Nicolás Maduro prepara su relevo: su hijo se presenta a las elecciones parlamentarias en Venezuela

Nicolás Ernesto Maduro Guerra, el hijo del actual mandatario venezolano, presentó su candidatura por el estado de La Guaira a las elecciones parlamentarias que tendrán lugar el próximo mes de diciembre en Venezuela, alimentando el temor que Nicolás Maduro lo esté preparado para un relevo político.

"Soy Nicolás Ernesto, el hijo de un chófer de autobús y una secretaria que al irrumpir la esperanza que fue Chávez se fueron detrás de ese sueño que el comandante representó", afirma "Nicolasito", como muchos lo conocen, en uno de los videos donde promueve su candidatura.

"Mi papá siempre quiso que yo fuera pelotero, pero yo me fui por la música. En la música aprendí lo que es la constancia, la disciplina, el trabajo en equipo. Valores que he implementado en diferentes responsabilidades que me han tocado vivir y que el día de hoy me traen hasta aquí", agrega el candidato, que guarda un gran parecido físico con su padre.

Maduro Guerra, también graduado de economía, ha estado en el foco de numerosas polémicas en Venezuela, tanto por sus radicales declaraciones políticas como por haber bailado bajo una lluvia de billetes en la boda del empresario sirio-venezolano José Salt, en 2015, cuando la crisis económica venezolana tomaba cuerpo.

En 2017, cuando las protestas llegaron a su punto álgido en las calles de Venezuela, el joven amenazó a los Estados Unidos con una fuerte respuesta militar si intentaran invadir a Venezuela.

"Si se diera el supuesto negado de mancillarse el suelo patrio, los fusiles llegarían a Nueva York, señor Trump, tomaríamos la Casa Blanca, (porque) hasta Vietnam se quedaría pequeño", afirmó en una sesión de la ilegal Asamblea Nacional Constituyente, de la cual es miembro.

Pese a las controversias de los años anteriores, la agencia EFE señala que en su actual carrera por un puesto en el Parlamento venezolano Maduro Guerra está intentando dejar atrás las polémicas y se presenta como el candidato de la juventud y de las ciencias, un ámbito en el que su país, cree, tiene posibilidades de mejora.

A sus 30 años de edad, Maduro Guerra tiene experiencia en la administración pública, pues su padre le ha asignado numerosos cargos en el país, por lo que ha sido acusado de nepotismo en varias ocasiones y muchos temen que con él esté preparando su relevo.

La primera de las polémicas designaciones de Nicolás Maduro a favor de su hijo tuvo lugar en 2014, cuando con solo 24 años se convirtió en jefe del Cuerpo de Inspectores Especiales de la Presidencia de la República, un órgano creado para multiplicar los ojos supervisores del Gobierno.

Posteriormente ocupó cargos como coordinador de la Escuela Nacional de Cine y ejerció un rol importante en la Juventud del Partido Socialista Unido de Venezuela, que también preside su padre.

Además de los puestos que ostentó en la Administración chavista, su padre le habría regalado varias minas de oro, diamante y coltán en el Arco Minero del Orinoco, al sur del país, para que las administre, aseguró el diario español ABC.

En un reportaje publicado por el diario venezolano La Razón sobre la disminución de las reservas de metales en Venezuela desde la llegada de Nicolás Maduro al poder, aparecieron declaraciones del diputado opositor en el exilio, Carlos Paparoni, quien aseguró que "su hijo, Nicolás Maduro Guerra, y Santiago Morón son los encargados de la operación de la venta del oro, intercambio por euros, que terminan en manos de grupos extremistas terroristas".

Maduro Guerra fue sancionado por el Departamento del Tesoro de EEUU, que en junio de 2019 lo acusó de lucrarse de las minas venezolanas junto a su padre y sancionó por su participación en "actividades de corrupción" y por formar parte de la "inconstitucional Asamblea Nacional Constituyente (ANC), que rige Venezuela con poderes absolutos bajo el control del mandatario". 

Entre los capítulos destacados de la vida política del que podría ser algún día presidente de Venezuela está el viaje que realizó en julio del año pasado a Corea del Norte y gracias al cual recibió el alias de "el Kim Jong-un tropical".

Durante la visita acudió a los grandes desfiles militares y afirmó: "La lucha del pueblo coreano es justa. Y más que eso, es humana. Y como tal, es nuestra también. Por eso esta visita es histórica, porque nos permite aprender de ustedes, de su modelo de resistencia y de sociedad". 

Al menos 30 partidos de oposición han calificado de fraudulentas las próximas elecciones parlamentarias, por lo que han decidido no presentarse, mientras los analistas calculan que estarán marcadas por una participación muy baja de electores.