El pasado jueves la revista Temas cerró su temporada de debates polémicos en el espacio "Último Jueves", que cada mes se celebra en la sala "Fresa y Chocolate" del ICAIC, en La Habana. El encuentro celebró también un nuevo aniversario de la revista con la asombrosa cifra de casi 200 participantes del público.
Bajo el título "Viaje al centro del modelo", especialistas y representantes de la sociedad civil encararon y analizaron la actual situación económica y el modelo socialista cubano.
Participaban en la mesa José Luis Rodríguez, exministro de Economía y Planificación durante el Gobierno de Fidel Castro; Martha Deus, empresaria independiente y representante de Deus Expertos Contables; Reinaldo Torres, investigador del Centro de Estudios de la Economía Cubana; así como Lázaro Toirac, Ariel Terrero y Raúl Cruz.
Los panelistas coincidieron en su perspectiva crítica a la hora de calificar el modelo económico y social nacional como un fracaso ante el cual es necesario tomar medidas que intenten revitalizar la malograda economía de la Isla, sobre todo a partir de los cambios operados durante los últimos meses.
Para José Luis Rodríguez algunas de las razones que socavan la marcha del proceso económico en Cuba apuntan hacia la incomprensión de las leyes del mercado que intenta regularse con medidas administrativas antes que económicas; las deficiencias en las acciones que regulan la planificación centralizada y maniatan el desempeño de las denominadas empresas estatales socialistas; y la prevalencia de un mercado imperfecto que opera sobre la base de restricciones gubernamentales.
Se trata, a su juicio, de un sistema de dirección plagado de medidas de control, y no de acciones que orientan el desarrollo económico a gran escala.
Para Martha Deus, esas restricciones laceran no solo el desempeño del sector estatal, sino también del privado. La carencia de una ley de empresas que fomente el crecimiento y la inversión nacional son algunas de las causas que impiden la inserción exitosa del cuentapropismo en la economía cubana, así como las barreras que imponen el laboreo con tres monedas en las relaciones de compraventa, tanto en el comercio mayorista como en el minorista.
En Cuba ocurre el fenómeno de la operación con varias licencias, en el caso del cuentapropismo, que, en tanto autorizan la ejecución de determinadas actividades económicas, al mismo tiempo limitan y obstaculizan el ejercicio de otras tan vitales como, por ejemplo, la posibilidad de importar materias primas y otros insumos con los cuales la actividad comercial en el sector privado pudiera verse privilegiada.
Reinaldo Torres resaltó la demora en la discusión de los temas relacionados con el modelo económico cubano y su reactualización que, en estos momentos, a su juicio, persiste en una percepción determinista del proceso, sobre todo en cuanto al rol que deben desempeñar los actores económicos.
Según él, se trata de un modelo que tiene un respaldo legal, con la nueva Constitución, pero que no se acaba de articular, de concretar. En este sentido, la creación de nuevas estructuras a nivel micro y macro en la política social y económica cubana pasan por el tamiz de una burocracia que tiende a entorpecer el proceso. A eso se suma la inexistencia de un marco legal que avale el funcionamiento de las llamadas empresas estatales socialistas.
A criterio de Torres, no se vislumbra para esto una solución a largo, mediano o corto plazo. Los cubanos tienden a un sobreoptimismo esperanzador con la unificación monetaria pero ese no es el único camino, acotó.
Los panelistas, como el público presente, concordaron en señalar que existe para el sector privado un marco legal ineficiente y que sus problemáticas en sentido general son comunes a las del nivel estatal.
Por otra parte, resaltaron las distorsiones y disparidades entre las leyes y la realidad del país, al menos en materia económica. En tanto, es visible la reticencia al reconocimiento de políticas fracasadas que todavía se aplican por parte del Gobierno, y ello no solo genera el malestar popular, sino el éxodo de profesionales jóvenes y no tan jóvenes como vía para escapar de la tensa realidad del país, señaló Jorge Triana, entre los asistentes al encuentro.
La prevalencia de un Estado extorsionador frente a un mercado desestabilizado, en el vórtice de un modelo económico completamente caótico; el hermetismo en los medios oficiales respecto a la discusión de estas problemáticas, unido a un triunfalismo pernicioso que celebra un crecimiento anual que en muchos casos no sobrepasa el 1% de crecimiento de su PIB; el descontento con la reciente dolarización de la economía; así como la enajenación de los trabajadores en el sector estatal, que desmitifica la falsa creencia de que son dueños de los medios de producción; la necesidad de exigir mayor velocidad en los cambios y la censura contra economistas, entre otros criterios, dinamitaron el debate de panelistas y público en general en esta edición del "Último Jueves".
// Es lo que sabemos //
- - El castrismo es maaaalo, maaaalo, maaaalo.
Asi es la cosa, para poner una fabrica de churros en Cuba , primero existen estos encuentros "intelectuales", porque para hacer churros hace falta un "analisis" filosofico del churro como objeto de estudio; despues vienen las discusiones en el "Parlamento", decretos de leyes donde determinan que el churro para que sea verdaderamente legal a de salir de la nada; despues bajan ese proyecto a las "masas" , no las de carne de puerco , las otras masas inertes, y despues . . . . . . . puedo seguir estirando esto todo lo que usted quiera ; pero algo si es seguro- Usted no va a ver ni un churro
Falto el paso de la "consulta popular" para preguntarle a las masas la mejor manera de comercializar los churros: a saber, todos los factores del CDR presentes, el jefe de sector y 5 tipos que nadie conoce, pero por el porte y aspecto son segurosos.
Que a nadie se le ocurra citar a Nestle ni otras debilidades ideologicas...
Le faltó agregar un concurso de churreros a probar cuales son los mejores,
seguramente gane el churro de moringa frito con agua
Supongamos, repito, supongamos que todo eso es cierto, que es un buen análisis de la realidad cubana, entonces, 1) ¿qué impacto tuvo esa discusión en las decisiones que el régimen debiera adoptar para solucionar esos problemas? 2) si después de una constitución nueva, y de un aparato nuevo de gobierno, la situación es tan caótica, ¿no es hora --y hace rato-- de hablar de un nuevo régimen de gobierno allí?; 3) ¿alguien pudo describir "el modelo"? porque pienso que ese engendro no hay quién lo entienda excepto cuando se explica la permanencia en el poder de cuatro viejos y unos cuantos descarados; y final, ¿para qué sirven esas discusiones si no es para mantenerles el salario a los de Temas, y entretener al público con catarsis?
Ana, esas charlas de los jueves estuvieron suspendidas un buen tiempo, porque a alguien de la cupula le daban picazon. No se por que volvieron a tolerarlas, pero creo que los tiros van por dar una microvalvula de presion y dejar a dos o tres intelectuales hacer catarsis.
Estas actividades no tienen repercucion ni divulgacion.
Los que disponen sobre economia continuan en su torre de marfil, ajenos a todo lo que huela a cambio. Recuerda que el "somos continuidad" vale para todo...
ibíd. Lo mismo que dije en el articulo sobre "la economía ideal".