Contando ya con un número de votos electorales que hacen irreversible su victoria, Joe Biden como presidente electo de EEUU centrará las próximas semanas en definir su gabinete en el cual la política exterior será un asunto clave, teniendo a China y Rusia como las principales prioridades del Departamento de Estado, según analistas consultados por DIARIO DE CUBA.
América Latina no parece estar entre las prioridades de la nueva administración que deberá enfocarse en recomponer la alianza atlántica con los países de la Unión Europea, en aras de hacer un frente común a las amenazas que representan Rusia y China para la democracia y para la influencia internacional de EEUU.
América Latina "seguirá siendo no necesariamente prioritaria en la política exterior de EEUU; no es un tema en el cual se vayan a concentrar los esfuerzos de la política exterior" en la nueva administración de Biden, que se iniciará en enero de 2021, sostiene el analista Andrés Serbin, presidente de la Coordinadora Regional de Investigaciones Económicas y Sociales (CRIES).
Desde Buenos Aires, en respuesta a preguntas formuladas por DIARIO DE CUBA, Serbin dijo no percibir que hacia la región "vaya a ocurrir un cambio drástico en relación a lo que veníamos viendo con la Administración Trump".
A su juicio, posiblemente el nuevo Gobierno de Biden presente para América Latina iniciativas que tengan como eje la defensa y fortalecimiento de la democracia y los derechos humanos.
Este último aspecto, de enfatizar el eje democracia y derechos humanos, fue mencionado también como posibles ejes de Biden para América Latina por la analista venezolana Elsa Cardozo, exdirectora de la escuela y la maestría en Estudios Internacionales de la Universidad Central de Venezuela (UCV), al ser consultada por DIARIO DE CUBA.
Cardozo y Serbin, por otro lado, visualizan como un asunto ineludible para Biden la política migratoria, y eso le llevará a revisar lo hecho por Trump en relación con México y Centroamérica.
"Por el impacto del tema migratorio dentro de EEUU, puede preverse un cambio de política en relación con México y Centroamérica. Quizá dándole el impulso al programa América Crece (Growth in the Americas)", adelanta Serbin.
El presidente del CRIES cree que las acciones de EEUU en la región latinoamericana y caribeña podrían tener como prioridad frenar la influencia china en Centroamérica o la ascendencia rusa en países como Venezuela y, eventualmente, Bolivia.
El tema de Cuba constituye un caso aparte. "Estamos en interrogación sobre Cuba", admite Serbin. Una opción es que retomando lo que fue la política de Barack Obama (2008-2016) hacia Cuba, Biden apueste a una nueva normalización de las relaciones con la Isla y su longevo régimen.
"Pero en verdad las prioridades van a estar en la rivalidad estratégica con China y a eso se sumará Rusia, como centro de atención", dice el experto.
Retomar a Rusia como una prioridad ante lo que se percibe como una amenaza, incluso para la propia democracia estadounidense, es cónsono según Serbin con la posición de los demócratas.
Tras la derrota de Hillary Clinton en las elecciones de 2016, "los demócratas han venido identificando a Rusia como una amenaza para EEUU y gracias a esto sí habrá más disposición a contener la presencia e influencia de Rusia y también la de China en América Latina", asegura el analista.
Sin que implique que América Latina pase a ser el foco principal de la política exterior a partir de enero venidero, Cardozo considera que la Administración Biden podría sostener, al contrario de los cuatro años de Trump, "una visión de conjunto para la región, con algunas iniciativas".
"La presencia china y rusa en América Latina será asunto de preocupación para el Departamento de Estado y la Casa Blanca y eso podría ayudar a darle relevancia a la región", en el marco de prioridades de Washington, explica Elsa Cardozo.
Bajo ese prisma habrá un foco de atención sobre Venezuela, ya que es punto de confluencia en la región de adversarios estratégicos de EEUU, dada la alianza pública del régimen de Nicolás Maduro con Rusia, China e Irán.
Serbin y Cardozo pronostican un retorno con fuerza de EEUU a las instancias multilaterales y el fortalecimiento de la alianza histórica entre Washington y la Unión Europea, eventualmente relanzando a la OTAN, como paraguas institucional frente a la amenaza que provenga de Rusia, especialmente, y de China.
Para la exdirectora de la Escuela de Estudios Internacionales de la UCV, Venezuela podría ser una "pieza clave" en la agenda común que se construya entre Washington y Bruselas.
Tanto estos analistas como otros sostienen que podrá hacerse una lectura más acotada cuando ocurra la designación de la persona que estará al frente del Departamento de Estado, cosa que Biden podría anunciar en breve para darle un mensaje a la comunidad internacional.
Ya hace mucho tiempo que para los norteamericanos América Latina no es prioridad. Al momento del golpe de estado de Pinochet en Chile, América Latina representaba el 30% de sus inversiones internacionales, ahora escasamente llegan al 7%. . Esa despreocupación les ha traído serios problema en la región. No hay que ser ningún experto para saber que los mas afectados seremos los cubanos si Biden es presidente.
Todavia hay algunos ilusos que estan en etapa de negacion.Comiencen la etapa de llanto y resignense hasta el 2024 y votar por el cerebro de Trump en el cuerpo de Ivanka.
Entonces la Kamajana Harris irá a La Habana a re-abrir la empbajada. ¡Qué emoción!
Alloooooo!!! Autor anonimo espera al menos que gane las elecciones porque hasta el momento todo esta muy nubuloso, todavia no te enteras o que?
No Mike, la política será "retomar lo que fue la política de Barack Obama hacia Cuba, y se apuesta a una nueva normalización de las relaciones con la Isla y su longevo régimen."
Más claro no te lo pudieron dar.
Si CUBA recibe un trato ''paralelo'' a estos aspecto generales de política exterior de una nueva Admon. norteamericana será entonces de apaga y vamos.