El equipo de Alexei Navalni, el opositor que murió este viernes en la prisión donde extinguía una pena de 30 años de privación de libertad, acusó a las autoridades de Rusia de no entregar el cuerpo para poder cubrir sus huellas.
" Es evidente que los asesinos quieren cubrir sus huellas y por eso no entregan el cuerpo de Alexéi, ocultándoselo incluso a su madre", afirmó el equipo de Navalni en una publicación de Telegram citada por AFP.
Las autoridades rusas no han permitido que ni siquiera la madre del abogado y político vea el cuerpo. El argumento para impedírselo ha sido que todavía no ha sido determinada la causa de la muerte.
La portavoz del difunto, Kira Yarmish, afirmó que los investigadores dijeron que los resultados de un nuevo examen al que se someterá el cadáver no estarán disponibles hasta la próxima semana.
Este viernes, la agencia estatal rusa RIA Novosti informó que Navalni, de 47 años, murió en la prisión ártica en la que estaba recluido.
El opositor se sintió mal después de una caminata y casi inmediatamente perdió el conocimiento, indicó el Servicio Penitenciario Federal del Distrito Autónomo de Yamal-Nenets.
Según la nota del servicio penitenciario, los médicos llegaron rápidamente y "se llamó a una ambulancia". "Se llevaron a cabo todas las medidas de reanimación necesarias, pero fracasaron, añadió el comunicado, sin aclarar la causa de la muerte.
Desde el propio viernes, han sido detenidas más de 300 personas en concentraciones que han tenido lugar en toda Rusia para recordar a Navalni, cuya muerte es un duro golpe para la disidencia.
"Más de 340 personas ya han sido detenidas en monumentos espontáneos a Alexei Navalni. 230 de ellas fueron detenidas hoy", publicó la ONG OVD-Info, especializada en el seguimiento de detenciones en su canal de Telegram.
"Si estás en Rusia y quieres depositar flores o salir a protestar, OVD-Info está contigo", añadió el grupo.
En San Petersburgo, las fuerzas de seguridad dispersaron a decenas de personas que acudieron al monumento a las víctimas de la represión política en Voskresenskaya.
Entre los detenidos en esa localidad se encuentran dos periodistas, el fotógrafo de Novaya Gazeta, Alexei Dushutin, y la reportera del canal RusNews Elina Kozich.
También se produjeron detenciones en las inmediaciones de la Piedra Solovetski de Moscú, en la plaza Lubianka, frente a la sede del KGB. Los habitantes de la capital depositaron flores en el monumento.
Según informaciones del diario The Moscow Times, la periodista de RusNews Yulia Petrova fue arrestada en la zona.
OVD-Info también indicó que se registraron concentraciones en el exterior. Más de un millar de personas se han manifestado en ciudades como Ereván, en Armenia, Tiflis y Batumi, ambas en Georgia, así como en la capital de Turquía, Estambul, y las de Serbia, Francia, Alemania, Polonia, Portugal, Reino Unido, Lituania y Letonia, entre otras.
Navalni fue internado el 20 de agosto de 2020 inconsciente en estado grave en la zona de cuidados intensivos del hospital de Omsk en Siberia. Su portavoz denunció que había "sido envenenado". Un día después y pese al rechazo por parte de los médicos, un avión medicalizado salió de Alemania hacia Omsk para trasladar al opositor ruso a Berlín.
A principios de septiembre, Navalni salió del coma inducido y, en los días finales del mes, recibió el alta del hospital. Fue en enero de 2021 cuando el opositor de Putin regresó a Rusia, pero fue arrestado al cruzar el control de pasaportes, acusado de incumplir las condiciones de una condena previa por "corrupción".
El 4 de agosto de 2023 recibió una condena de 19 años bajo cargos de apoyar el extremismo. La pena se sumó a la anterior y a otra de dos años y medio emitida en 2021 por supuesto desvío de fondos en el denominado caso Kirovles, que se remonta a 2013, indicó El País.
La defensa del opositor, así como sus seguidores, afirman que este último caso había sido fabricado para mantener a Navalni lejos de la esfera política por un periodo aún más prolongado de tiempo. Además, la declaración de su movimiento político como "extremista" intensificó su aislamiento político.
