El presidente ecuatoriano, Lenín Moreno, dijo revisaría el decreto que elimina los subsidios al combustible con los grupos indígenas y sociales que han liderado protestas masivas en su contra, pero no indicó que piense en revocarlo como le habían exigido, reportó Reuters.
En un mensaje por televisión, Moreno sostuvo que "buena parte" de Quito estaba en calma después de que los militares impusieron un toque de queda, tras duros enfrentamientos entre la policía y manifestantes. La restricción permanecerá vigente hasta nuevo aviso, añadió.
Naciones Unidas en Ecuador informó en su cuenta de Twitter que una primera reunión entre el Gobierno y los grupos indígenas se realizará el domingo a las 3:00PM hora local en Quito.
Moreno también dijo, en su mensaje por televisión, que propondría exigir que las compañías privadas paguen a los empleados un bono de 20 dólares por mes.
Este domingo, el papa Francisco dijo que "sigue con preocupación" la situación en Ecuador y alentó a "buscar la paz social", antes del rezo del Ángelus, precisó otro reporte de la AFP.
'No dejen que nos maten'
"¿Dónde están las madres y los padres de los policías? ¿Por qué dejan que nos maten?", clamó entre lágrimas la indígena Nancy Quinyupani.
La prensa también fue blanco de la violencia. Manifestantes atacaron las instalaciones de Teleamazonas y del diario El Comercio. El canal, que se mantiene al aire, desalojó a 25 trabajadores sin reportar víctimas.
"Por cerca de media hora fuimos atacados, empezaron a apedrear, forzar las puertas y luego a lanzar bombas incendiarias", relató Milton Pérez, periodista y presentador de Teleamazonas. El Comercio, principal periódico de Quito, denunció en Twitter que su sede fue atacada, sin ofrecer más detalles.
La CONAIE negó que sus militantes estén implicados en esos asaltos. Moreno acusó a su antecesor Rafael Correa y al mandatario venezolano, Nicolás Maduro, de estar tras lo ocurrido el sábado.
"Fuerzas oscuras, vinculadas a la delincuencia política organizada y dirigida por Correa y Maduro —en complicidad con el narcoterrorismo, con pandillas, con ciudadanos extranjeros violentos— causaron zozobra, violencia nunca antes vista", expresó.
Ambos líderes han rechazado entre burlas los insistentes señalamientos de Moreno.
En el poder desde 2017, Moreno enfrenta su mayor crisis por las reformas que convino con el FMI para aliviar el pesado déficit fiscal que achaca al derroche, endeudamiento y corrupción del Gobierno de Correa.
Además del fin de subsidios, las medidas prevén recortar derechos a empleados públicos.
Los indígenas, que representan el 25% de los 17,3 millones de ecuatorianos, son el sector más castigado por la pobreza y principalmente trabajan en el campo.
Con la liberación de los precios de los combustibles, deben pagar más para transportar sus productos al tiempo que temen una inflación generalizada.
Presidente, tiene usted una situación muy delicada , interna y quizás por maices externos desestabilizadores... mano firme pero justa.