EEUU, Italia y la mayoría de los países vecinos de China someterán a PCR a los viajeros provenientes del gigante asiático, mientras que la Comisión Europea estudia una respuesta coordinada al desafío que supone la apertura de fronteras en ese país, que vive la mayor ola de contagios de Covid-19 registrada desde el inicio de la pandemia.
China, donde se detectaron los primeros casos de la enfermedad en diciembre de 2019, sufre el colapso hospitalario después que las autoridades retiraran las restricciones a la movilidad e incluso abrieran las fronteras a los viajes, empujadas por fuertes y masivas protestas en grandes ciudades.
El final de la drástica política de "covid cero" se produjo en un contexto de bajas tasas de vacunación entre los ancianos; un sistema sanitario deficiente en algunas zonas; una población harta de las eternas restricciones; las fiestas por el Año Nuevo chino a la vuelta de la esquina; una información epidemiológica que llega incompleta y a cuentagotas, y con el resto del mundo mirando de reojo la situación, tras haber pasado ya por las fases de desescalada mucho tiempo atrás.
EFE resumió que fue primero la OMS quien expresó su inquietud, al tiempo que pedía a China más información y mejor vacunación; luego, los países del entorno fueron reaccionando poco a poco, incorporando requisitos a los viajeros procedentes de China.
El miércoles la alarma llegó a Occidente, con el anuncio de que Estados Unidos e Italia someterán a pruebas PCR a las personas que lleguen del país asiático. Además, la Comisión Europea estudia imponer medidas coordinadas para enfrentar la situación.
"A la luz de la situación actual del Covid-19 en China, la Comisión ha convocado al Comité de Seguridad Sanitaria esta mañana para debatir con los Estados miembros y las agencias de la Unión Europea (UE) posibles medidas para un enfoque coordinado", indicó a EFE Daniel Ferrie, portavoz de la Comisión.
"Si la situación epidemiológica lo requiriese, podrían reintroducirse medidas relacionadas con el Covid-19 de forma coordinada y siguiendo un enfoque basado en las personas", añadió, sin ofrecer detalles.
Japón, India y Malasia también anunciaron medidas restrictivas para resguardarse de la importación de variantes desde China.
Ferrie señaló que la variante ómicron BF7 del coronavirus, prevalente en China, ya está presente en Europa y "no ha crecido significativamente. No obstante, permanecemos vigilantes y estaremos preparados para utilizar el freno de emergencia en caso necesario", comentó.
Estados Unidos justificó su decisión de imponer pruebas a viajeros procedentes de China no solo por el aumento de contagios en el país, sino por la falta de información adecuada y transparente por parte de Pekín, lo cual temen que pueda hacer pasar desapercibida una nueva variante del coronavirus potencialmente peligrosa.
"Esto tendrá un efecto cascada sobre el resto del mundo"
El virólogo español Luis Enjuanes describió la situación china como "preocupante" para el resto del mundo. Si bien "estamos mucho más preparados, hay muchos contagios y esto supone que habrá muchas más mutaciones y surgirán nuevas variantes", advirtió, en entrevista con el diario El País.
"Esto tendrá un efecto cascada sobre el resto del mundo. Más contagios siempre provocan más casos graves y más fallecidos, e implica más riesgos", advirtió.
Enjuanes criticó que se haya dejado correr al virus "libremente" entre una población "poco inmunizada" y que muchos de los habitantes del país aún no hayan pasado la enfermedad, lo que los hacen más vulnerables, por lo que les recomendó vacunarse.
El portavoz de Exteriores chino, Wang Wenbin, dijo a la prensa que Pekín espera "que todos los países tomen decisiones en base a la ciencia y que, además, garanticen la recuperación económica global y una cadena de suministros estable".
Además, sin ofrecer estadísticas fiables, aseguró que la situación se encuentra "bajo control" y dentro de "lo esperado".
No obstante, según estimaciones de la consultora británica Airfinity, alrededor de 5.000 personas estarían falleciendo a diario en China a causa del nuevo coronavirus, mientras las autoridades reportan en todo diciembre apenas una decena de muertes por esa causa.
La nueva política sobre el tema en China precisa que las autoridades solo contarán como muertes por coronavirus aquellas que se deban a neumonía o fallos respiratorios en infectados, no las que se produzcan por enfermedades cardiovasculares, cerebrovasculares o ataques al corazón.
Asimismo, el Gobierno dejó de ofrecer el parte diario de infecciones, para empezar a hacerlo público una vez a la semana o al mes.
Según cifras oficiales, en las tres primeras semanas de diciembre, China registró 62.592 casos sintomáticos de Covid, mientras que un informe de las autoridades sanitarias nacionales que recoge el Financial Times cifró en 250 millones los contagios que se produjeron en esas mismas fechas.
Los paises empiezan a controlar sus fronteras y en Cuba miran para otro lado, cuando el virus empiece de nuevo y hayan miles de muertos la culpa, será como siempre del "bloqueo".
Desde que vea que la tienda del chino de abajo de mi casa cierra, ya es que la cosa está bien j... así fue la otra vez, los "chinos" cerraron todos antes de que el gobierno anunciara el confinamiento.
Si Biden no se pone las botas y empieza a chequear a todos los viajeros de ese país como está haciendo Italia, le deseo suerte. Trump hizo lo mismo, no empezó hacer chequeo a tiempo y lo de más es historia.