Back to top
Emigración

México y EEUU avanzan en política migratoria para terceros países que es cuestionada por diversas ONG

La política migratoria que parecen estar discutiendo Biden y AMLO pasaría por evitar que los migrantes de terceros países logren ingresar a territorio de México.

Brasilia
Anthony Blinken (izq.) y Andrés Manuel López Obrador, en octubre de 2021.
Anthony Blinken (izq.) y Andrés Manuel López Obrador, en octubre de 2021. Reuters

Con dos presidentes que dejaron atrás sus promesas electorales, ya que siendo candidatos prometían promover los derechos humanos de los migrantes, y en medio de los cuestionamientos de las ONG tanto de México como de EEUU, los gobiernos de Andrés Manuel López Obrador y de Joe Biden avanzan en el diseño de una política basada en el control y expulsión de migrantes.

Las fotos difundidas por el Gobierno mexicano mostraron una reunión cordial. AMLO (el acrónimo del presidente de México) recibió al secretario de Estado de EEUU, Antony Blinken, y al de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, en una reunión en la que también participó la asesora de Seguridad de la Casa Blanca, Elizabeth Sherwood-Randall, dejando en claro la preeminencia que tiene para el actual Gobierno de EEUU la crisis migratoria sin precedentes de este 2023.

Con elecciones en 2024, tanto en EEUU, donde Biden busca la relección, como en México, donde AMLO apuesta a la continuidad de su gestión con la candidatura de Claudia Sheinbaum, ambos gobiernos temen el impacto negativo que pueda tener en materia de opinión pública que suceda una oleada migratoria mayor a la ya muy alta registrada este año, con millones de migrantes de muy diversos países atravesando México con el objetivo de cruzar sin documentación a territorio estadounidense.

Entre octubre de 2022 y septiembre de 2023, que comprende el año fiscal estadounidense, las autoridades migratorias de EEUU dieron cuenta de más de 3,2 millones de detenciones de migrantes sin documentación. El año fiscal anterior ya se había establecido un récord de 2,7 millones de aprehensiones. Expertos en estudios migratorios estiman que por cada detención al menos otros tres migrantes posiblemente logran su objetivo de ingresar a EEUU sin documentación.

Esta masiva movilidad humana, cuyo plan central no incluye establecerse en México, también colapsa los servicios públicos en diversas localidades pequeñas o medianas, además de que muchos migrantes de diversas nacionalidades tras ser aprehendidos en EEUU terminan por establecerse en territorio mexicano, de manera temporal o permanente.

Por otro lado, recientemente el Gobierno de Biden ha admitido que su interés en tener un canal de negociación con el régimen de Nicolás Maduro está relacionado con controlar el flujo migratorio de venezolanos. Gracias a esas conversaciones directas se establecieron vuelos de repatriación en este 2023, con miles de venezolanos devueltos a Caracas, incluso algunos que habían documentado ser perseguidos por el chavismo.

México, entretanto, ha funcionado como lugar de acogida para muchos migrantes devueltos de EEUU. La política migratoria que parecen estar discutiendo Biden y AMLO pasaría por evitar que los migrantes de terceros países logren ingresar a territorio de México, a cambio de que se permita la movilidad de mexicanos hacia EEUU y que se establezcan controles fronterizos más estrictos.

Después de cuestionar a su antecesor, Donald Trump, por la construcción de un muro fronterizo, Biden ha optado por destinar fondos a ese proyecto. Y el mensaje de su administración es que, si el migrante no tiene visa o permiso de ingreso por razones humanitarias, que debe ser tramitado previamente, no será bienvenido.

Siendo candidato, AMLO prometió el respeto de los derechos humanos de los migrantes. Sin embargo, los testimonios de venezolanos, cubanos y haitianos, entre otras nacionalidades, reflejan un trato violento y abusos de diverso tipo por funcionarios mexicanos.

La reunión de alto nivel de este 27 de diciembre ha tenido como telón de fondo la última y más numerosa caravana de migrantes de este 2023. La noche de Navidad unas 8.000 personas, según estimaron periodistas presentes, partió desde el municipio de Huixtla, en el estado de Chiapas, en la frontera entre México y Guatemala.

Para la activista mexicana Ana Lorena Delgadillo, esta caravana que se denominó "Éxodo de la pobreza", constituye un claro ejemplo de cómo se vive "un éxodo que es el resultado directo de la enorme desprotección que viven frente a la violencia, inseguridad, falta de oportunidades y en muchos casos, la ausencia de Estado de derecho".

Cubanos, venezolanos, hondureños, haitianos y salvadoreños, están siendo parte de esta caravana cuyos voceros han pedido medidas humanitarias a los gobiernos de México y EEUU para poder movilizarse y que se les permita ingresar a territorio estadounidense.

"No es la militarización, la detención y la deportación masiva lo que va a traer resultados. Es preciso generar vías seguras para la migración en sus diferentes etapas, así como una política de regularización", manifestó Delgadillo, directora de la Fundación para la Justicia, en una comunicación dirigida a los gobiernos de México y EEUU.

Por su parte, la Oficina en Washington para América Latina (WOLA, por sus siglas en inglés) emitió también un duro comunicado pero dirigido en específico al Gobierno de Biden y a los dos partidos representados en el Congreso de EEUU, Republicano y Demócrata.

"Es hora de ser realistas sobre los factores que impulsan la migración, garantizar el debido proceso a las personas que necesitan protección, proporcionar vías legales adicionales para la migración y trabajar con países de todo el hemisferio que también están recibiendo cifras récord de personas migrantes, refugiadas y solicitantes de asilo", sostiene el comunicado de WOLA.

Varias organizaciones de derechos humanos, entretanto, cuestionaron la tribuna que le brindó AMLO a las dictaduras de Cuba y Venezuela en una reunión celebrada a fines de octubre para debatir sobre la crisis migratoria que se agudizó en este 2023. En dicho espacio, Miguel Díaz-Canel y Nicolás Maduro acusaron a las medidas coercitivas de Washington como responsables de la migración masiva en sus países y evitaron la autocrítica sobre sus propias medidas, y la falta de libertades, como detonante para la emigración.

Archivado en
Más información

1 comentario

Necesita crear una cuenta de usuario o iniciar sesión para comentar.

Y como van a haver dinero sus amigos de los carteles,pues la extortion y secuestro de immigrants es una de sus formas de obtención de capital...