de la instalación en equipajes de otro avión en la misma pista.
Dos de estos pasajeros, George Luis Castiñeira y María Figueroa, aseguraron a DIARIO DE CUBA haber visto cómo los encargados de bajar el equipaje sustraían pertenencias de las maletas.
Varios pasajeros grabaron con sus teléfonos celulares el incidente y, junto a la tripulación, denunciaron lo visto. El resultado, afirman, fue que intentaran hacerlos bajar del avión y los acusaran de "difamar".
"Estábamos abordando el avión y la gente que iba en el ala izquierda empezó a decir que los aduaneros estaban traqueteando maletas de otro vuelo chárter que acababa de llegar", relató Figueroa. "La gente decía 'mira como están robando, mira como se guardan las cosas'. Yo me acerqué a la ventana, saqué mi celular y empecé a grabar también".
Figueroa añadió que varios pasajeros fueron a comentarle a la tripulación lo que habían visto. El piloto decidió transmitírselo a las autoridades aeroportuarias que atendían su vuelo.
"Empezó a llegar más gente de la Aduana, nos dijeron mentirosos, descarados, que estábamos difamando, calumniando al aeropuerto y sus trabajadores", aseguró Figueroa.
"Todos están metidos en el robo", consideró Castiñeira.
Según Figueroa, los funcionarios del aeropuerto pidieron que les dejaran ver los vídeos. "Yo se los enseñé y me dijeron 'no, esto es una equivocación', les respondí: '¿cómo me van a decir que es una equivocación si les estoy enseñando el vídeo'".
"Somos muchos los testigos de lo que pasó y tenemos pruebas", dijo Figueroa. Calculó que unas 40 personas presenciaron el incidente.
"Vimos a uno que le tiró unas piezas a otro y este las escondió como en un bolsito. Otro iba separando las cosas dentro del mismo avión", afirmó la joven, una estudiante universitaria nacida en Perú, hija de madre cubana y padre argentino, que viaja con pasaporte estadounidense.
Catiñeira dijo que vio a uno de los empleados meterse en el pantalón del uniforme artículos sustraídos de los equipajes.
"Una de las maletas, como no la pudieron cerrar, la dejaron caer abierta por la estera", señaló Figueroa.
Tanto Catiñeira como Figueroa aseguraron que, ante las evidencias en su contra, los agentes de la Aduana intentaron hacer bajar a los pasajeros y llegaron a sacar los equipajes del avión de Easter. También intentaron hacerse con los celulares de viajeros.
"Vamos a bajar el avión entero", se escucha decir a un funcionario en uno de los vídeos.
"La gente entró en pánico, empezó a llorar, tenían miedo de que nos fueran a dejar presos allá", relató Figueroa.
"Uno de ellos me dijo 'tú te vas a quedar preso'", apuntó Castiñeira, quien vive desde hace tres años de Miami, realiza trabajos de mantenimiento y cuya familia, incluidos hijos y nietos, vive en Holguín.
Figueroa afirmó que los funcionarios se empecinaron en bajar a Castiñeira del avión porque fue uno de los pasajeros que más los criticó.
"Son unos descarados y ya yo estoy muy cansado", explicó Castiñeira a DIARIO DE CUBA. Agregó que un viaje anterior su equipaje llegó a la Isla sin algunas de sus pertenencias.
Cuando los empleados del aeropuerto intentaron hacer bajar a Castiñeira, "el piloto dijo que no, que él regresaba para Miami con su tripulación y todos sus pasajeros, que allí no se quedaba nadie", contó Figueroa. "Nos dijo que no tuviéramos miedo, pero que no nos bajáramos del avión porque dentro estábamos protegidos por el hecho de estar en territorio estadounidense".
"El capitán y la tripulación se portaron muy bien, nos defendieron", coincidió Castiñeira.
"No nos llevaron y nos hicieron más porque la tripulación y el piloto dieron la cara por nosotros. Si no llega a ser por el piloto, tal vez estaríamos todos presos en Cuba", insistió Figueroa. Añadió que el piloto es estadounidense y pidió a los pasajeros que le enviaran los vídeos grabados para hacerlos llegar a sus superiores.
"Si los vuelos van a aumentar, esto no puede estar pasando", dijo la joven.
Los dos pasajeros expresaron temor. "Tengo miedo por mi familia en Cuba", dijo Castiñeira.
Finalmente, las autoridades aeroportuarias permitieron la salida del vuelo con todos sus pasajeros y sus equipajes, señalaron ambos.