El Gobierno de Argentina manifestó su preocupación por los derechos humanos en Venezuela y pidió elecciones transparentes y creíbles durante una reunión del Consejo de Derechos Humanos de la ONU.
La delegación argentina ante ese organismo expresó este miércoles una "profunda preocupación" por la grave crisis política, económica y humanitaria que padece ese país.
"Solo el orden constitucional, la democracia y el Estado de derecho harán posible garantizar el pleno respeto y ejercicio de todos los derechos humanos en Venezuela. En este sentido, nos hacemos eco del reciente llamado de la Alta Comisionada en favor de una negociación política inclusiva, basada en los derechos humanos y en la restitución de los derechos políticos", señaló Federico Villegas, embajador argentino ante los organismos internacionales en Ginebra, reportó el diario Clarín.
Villegas hizo referencia al nuevo informe de Michelle Bachelet sobre ese país, que denunció la falta de independencia judicial en Venezuela y los crímenes que cometen grupos armados en la zona del Arco Minero del Orinoco, una superficie equivalente al 12% del territorio venezolano que ha sido declarada como zona estratégica por el régimen de Nicolás Maduro.
El diplomático sostuvo que Caracas está obligada "a incrementar los esfuerzos para encontrar una salida pacífica, política y negociada a esta grave crisis multidimensional, liderada por los propios venezolanos a través de elecciones inclusivas, transparentes y creíbles".
Además, instó al régimen de Nicolás Maduro a cooperar plenamente con el Consejo de Derechos Humanos de la ONU y sus mecanismos, y a implementar las recomendaciones hechas por la Alta Comisionada en su informe.
En la misma reunión participaron representantes de Uruguay, España, Portugal, Australia, Francia, Japón, la Unión Europea, Perú, Brasil, Croacia, Colombia, República Checa, Luxemburgo, Dinamarca, Países Bajos, Austria, Ecuador, Suiza, Eslovenia, Alemania, Reino Unido y Georgia, entre otros.
Esos países condenaron los abusos del régimen de Nicolás Maduro y su pretensión de realizar elecciones parlamentarias fraudulentas con un Consejo Nacional Electoral impuesto inconstitucionalmente.
Las críticas de Buenos Aires suponen la pérdida de un apoyo importante para Maduro y un giro destacado en el discurso del Gobierno de Alberto Fernández hacia Caracas, luego de que, de conjunto con México, se abstuviera de votar una condena al régimen venezolano el 27 de junio último, durante una sesión de la Organización de Estados Americanos (OEA).
Esa votación acabó con una condena por mayoría a Maduro por designar ilegalmente un Consejo Nacional Electoral progubernamental para supervisar las próximas elecciones de una nueva Asamblea Nacional en Venezuela.
Los aliados de Maduro en América Latina se reducen ahora a los gobiernos de Cuba, Nicaragua y México. En este último caso, el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, dijo recientemente que está dispuesto a vender combustible al régimen venezolano por razones "humanitarias".
ALBERTO FERNÁNDEZ cuida su imagen política.
La cofradía de los amiguitos de maduro comienzan a dejarlo solo.Parece que ,por estrategia política,han decidido "venderlo como carne de puerco" aunque sea realmente,de tiñosa! El gob. cubano ,al final ,quedará como único "socito" pues su supervivencia depende de el gob. madurista!