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México

2022 será el año más mortífero para el periodismo mexicano

El Gobierno de Andrés Manuel López Obrador se mantiene sin actuar ante los asesinatos a periodistas.

Caracas
Cartel en contra de los asesinatos a periodistas en Veracruz, México.
Cartel en contra de los asesinatos a periodistas en Veracruz, México. La Jornada

Con los asesinatos de las periodistas Yesenia Mollinedo Falconi y Sheila Johana García, registrados en Veracruz, México, este 9 de mayo, suman 11 en lo que va de 2022, con lo cual el presente año se convierte en el más mortífero para el periodismo mexicano desde que comenzó a registrarse esta particular violencia, que ha tenido lugar a lo largo del siglo XXI.

Las dos mujeres fueron asesinadas en un mismo hecho, cuando estaban frente a un establecimiento comercial. Mollinedo Falconi se desempeñaba como directora de la agencia informativa El Veraz, con información y cobertura de local de Veracruz, mientras que García era camarógrafa del mismo medio.

La semana pasada, por otra parte, fue encontrado en Sinaloa el cuerpo de Luis Enrique Ramírez Ramos, fundador del sitio web informativo Fuentes Fidedignas. En años recientes Ramírez Ramos había manifestado públicamente temor de ser asesinado.

"Yo sí siento el peligro inminente de que yo soy el que sigue, porque hay un patrón, en cuatro asesinatos recientes, incluido el de Humberto (Millán), en el que yo encajo", denunció. Ramírez Ramos dijo esto luego del asesinato de Humberto Millán, quien era director del medio digital A Discusión.

Tal como sostuvo DIARIO DE CUBA, 2022 se inició de forma nefasta para el periodismo en México. Cuatro periodistas fueron asesinados en enero, dando una señal clara de que la violencia contra los informadores había pasado, lamentablemente, a otro nivel, sin que esto representara un llamado de atención para actuar por parte del Gobierno de Andrés Manuel López Obrador.

Desde el 2000, cuando comenzaron a registrarse los casos de asesinatos de periodistas, estos hechos se han repetido de forma incesante, sin que las autoridades hayan demostrado capacidad de detenerlos o de castigar a los responsables. Desde que inició su gobierno en 2018, López Obrador no ha colocado este asunto entre las prioridades oficiales, pese a que México ha sido calificado en diversas ocasiones como el país más peligroso para el ejercicio del periodismo.

En respuesta al asesinato de Mollinedo Falconi y García, el Comité de Protección de Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés) dijo estar en estado de shock, mientras que Fundamedios denunció que "México se desangra" y pidió una clara respuesta oficial.

En México tienen lugar unos 100 asesinatos de personas cada día, generalmente por armas de fuego. Es un hecho que parece haberse convertido en parte de la cotidianeidad del país. Según organizaciones defensoras de derechos humanos, la impunidad para cualquier clase de asesinato supera el 90%.

En el caso de los periodistas, empero, la impunidad es casi total. De acuerdo con la organización internacional de libertad de prensa Artículo 19, que ha priorizado su trabajo en México, allí el 99,13% de crímenes contra comunicadores no han sido resueltos.

A juicio de Pedro Vaca, relator para la libertad de expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), la impunidad es un acelerador de la repetición de las agresiones en contra de los periodistas en México.

Al documentar históricamente esta violencia en el país, un fenómeno del siglo XXI, Artículo 19 sostiene que la responsabilidad del 40% de los asesinatos recae en funcionarios públicos locales, que van desde alcaldes, jefes de seguridad del municipio, hasta uniformados de cualquier cuerpo (policiales o militares).

Inicialmente el asesinato de periodistas en México estaba claramente asociado a la violencia del narcotráfico. Esto sigue presente, pero dado que el poder fáctico del tráfico de drogas también ha penetrado las propias estructuras del poder político y judicial, esto ha permitido que se repita el patrón de asesinatos no investigados, y por tanto sin responsables juzgados o encarcelados por matar a comunicadores.

El gobernador Cuitláhuac García, militante del militante del Movimiento Regeneración Nacional (Morena), partido de López Obrador, dijo que encontrarán a los perpetradores del crimen de las dos periodistas ocurrido la noche del lunes 9. "Habrá justicia y no habrá impunidad como lo hemos dicho y hecho en otros casos. El Gobierno ya no es omiso ni cómplice, vamos tras ellos", aseveró.

Desde inicios de 2000 hasta estos últimos casos, Artículo 19 ha documentado el asesinato de 153 periodistas en México. La lista de los 11 asesinados hasta ahora en este 2022 es la siguiente: Yesenia Mollinedo Falconi y Sheila Johana García (Veracruz), Luis Enrique Ramírez (Sinaloa), Armando Linares López (Michoacán), Juan Carlos Muñiz (Zacatecas), Jorge Luis Camero Zazueta (Sonora), Heber López Vázquez (Oaxaca), Roberto Toledo (Michoacán), Lourdes Maldonado y Margarito Martínez (Baja California).

El primer asesinato de este 2022 tuvo lugar el 10 de enero, precisamente en Veracruz, cuando fue abaleado el periodista José Luis Arenas Gamboa.

La suma de 11 periodistas asesinados, cuando ni siquiera se ha llegado a la mitad del 2022, hace de este el año más mortífero —de lejos— para el periodismo mexicano. En 2021, en todo el año se registraron nueve decesos de comunicadores, mientras que 2016 y el 2017 habían sido, hasta ahora, los años más nefastos cuando se registraron 11 y 12 asesinatos de reporteros, respectivamente.

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