A diez meses de las elecciones presidenciales en México, el presidente Andrés Manuel López Obrador no está disfrutando, pese a tener un registro muy alto de apoyo según los sondeos, con una sucesión que ocurra sin sobresaltos. Xóchitl Gálvez es el nombre de la senadora opositora que, con sus polémicas apariciones públicas y el uso de las redes sociales, está dando de qué hablar.
Gálvez ha tenido un triunfo simbólico en las últimas semanas por un careo público con el presidente López Obrador, copando espacios en la discusión política electoral, incluso por encima de la carrera que tiene lugar entre los adláteres del jefe de Estado, de cara a la selección del sucesor o sucesora dentro de pocas semanas.
Senadora por el conservador Partido Acción Nacional (PAN), el partido que obtuvo el triunfo en 2000 cuando se quebró la hegemonía por décadas del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Gálvez ha logrado posicionarse públicamente como una figura independiente. Su origen indígena y sus posiciones a favor de un Estado social le dan una suerte de singularidad. Lo que sí no parece estar en discusión es su capacidad para entender y aprovechar el momentum, ese punto exacto para catapultarse con éxito a la escena pública.
"Sus posibilidades se abrieron de pronto, cuando a pesar de tener una orden judicial de derecho de réplica contra el presidente en su conferencia matutina, este no la dejó entrar. Ella fue a Palacio Nacional (sede del Ejecutivo) y tocó la puerta rodeada de medios, en un show político estridente y llamativo que en México ha sido siempre patrimonio de la izquierda populista que está en el poder", sintetiza el periodista cubano-mexicano Rubén Cortés la irrupción pública de la veterana política, quien ya ocupó cargos públicos a inicio de los 2000 con el Gobierno de Vicente Fox (PAN).
"El cierre de puertas en el Palacio Nacional le abrió de pronto las puertas de la candidatura del Frente Amplio de la oposición", sostiene Cortés, quien ha sido director de los diarios mexicanos La Razón y ContraRéplica.
Gálvez no es una recién llegada al debate público mexicano. Ya en 1999 obtuvo el reconocimiento por el World Economic Forum de Davos Suiza, como una de las "100 líderes globales del futuro del mundo". Se ha movido entre actividades empresariales y posiciones en el sector público. En 2018 fue electa como senadora por el PAN, e incluso en ese año López Obrador le invito a que formara parte de su primer gabinete de Gobierno.
Gálvez ha devenido en una de las aspirantes presidenciales con mayor presencia pública y mediática en la coalición opositora que tienen el PAN, PRI y el Partido de la Revolución Democrática (PRD), en lo que ha sido bautizado como Frente Amplio.
La senadora se ha consolidado como la figura con mejor opinión positiva de la oposición, de acuerdo con la encuesta del diario El Financiero de este mes de julio. Su imagen, según especialistas en comunicación política, se ha potenciado debido a los ataques y señalamientos del presidente López Obrador.
Pese a tener una prohibición del Instituto Nacional Electoral (INE) de que se refiriera en público a Gálvez, a mediados de julio Andrés Manuel López Obrador difundió documentos fiscales que eran de carácter confidenciales para dejar en evidencia que la senadora ha tenido contratos con su Gobierno y con gobiernos anteriores.
"López Obrador ya se obsesionó con la senadora Gálvez y creo que, con ello, cumpla o no las disposiciones del INE, va a propiciar que las posibilidades de Xóchitl de ganar la candidatura del frente opositor se disparen", sostiene Enrique Quintana, director de El Financiero, al analizar el salto positivo que ha tenido la aspirante presidencial en las últimas semanas.
"En su forma personalista de hacer política, con base en el carisma y el desenfado para expresarse sin temor a las formas establecidas, es Xóchitl Gálvez lo más parecido en la oposición, al estilo que llevó a López Obrador al poder", precisa Cortés.
Aunque el periodista cubano-mexicano describe una "xóchitlmanía" en la política mexicana en las últimas semanas, cree que también podría desinflarse ya que no es la principal carta del PAN: "No es una militante de prosapia y carece de estructura partidista y de recursos para una empresa tan grande como lograr la candidatura de tres partidos (PAN PRI y PRD)".
Sin embargo, si los partidos y movimientos de oposición se unifican en torno a la senadora Gálvez, para Cortés, sería la mejor opción en la venidera campaña presidencial.
"Es una candidata infinitamente superior a la favorita del presidente. Xóchitl Gálvez emociona, tiene una sonrisa genuina, y un gracejo popular de raigambre, como el del propio presidente López Obrador; mientras Claudia Sheinbaum es todo lo contrario, parece tener una máscara", proyecta el veterano periodista, autor de diversos libros, principalmente de crónicas, editados en México.
Aunque Xóchitl Gálvez le ha arruinado la campaña interna al partido Morena para elegir a la figura de sucesión, para sustituir a López Obrador, generando contrapunto con el propio presidente y captando la atención de este, una encuesta reciente del diario El País muestra que, si las elecciones fuesen en este momento la exjefa de Gobierno capitalino, Claudia Sheinbaum, le duplicaría en votos.
Pero no está nada mal para alguien que, como Gálvez, hace escasas semanas estaba, como confesó en Twitter, deshojando la margarita, definiendo sí optaba por la elección para la jefatura de Gobierno capitalina o para la presidencia.
Si la senadora del PAN es un real peligro para que Andrés Manuel López Obrador le coloque a uno de sus delfines la banda presidencial el año próximo lo sabremos próximamente. Según el columnista Héctor Aguilar Camín, "el presidente de México se dispone a repetir en Xóchitl Gálvez el desafuero que le practicaron a él. López Obrador activó ya las denuncias penales, que a su vez activarán la investigación de las fiscalías, para construir las acusaciones que permitan desaforar a la senadora y sacarla de la contienda presidencial".
"Para derrumbar la posible candidatura a la Presidencia de Gálvez, López Obrador cuenta con muchos instrumentos. Abundan ya, y proliferarán, los insultos, las mentiras, el acoso, las filtraciones, y todo aquello a lo que nos ha acostumbrado en sus pleitos con adversarios. Pero es posible, incluso probable, que no baste para descarrilar esta candidatura. Por ello, viene la judicialización", pronostica, por su parte, el excanciller Jorge Castañeda.
Si el presidente López Obrador apela a esta estrategia, como visualizan analistas y observadores, estaría repitiendo 20 años después la historia, pero ahora en el papel de verdugo, ya que el actual mandatario denunció que el desafuero del cual fuera víctima él fue orquestado en su momento por el entonces mandatario Vicente Fox (2000-2006).
-------Xóchitl si, AMLO no----------------Xóchitl si, AMLO no----------------Xóchitl si, AMLO no----------------Xóchitl si, AMLO no----------------Xóchitl si, AMLO no----------------Xóchitl si, AMLO no----------------Xóchitl si, AMLO no----------------Xóchitl si, AMLO no----------------Xóchitl si, AMLO no----------------Xóchitl si, AMLO no----------------Xóchitl si, AMLO no----------------Xóchitl si, AMLO no----------
Los mexicanos como siempre esclavos de los carteles y políticos corruptos,país de m....